El dragado y ampliación del puerto de Mazatlán para la entrada de barcos de gran calado, no lo detiene nadie, aunque viene con mucho desfase, ya que estas obras debieron haber iniciado paralelo a la construcción de la autopista Mazatlán-Durango, coincidieron en señalar el diputado federal entrante Germán Escobar y el saliente, almirante Raúl Galván.
Durante un desayuno que ofreció la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción (CMIC), para reiterar en los compromisos de campaña del legislador con el ramo de la construcción, se insistió en el olvido a los constructores locales para privilegiar a los foráneos.
En la reunión de trabajo se tocaron varios temas, pero uno que llamó también la atención es la urgencia de encontrar soluciones al drenaje que se encuentra colapsado. Le pidieron al diputado federal Germán Escobar, que haga mancuerna con Quirino Ordaz Coppel y suma con los demás legisladores sinaloenses para traer los recursos federales suficientes y acabar con ese problema, so riesgo de tener quebrantos en el turismo.
Quel Galván, presidente de la CMIC, capítulo Mazatlán y sur de Sinaloa, entregó un reconocimiento al diputado federal del PRI, con la petición de que no se olvide de los compromisos y necesidades de los constructores de Sinaloa.
En la sesión de preguntas y respuestas participaron entre otros integrantes de la CMIC, Mariana Trujillo y Ramiro Bugueño, ex dirigentes, quienes pusieron diferentes temas en la mesa del diálogo, como el drenaje colapsado y los privilegios para ciertas empresas de la construcción, hasta la corrupción en las esferas de los gobiernos en contubernio con particulares.
A todos los comentarios, el diputado federal Escobar dio respuestas y en ocasiones apoyado, por el legislador saliente, Raúl Galván, quien dijo que el puerto de altura debió iniciarse casi al parejo de la construcción de la supercarretera Mazatlán-Durango.
