LA CUADRILLA – UPSIN: EXPLOSIÓN Y CRISIS

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Explosiva la renuncia de nuestro estimado Maestro Jorge Guevara Reynaga a la Rectoría de la Universidad Politécnica de Sinaloa (UPSIN). Seis días, como los que Dios usó para hacer el mundo, ocupó para percatarse de que el encargo tenía el encanto del erizo: espinas por doquier.

Se esperaba que las nuevas autoridades educativas de Sinaloa, como parte de un gobierno progresista, desplegara más creatividad para hacer las cosas, por ejemplo, integrar la terna con académicos de la UPSIN (los hay con excelente nivel y experiencia) y aplicar el procedimiento de consulta a la comunidad universitaria como la fórmula de la Democracia Participativa puesta de moda por el Gobierno de la Cuarta Transformación y llevar los resultados a la Junta Directiva, máximo órgano de autoridad de la UPSIN.

Pero no hay mucha imaginación ni ganas de cambiar el libreto; en descargo, la designación del Maestro Guevara sonaba atinada: ex-Rector de la UAS, funcionario importante en la SEP Federal, ex-Rector de la Politécnica de Elota. Experiencia administrativa y una hoja de servicios sin mancha de corruptelas.

El punto es que el Maestro Guevara (por cierto un excelente Profe de polinomios y ecuaciones cuadráticas), no estuvo dispuesto a cargar con el costal de broncas y conflictos; quizá también encontró un ambiente no muy propicio para desplegar sus propuestas.
Expuso un santo rosario de excesos en todo: oferta educativa, matrícula, sueldos altos en directivos, derroche en gastos operativos y de representación (incluye los celulares de lujo). En resumen: una galopante crisis financiera, para lo cual se necesitan 130 millones de subsidio anual.

No coincido en lo de exceso de oferta educativa y matricula, que el maestro Guevara ubica en 2011, año en que entra una nueva directiva.

El Artículo 3 del Decreto de Creación de la UPSIN (septiembre, 2004), la faculta para que contribuya en: “la adopción y asimilación de tecnologías de vanguardia”. Eso hizo la nueva directiva, a las tres carreras fundacionales (Informática, Biotecnología y Mecatrónica) agregaron 8 programas más, entre otros, las ingenierías en: Tecnología Ambiental, Energía, Biomédica, Nanotecnología. Oferta educativa innovadora y de vanguardia.

Para esto se había construido una relación intensa y dinámica con la Coordinación General de Universidades Politécnicas, cada propuesta se acompañaba de documentos pensados y elaborados junto con los líderes académicos de la UPSIN, de tal modo que fluían los recursos financieros sin contratiempo; incluso en algunas ocasiones la propia SEPYC le tiraba mordiscos a lo gestionado por la Directiva.

Creo que en 2015-16, se llegó a lo que en Biología llamamos Homoestasia o equilibrio funcional, con un número ideal de estudiantes, tres mil, el recomendado a nivel mundial. Lo que seguía era consolidar todo los procesos y articular investigación-docencia-administración.
Pero llegó el cambio de gobierno estatal y se descuidó y relajó la organización y se vinieron los excesos que descubrió el Maestro Guevara. No hay que buscar culpables, sino encontrar las soluciones.
Conozco la planta académica de la UPSIN, cuando menos la que había hasta el 2016 y creo que ahí siguen, es una comunidad diversa, académicos de formación excelente con Doctorados, Maestrías y Licenciaturas pertinentes; claro como en toda comunidad docente hay problemas en la aplicación de estrategias didácticas, pero se mostraban abiertos a explorar enfoques alternativos; sobretodo no padecían del fatídico síndrome de Burnout (el profe quemado, flaco y sin ilusiones); más bien era un colectivo echado para adelante, identidad plena con la institución y ganas de trabajar.

Por eso, no es necesario buscar elementos externos a la UPSIN, de ahí se puede formar la terna, encuestar a la comunidad universitaria (ya tienen un sistema automatizado de consulta), que la Junta Directiva tome la decisión y nombre al nuevo Rector. Se está a tiempo de rescatar una Institución que ya era un referente de Educación Superior de calidad en la región sur de Sinaloa. Ojalá y no se les fabrique un conflicto como el que padece el CIDE en la CdMex. Pendientes.

(Nota. Por el conflicto, no hay ningún riesgo en los trámites de titulación y obtención de la Cédula Profesional: lo que se sabe es que todas las carreras están registradas en la Dirección de Profesiones de la SEP, no importa que rector esté al mando).