Caso Nafta, un Ejemplo de la Corrupción de Este Trienio

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*Más de mil expedientes, dice Elsa Isela

*Me voy con el deber cumplido

Más de mil expedientes, denuncias, quejas o querellas, presentó la Síndico Procuradora de Mazatlán, Elsa Isela Bojórquez Mascareño, de las cuales “muchas tuvieron solución”, entre ellas el caso Nafta a pesar que desde un principio y hasta ahora está plagado de corrupción pues se pagan 141 millones de pesos cuando los empresarios querían alrededor de 300 millones de pesos.

La maestra universitaria y gente muy comprometida con los principios de la izquierda reconoce que tuvo un valladar muy importante para cumplir con su trabajo en la figura del alcalde mazatleco, pero aun así logró entrar a varias dependencias de gobierno a “fiscalizar” los programas y la aplicación de recursos como fue el caso del Instituto del Deporte en donde se emitieron 62 recomendaciones que obligó al titular de esa paramunicipal a la renuncia.

“No es un logro quitar a un director pero si desde antes me hubieran permitido entrar a verificar los programas no hubiera pasado eso; mi función es revisar programas y recursos, enrumbar las cosas”, subrayó desde la austeridad de sus oficinas en la calle de Mariano Escobedo al recordar que se hicieron varias auditorías en distintas dependencias de gobierno.

En la entrevista reconoció que el asunto que más la hizo “trabajar” fue el caso Nafta, por lo viciado y el entramado de corrupción desde los orígenes y desde la administración de Alejandro Higuera. Indicó que se le “hizo muy raro que a su llegada, este gobierno, de inmediato quisiera pagar unos 300 millones de pesos y les tumbé más de la mitad”.

En las preguntas, Elsa Isela con gesto convencido afirma que se “va con el deber cumplido como síndico procuradora porque era una labor que había estado opaca en las pasadas administraciones; recuperamos la credibilidad de las personas en esta instancia de gobierno”.

Como siempre ha sido, desde este gobierno, la maestra universitaria no tuvo palabras de reconocimiento para el alcalde Benítez Torres y mucho menos para un contralor interno, como Rafael Padilla, que detuvo los expedientes de la corrupción, como lo fue la larga lista de más de 30 personajes acusados de nepotismo.

Sin embargo, a tres semanas de dejar el cargo de manera institucional por cambio de gobierno y en donde Bojórquez Mascareño ya tiene una propuesta para trabajar con el gobernador electo de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, no se abre a la

crítica directa contra Benítez Torres y solamente dice que en estos tres años “no hubo los cambios esperados. Pudimos hacer más”, enfatizó.