· Puede ser hemorragia interna o externa
· Mareo, náusea, vómito, piel fría y sudorosa, así como una sensación de desmayo, algunos síntomas de hemorragia interna
Una hemorragia se presenta cuando se interrumpe la continuidad de los tejidos vivos y puede ser interna o externa, siendo la interna la más peligrosa, debido a que es difícil detectarla sin la ayuda de un médico, informó el encargado de la coordinación de Prevención y Atención a la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Natividad Salomón Medina Carrillo.
Indicó que cuando se presenta una hemorragia interna, las personas pueden presentar algunos síntomas como mareo, náusea, vómito, piel fría y sudorosa, así como una sensación de desmayo.
El médico del IMSS señaló que en caso de que la persona sufra un desvanecimiento, debe ser acostada, con los pies elevados a unos 15 centímetros por arriba del nivel del suelo para ayudar a que se irrigue el cerebro y así evitar daños en este órgano. En estos casos, destacó. Se debe trasladar urgentemente a la unidad médica más cercana.
Destacó Medina Carrillo que cuando se presenta una hemorragia externa, es necesario usar guantes para evitar el contagio de alguna enfermedad. En caso de que la herida sea en la cabeza –que por lo general ocasionan una grave pérdida de sangre-, se deben colocar gasas estériles o trapos limpios directamente sobre la herida para contener la hemorragia.
Cuando exista algún objeto incrustado en la piel, éste no debe ser removido ya que puede estar deteniendo una hemorragia aún mayor, por lo que debe colocarse el material de curación alrededor de la lesión, y en caso de que las gasas se empapen de sangre, colocarle otras encima de las ya cubiertas.
El médico del IMSS refirió que las hemorragias nasales se presentan comúnmente en caso de golpes o por resequedad nasal. En estos casos se debe coloca al paciente sentado con la cabeza inclinada hacia adelante, y utilizar los dedos pulgar e índice para comprimir firmemente las alas de la nariz por unos diez minutos. Si el sangrado no se detiene, será necesario acudir al médico ya que la lesión puede ser más profunda.
Resaltó que si la hemorragia proviene de la boca, está indicando un alto riesgo, por lo que mientras llega la asistencia médica, es recomendable acostar al paciente con los pies elevados del suelo unos 15 centímetros y voltear la cara de lado para evitar que se vaya a ahogar con su sangre, y no darle nada de beber al paciente.
El encargado de la coordinación de Prevención y Atención a la Salud del IMSS enfatizó que el uso de torniquetes es la última opción para controlar una hemorragia, ya que en muchas ocasiones éstos pueden llevar a la pérdida de la extremidad, debido a que una vez que se aplica la presión en la zona ya no se puede aflojar y con ello se corta la circulación de manera definitiva, ocasionando muerte del tejido.
En todos los casos, puntualizó, evitar hacer uso de remedios caseros y procurar la atención de un médico para que le brinde el trato que corresponda a su padecimiento.
