*¡Cuidado con los niños!
*AMLO, jugar con las vidas
*Desautoriza a Delfina
¡CUIDADO CON LOS NIÑOS!
Lo que siempre era un feliz regreso a las escuelas, parece que este año será muy triste, con miedo y preocupación por los contagios del Covid. Pero hay mucha necedad desde el Presidente de la República, la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, hasta la tibieza del gobernador Quirino Ordaz Coppel, quien debería de apoyarse en el Federalismo y la autonomía de los estados para diferir unos meses más el regreso a las aulas de miles de niños y jóvenes sinaloenses. No hacerle caso al Primer Mandatario, además ya dijo López Obrador que si los papás no quieren mandar a sus hijos a la escuela presencial, “no hay problema, no pasa nada”.
A nivel mundial, según la OMS, el 6 por ciento del total de los contagios, está entre los niños. Mientras, en los EU el número de niños hospitalizados por covid-19 ha alcanzado cifras récord, mientras la variante delta sigue impulsando una oleada de nuevas infecciones en todo el vecino país.
Según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) en la Unión Americana, hasta este sábado poco más de 1,900 niños habían sido hospitalizados por covid-19, informó Reuters. El número de hospitalizaciones relacionadas con el nuevo coronavirus ha aumentado en forma pronunciada, particularmente en el sur de Estados Unidos, donde los datos más recientes del HHS muestran que, a escala nacional, el número de personas de 18 a 29, de 30 a 39 y de 40 a 49 años de edad que fueron hospitalizadas la semana pasada también alcanzó cifras récord.
Por desgracia en México, como siempre, no hay información cierta sobre los menores de edad que han muerto o están contagiados; sólo se habla en lo general de los casi 250 mil decesos y los más de tres millones de contagios, pero poco o nada de los infantes.
En tanto, continúan los pros y contras sobre el regreso de millones de niños a las clases presenciales en todo el país para el 30 de agosto. Los padres de familia no se oponen a que los pequeños retornen a las aulas, lo que demandan es la seguridad de que sus hijos no se contagien de la Covid-19 y sus variantes.
Incluso, poco a poco surgen los errores que las autoridades corrigen o enmiendan y las medidas absurdas se cancelan. Por ejemplo, ya se dijo que será opcional el regreso a clases y que a nadie se obligará a hacerlo.
El regreso a clases plantea la necesidad de que los niños cuenten con la higiene necesaria, así como la infraestructura adecuada en las instalaciones. Y por eso se hacen las siguientes interrogantes:
Quién vigilará a los pequeños desde el punto de vista sanitario para que se cumplan las medidas como el uso del cubrebocas y la sana distancia?. Las aulas tendrán la ventilación adecuada que no permita la invasión de la Covid-19?
Y cuándo se conocerá el reporte oficial en Sinaloa o Mazatlán de las escuelas que cuentan con los servicios de agua potable suficientes para el lavado constante de manos?
De lo contrario, ¡cuidado con los niños!, no los expongamos en regreso a clases sin las suficientes medidas y cuidados de salud.
AMLO, JUGAR CON LAS VIDAS
Sobre el mismo tema, pero desde la óptica del Gobierno federal, ya el Presidente de la República aseguró que el regreso a clases presenciales es voluntario, por lo que sí hay maestros que no lo hacen, “no hay problema”. Tampoco la carta responsiva será obligatoria.
El Mandatario si bien reiteró que es importante que niñas, niños y adolescentes regresen a los colegios, convivan con sus compañeros y docentes, la aplicación medida para un retorno a estos espacios educativos es voluntaria.
“No es obligatorio, es voluntario, si hay maestros que no quieren dar clases porque tienen preocupaciones, pues no hay problema. Sostenemos que si estamos a favor de la educación y si nos importa la educación debemos demostrarlo con hechos, porque si no el discurso”, señaló en la “mañanera” de ayer martes.
El Presidente reiteró que la asistencia a clases presenciales y la carta responsiva para enviar a menores a las escuelas son voluntarias, aunque llamó a la ciudadanía a tomar riesgos y a salir.
“No es obligatorio, que lleven a los niños a la escuela, se les va a cuidar y tenemos que correr riesgos en la vida, todos corremos riesgos; vamos a salir y a enfrentar la realidad y confiar en que nos va a ir bien, porque la suerte también juega en esto. Si nosotros supiéramos que van a correr riesgos los niños, pues sencillamente no se inicia el ciclo escolar”, apuntó.
Dijo que la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, sostiene diálogo con todos los actores que intervienen en el proceso de educación, como la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) que manifestó no hay condiciones para un retorno presencial a las aulas.
No dejó de retomar la crítica a sus presuntos adversarios y dijo que hay una campaña que en primera instancia pareciera contra el regreso presencial a las escuelas, pero que en realidad es contra el Gobierno federal, “es contra nosotros, es político”, aseveró.
El Presidente casi por decreto dijo hace unas semanas en Veracruz que habrá regreso a clases presenciales el lunes 30 de agosto “llueve, truene o relampaguee”… No está jugando con la vida de 30 millones de niños y jóvenes en el país?
DESAUTORIZA A DELFINA
El mismo Presidente de la República no está de acuerdo con algunas acciones y desautoriza a Delfina Gómez y afirma que cada persona debe decidir por sí y que no es necesaria la carta responsiva.
Sostuvo que no habrá sanciones para los profesores que decidan no acudir a las escuelas. Simplemente manifestó que si los maestros no van a las aulas “no hay problema”.
Dijo que la demanda de entregar esa carta responsiva surgió de niveles bajos de su gobierno, en donde todavía quedan funcionarios que fueron educados con los ahora repudiados lineamientos conservadores y neoliberales.
“La carta no es obligatoria, si no llevan la carta no le hace. Es que nosotros aquí tenemos todavía que enfrentar esta concepción burocrática, autoritaria, que se heredó del periodo neoliberal, entonces, ¿ustedes creen que yo tuve que ver con la carta?, pues no, fue una decisión de abajo, si me hubieran consultado yo hubiera dicho que no”, manifestó.