Personas desplazadas por la violencia en la zona serrana piden apoyos al Ayuntamiento

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*El Municipio ha solicitado apoyo al Ejército para que los acompañen a recoger sus bienes

* Bienestar Social Rural hará un archivo digital para empadrona a estas familias

 

Personas desplazadas por la violencia que impera en la zona rural de Mazatlán acudieron a la oficina de Bienestar Social Rural a pedir apoyos para subsistir y la ayuda para ir a sus hogares a recoger sus pertenencias.

Manifestaron que ya tiene meses que viven algunos con familiares que habitan en invasiones de esta ciudad  y otros más en pueblos como El Recodo y Lomas de Monterrey.

En su mayoría mujeres, las que acudieron al palacio municipal, dijeron que ya no pudieron seguir en las comunidades que las vieron nacer, debido a la inseguridad que priva y temen por sus vidas.

Aparte de ir por sus cosas, ellas quieren que el Municipio las reconozca como personas desplazadas para que se haga una lista y puedan tener acceso a los servicios de salud, ya que no tienen ese apoyo.

Las comunidades que poco a apoco se han ido quedando solas son La Chapalota, Tecomate de La Noria, El Zapote, El Guamuchilito y otros pueblos, donde las matanzas están al orden del día y no se ve vigilancia.

Por su parte el director de Bienestar Social, Héctor Gabriel García Salazar, dijo que ellos tienen un padrón de desplazados, pero de momento los que han acudido son 19 familias que habitan cerca de El Recodo a pedir la ayuda para tener servicios médicos.

Al respecto el funcionario municipal comentó que están en pláticas con personal de la Tercera Región Militar para que junto con agentes municipales escolten a las personas y puedan traerse sus objetos personales y si alguien tiene ganado y quiere dejarlo en otros pueblos, ahí se le pide a los desplazados que ayuden a buscar en que mover esos animales.

Dijo que de manera tentativa la ida a esos pueblos sería a partir del 7 de julio y se prevé que sean cuatro días para realizar estas labores.

Lo que se busca es que no se ponga en riesgo la integridad física de las familias, indicó.