– Las privatizaciones son un asunto de correlación de fuerzas.
– Un hecho que transitarán juntos el PRI y el PAN.
– Toda reforma debe de someterse a consulta pública.
En estos momentos México está viviendo una coyuntura donde pueden ocurrir cosas muy importantes para los próximos 50 años, y en virtud de ello las reformas en el sector energético, que sin dura resolverán la ruta del futuro de nuestra economía, deben de abrirse a debate y una amplia información hacia la sociedad; consideró el doctor Pedro Brito Osuna.
Dijo que si bien son tres las iniciativas formales, están se reducen a dos: la de las fuerzas de izquierda y las de derecha, donde se unen el PAN y el PRI en una amplia coincidencia sonde pretenden reformar los artículos 27 y 28 de la Constitución para que las empresas privadas puedan participar en la exploración, explotación, refinación, petroleoquímica, transporte y distribución de productos petroleros y sus derivados , bajo la premisa de que puede haber riesgo compartido pero sobretodo utilidades compartidas.
La propuesta de la izquierda, dice, enfatiza en la propiedad de la nación sobre los productos energéticos y en razón de ello de la limitación que debe de haber respecto de la posibilidad de la injerencia de empresas particulares en el campo; aunque si acepta la posibilidad de que participen como se hizo antes de la reforma de los años sesenta.
“Lo que en el fondo está ocurriendo es una escala más en el modelo neoliberal que llevaría a la privatización del sector, es decir, lo que no se había privatizado desde el gobierno de De La Madrid hasta Calderón ahora lo trataría de hacer Peña Nieto, justamente con las dos joyas de la corona que son Pemex y las CFE”, expresó.
Las propuestas de reforma energética es un asunto de correlación de fuerzas y de urgencia de mercado; pero las condiciones no siempre ocurren comentó el doctor en sociología de la Universidad Autónoma de Sinaloa y explicó que es un asunto de mercado porque se tiene la creencia de que la demanda de petrolero crecerá en los primos 20 años, porque una vez agotado ese tiempo se habrán desarrollado las fuentes alternativas de energía y en ese sentido el precio tenderá a bajar.
Critico el hecho de que en México el Estado se ha estado deshaciendo de empresas vinculantes pata el desarrollo para dejarlas al libre flujo de capital y mercado como en el caso de Teléfonos de México, la banda y otros sectores y ahora pretende entregar el sector energético.
Para concluir hizo un llamado a la población para que se informe ampliamente del asunto y no se deje el tema exclusivamente en manos de los diputados y senadores.
“Sería un error dejar solos a los representantes, es decir que la Nación resuelva a través de los diputados y senadores sería demasiado riesgoso, es necesario implicar a la sociedad en una discusión pública y consulta; recordemos que nadie de ningún partido dijo en las campañas electorales que iban a reformar la Constitución”.