Manuel Añorve afirma que es posible que los campesinos trabajen en esto de forma legal
Ciudad de México.- Una vez que se legalice el uso medicinal de la marihuana y en su caso su uso recreativo, la bancada del PRI en el Senado de la República va por la regulación y despenalización de la siembra y cultivo de la amapola en el país.
«México es considerado uno de los paraísos en la siembra de amapola, pues se calcula que hay alrededor de 28 mil hectáreas en el país que se utilizan para la siembra de esa planta, de las cuales aproximadamente la mitad se ubica en Guerrero”, explica el senador priísta, Manuel Añorve Baños.
Detalla que tan solo en Guerrero se produce una tercera parte de la amapola y que los campesinos pobres son perseguidos, cuando su trabajo puede ser legal para producir medicamentos y no abastecer el mercado ilícito de las drogas, sobre todo el opio y la morfina.
Localidad
Dichos cultivos se ubican en la zona conocida como Tierra Caliente, correspondiente a la Sierra Madre del Sur. Tan solo en Guerrero, agrega, unas 120 mil personas siembran y cosechan amapola; en su mayoría son campesinos de comunidades pobres y aisladas.
«Cabe recordar que en esa entidad existen organizaciones, como el Comité de Productores de Amapola, que agrupa a casi mil 280 pueblos que se dedican a esta actividad y demandan la legalización de la siembra de esa planta”, afirma.
Hace unas semanas, Añorve presentó una iniciativa en el Senado para regular el cultivo, cosecha y producción de la amapola, donde establece que los ejidatarios, productores rurales, las sociedades rurales, los pequeños propietarios agrícolas y cualquier otra persona física o moral que aproveche tierras parceladas y/o agrícolas que participen en el proceso de los medicamentos que contengan estupefacientes y psicotrópicos necesitarán autorización sanitaria para efectuar dichas actividades.
Información de: Tribuna