PANISMO CON ENFERMEDAD POR LA NÓMINAS, DICE JUAN JOSÉ.
– El 18 no solo se juega el futuro del PAN sino del país, dice.
– Hay panistas asustados que no saben si elegir entre el regreso a los principios o avalar la deshonestidad y desviación.
– No se puede mejorar Jumapam sin voluntad y compromiso.
Alfredo Ramírez O.
Como todo buen político tabasqueño, con la ebullición sanguínea de los del sureste, Juan José Rodríguez Prats es aferrado a su postura, enfático en su discurso y terco; por eso, en el pasado se le recriminó que descalificara a AMLO cuando tiene las mismas virtudes satrapaícas, que no por eso, menos apreciables y valoradas.
Se apasiona cuando habla de historia, principios democráticos y la urgente necesidad de cambiar el rumbo del país.
Esta convencido de que el próximo domingo 18 del presente, con la elección del dirigente del PAN a nivel nacional, no solamente se juega el futuro del partido sino del tipo de país que se pretende, uno donde se pueda vivir y respetar la dignidad humana o uno donde se avasalle, prevalezca el mando de la autoridad vertical o el dinero permita decidir preferencias y moldear conciencias.
Enfatiza que lo que pasa al interior del PAN no solo es problema de dicho partido sino de todos los ciudadanos, cuestión que se traslapa al resto de los partidos; por lo que, dice, debe de intervenir la ciudadanía desde una óptica participativa y actuante.
La ciudadanía debe de reconciliarse con la política, porque sigue viéndola como algo despreciable, que ensucia y afecta enormemente el proceso de consolidación democrática.
“Tenemos que entender que si no nos involucramos, lo van a hacer otros con toda la perversidad buscando intereses personales”.
Lo que no reconoce Rodríguez Prats es que incluso el político más puro, inmaculado o decente busca también intereses particulares.
Siento en lo personal que a Juan José no le quedó otra más que arrimarse al fogón de la candidatura Cordero – Oliva; aplicando aquel viejo principio de que entre los males, hay que elegir el menor.
Y no es porque Ernesto Cordero sea malo, simplemente es ignaro con problemas para conectar la lengua con la masa craneana; o que Oliva no deje de ser …lo que es.
Por ello, Rodríguez Prats analizó fríamente la encrucijada y entendió que a estas alturas de su vida, no puede permanecer al margen e irse a rumiar al desierto. Hay que participar, aunque en el fondo las opciones no sean las buenas.
Lo único bueno de Cordero es que representa una oposición dentro de su partido y una postura dura e incisiva ante las barrabasadas que esta cometiendo el Peñanietismo con su política entreguista y su afán mediático hollywudense.
Los políticos no caímos de Marte, sino que emergemos de la sociedad mexicana y por ello no podemos deslindarnos ni trazar zanjas sino crear redes de solidaridad y asumir responsabilidades; señala enfático; empero, no se ven esas virtudes desde los tiempos de Guerrero o Melchor Ocampo o de Cárdenas, a pesar de lo pícaro que fue este último.
Cierto es que hay una crisis moral y los ciudadanos apechugan la situación de corrupción e inmoralidad en que está sumergido el régimen; pero en ello también contribuyeron Vicente Fox y Lipe Calderón, el sujeto que hizo perder la fé.
Lo que dice de Madero se aprecia cierto y eso se aprecia en miles o millones de mexicanos.
Sobre las cacareadas encuestas, Rodríguez Prats dice que la única profesión que no tiene futuro es al del profeta y añade que ha observado a muchos panistas asustados porque en el panismo, al igual que en otros partidos, ( sobretodo en los cascajos que quedan de la izquierda y los partidos negocio) hay la enfermedad de las nominas, por ello es la presión, por ello aparentan obedecer a la autoridad en el partido, pero manifiesta su confianza en que simplemente soslayen ante las encuestas sus preferencias.
“Confío en que del panismo surja la inconformidad en relación a la gestión de Gustavo Madero, que ha dejado mucho que desear, que ha habido desviaciones y deshonestidad y la participación del panismo nos lleve a superar lo que es tal vez el reto más importante en la historia del PAN, porque cerrando filas en torno a la disciplina y principios del PAN recuperaremos la confianza ciudadana para dar la batalla que se avecina en los próximos años”, concluye.
Como ciudadanos simples y corrientes, mas corrientes que simples, hay que esperar que en la noche del 18 de mayo no salga alguien por ahí imitando a otros candidatos perdedores de los otros partidos que se dicen robados y gritan fraude cuando no se les favorece.
Hay que esperar madurez entre un Madero satrapaíco que ahora se hace el simpático besaniños y quebrapiñatas y un Cordero al que le sigue resultando muy difícil borrar de la memoria colectiva sus dislates declarativos.
LA DEL ESTRIBO. Así pongan a Juan Camaney o traigan a James Bood, la Jumapam no saldrá adelante mientras la autoridad no enfrente y asuma tres retos y costos políticos: el endeudamiento necesario para hacer las obras de corazón abierto que necesita la ciudad; el impulsar modificaciones a la ley para que se les corte el agua a los que se retrasan en los pagos y meta a la cárcel a los morosos y, por último, enfrentar el rechazo de una sociedad que por todo patalea siguiendo el ejemplo de algunos hoteleros. HLP..DM.
