Si 2021 fue el año de las misiones a Marte, este año podría estar dominado por los viajes a la Luna. Aquí presentamos el calendario espacial.
Los vuelos espaciales ofrecieron espectáculos inagotables en 2021.
Por momentos, llegó a ser abrumador. Dos nuevos róveres aterrizaron en Marte, uno de ellos a la sombra de un helicóptero experimental. Dos multimillonarios fueron al borde del espacio y un tercer multimillonario llegó más arriba, hasta la órbita. Luego William Shatner voló al espacio y un cuarto multimillonario disfrutó una estadía en la Estación Espacial Internacional.
Eso no fue todo. China comenzó a construir una estación espacial completamente operacional, pero dependió de un cohete de gran tamaño que alcanzó la órbita y luego no pudo ser controlado cuando parte de él volvió a ingresar en la atmósfera. A bordo de la Estación Espacial Internacional, un par de contratiempos hicieron que la estación a diera giros inesperados en la órbita. La NASA se despidió de un asteroide y regresó a la Tierra con varias muestras del mismo. La NASA también lanzó una nueva misión para estrellarse contra otro asteroide con el objetivo de estudiar posibles defensas de la humanidad contra alguna futura colisión de rocas espaciales.
Muchas más cosas sucedieron a lo largo del año y 2022 promete estar igual de ajetreado. Puedes seguir estos y otros grandes momentos registrándote en el Calendario Espacial y Astronómico Times [en inglés] en este enlace.
A continuación, presentamos lo que podría suceder en la exploración espacial en 2022.
Rugirán enormes cohetes
En algún momento de este año, se espera que despeguen dos cohetes que nunca han estado en el espacio: el Sistema de Lanzamiento Espacial de la NASA (SLS, por su sigla en inglés) y Starship de SpaceX.
Ambos cohetes son enormes y completamente distintos.
EL SLS es el vehículo de lanzamiento interplanetario de la NASA. Lleva años de retraso y miles de millones de dólares por encima del presupuesto previsto. Construido por contratistas aeroespaciales tradicionales, cada lanzamiento cuesta alrededor de 2000 millones de dólares y cada cohete solo se puede utilizar una vez. La NASA afirma que su programa Artemis no puede volver a llevar astronautas a la Luna sin el enorme cohete. Su primer vuelo de prueba, sin tripulación humana, llevará una cápsula llamada Orion alrededor de la Luna y de regreso a la Tierra. El lanzamiento de la misión, llamada Artemis 1, está programado para marzo o abril.
En contraste, Starship está siendo construido de manera exclusiva por SpaceX. El cohete totalmente reutilizable es fundamental para el plan de Elon Musk, el fundador de la compañía, de enviar humanos a Marte. También hay planes de una versión de Starship para el descenso de astronautas de la NASA en la superficie lunar. La mitad superior plateada de la nave espacial ha realizado múltiples vuelos de prueba a gran altitud que terminaron en explosiones espectaculares. Completó un aterrizaje exitoso en una prueba. En algún momento durante el año se tiene previsto que un prototipo de Starship sin tripulación a bordo conecte con una etapa propulsante reutilizable. Tras despegar de un sitio de lanzamiento de SpaceX en Texas, el cohete se pondrá en órbita antes de caer en la costa de una isla hawaiana.
La Luna podría recibir muchos visitantes
Si 2021 fue el año de las misiones a Marte, el próximo año podría estar dominado por los viajes a la Luna. Hasta nueve misiones de una variedad de países y empresas privadas podrían intentar orbitar la Luna o alunizar.
Cinco están patrocinadas por la NASA y algunas tienen perspectivas más claras que otras de completarse a tiempo. Además de la cápsula Orion que tiene previsto rodear la Luna y regresar a la Tierra, Rocket Lab podría enviar un CubeSat, un satélite miniatura, llamado CAPSTONE, desde su sitio de lanzamiento en Nueva Zelanda en marzo. Estudiaría una órbita lunar que podría ser utilizada por una futura base lunar europea y de la NASA. Otras tres misiones con rumbo a la superficie lunar son obra de empresas privadas patrocinadas por el programa Servicios Comerciales de Carga Útil Lunar de la NASA. Esa iniciativa apunta a repetir el éxito de la NASA de confiar en compañías como SpaceX para transportar carga y, más adelante, astronautas a la estación espacial. Intuitive Machines, una compañía de Houston, podría ser la primera empresa en intentar el viaje.
El resto de los visitantes robóticos a la Luna en 2022 provienen de otros países. India podría reintentar su fallido alunizaje de 2019 en el verano. Rusia afirma buscar alunizar por primera vez desde 1976. Un orbitador lunar de Corea del Sur podría despegar en un cohete SpaceX en agosto. Una compañía japonesa, ispace, está trabajando en un módulo de alunizaje para transportar diversos cargamentos, entre ellos un róver de los Emiratos Árabes Unidos, a la superficie de la Luna. Aún no se sabe con certeza cuáles de estas misiones cumplirán su cronograma.
La finalización de la estación espacial de China
Últimamente, China ha cumplido su palabra cuando afirma que su programa espacial alcanzará cierto plazo. Así que, si dice que terminará de construir la estación espacial Tiangong en órbita en 2022, hay grandes probabilidades de que así sea.
En 2021, China agregó su módulo espacial Tianhe a la órbita terrestre baja y envió dos tripulaciones de astronautas a vivir allí. La segunda tripulación llegará a casa en algún momento de 2022 y, quizás para mediados de año, un módulo de laboratorio llamado Wentian podría ser lanzado a la órbita para acoplarse con el módulo Tianhe. Más adelante en el año, una tercera pieza, el laboratorio Mengtian, podría completar la estación espacial Tiangong.
Se tiene previsto que tanto Wentian como Mengtian sean lanzados en el cohete más grande de China, el Long March 5B. En mayo, ese cohete asustó a muchas personas cuando comenzó un reingreso descontrolado a la atmósfera terrestre y planteó la posibilidad improbable pero no imposible de causar daños y lesiones al aterrizar. Aunque el cohete cayó sin incidentes en el océano Índico, no se sabe con certeza si China cambiará la manera en que se gestiona. Eso significa que dos veces más en 2022, los terrícolas podrían volver a participar en el juego “¿Dónde caerá esta vez?”.
Encuentros con asteroides
La NASA ha estudiado de cerca numerosos asteroides, pero ahora planea chocar contra uno de forma deliberada. En septiembre, se espera que la Prueba de redireccionamiento de un asteroide binario (DART, por su sigla en inglés) colisione contra Dimorphos, una pequeña roca que orbita alrededor de un asteroide más grande, Didymos. La colisión con un asteroide es una táctica potencial para la defensa planetaria: si una roca espacial gigante se dirige hacia la Tierra, algunos científicos afirman que la mejor apuesta de la humanidad es desviar su trayectoria para que no colisione contra nuestro planeta. La misión DART proporcionaría datos sobre la efectividad de esta estrategia.
Otros asteroides llaman la atención. Psyche, un objeto enorme en el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter, parece estar compuesto principalmente de hierro y otros metales. Eso sugiere que, en la historia temprana del sistema solar, Psyche fue el núcleo de un objeto que no logró convertirse en planeta. Una misión científica de la NASA que lleva el nombre del objeto tiene previsto un lanzamiento durante el verano en un cohete Falcon Heavy de SpaceX. La nave espacial, cuya llegada está programada para 2026, proporcionaría a los científicos un primer vistazo a este extraño mundo metálico.