Lo soñó, trabajó en ello y dio el primer gran paso. El pugilista originario de Mazatlán, Marco Verde, estudiante de la Licenciatura en Nutrición de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) se complicó, pero derrotó por decisión dividida al indio Nishant Dev este sábado en la Arena Paris Nord. Con ello, el mexicano aseguró al menos la medalla de bronce en el peso mediano de los Juegos Olímpicos de París 2024.
Sin embargo, Verde tiene en la mente llevarse la medalla de oro, por lo que buscará avanzar a la final cuando enfrente al británico Lewis Richardson el próximo martes 06 de agosto en el estadio Roland Garros.
Un combate intenso y de alto nivel fue el que protagonizaron Verde y Dev, el mexicano demostró una técnica depurada, conectando golpes certeros que marcaron la diferencia en las tarjetas de los jueces; a pesar de la férrea resistencia de su rival, Marco logró imponer su ritmo y llevarse el triunfo.
El primer round lo ganó el boxeador de la India, por lo que Marco tuvo que venir de atrás para imponerse en el segundo y en el tercero para llevarse el pase a las semifinales y asegurar medalla.
Sin embargo, pase lo que pase sobre el cuadrilátero, estará en el podio del torneo gracias a las reglas de los Juegos Olímpicos.
Ya que la naturaleza de la disciplina implica mucho desgaste y graves repercusiones a la salud de los atletas se decidió en 1952 que solo habría una medalla de oro y una de plata, evitando así un combate adicional para disputar el bronce. Esta decisión se tomó después de observar las condiciones físicas de los boxeadores en los Juegos Olímpicos de Londres 1948.
Fue 24 años después, en Múnich 1972 cuando se acordó la concesión del doble bronce no solo para reducir el riesgo de lesiones al evitar combates adicionales, sino que también reconocía el esfuerzo y el sacrificio de los boxeadores que habían llegado a esa instancia de la competencia.
Cabe mencionar que la medalla de Verde es la primera en boxeo desde la de Misael Rodríguez en Río de Janeiro 2016 y la 14 en la historia. Esta disciplina es la segunda que más medallas le ha dado a México en la historia, sólo superada por los clavados, con 16.
