La abogada, de 35 años, desapareció tras acudir el pasado domingo a la 1.30 am a visitar a su marido, teniente instructor en el complejo policial.
Según relató el ministro del Interior, Patricio Carrillo, las cámaras captaron más tarde a su marido saliendo de las instalaciones en el auto de ella, pero el vehículo no fue revisado y los agentes no sabían si ella también salió o no.
El ministro admitió que se trató de «una falla de seguridad».
Después de días de búsqueda, la Fiscalía informó del hallazgo de restos óseos en el cerro Casitagua, un paraje cercano a la Escuela de Policía. Solo horas después, el presidente de la República confirmó que pertenecen a Bernal.
Carrillo también relató que Cáceres prestó una primera declaración ante la Fiscalía tras la que salió libre y desde entonces se desconoce su paradero. Un gran operativo policial lleva días tratando de ubicarlo.
El presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, informó que su cadáver fue encontrado, poniendo fin a la incertidumbre sobre su paradero.
Lasso explicó en un mensaje de Twitter que los restos de Bernal fueron hallados en un cerro cercano a la Escuela Superior de Policía, el centro al norte de Quito donde se la vio con vida por última vez.
El mandatario prometió capturar a los culpables.
La desaparición de esta joven abogada tras visitar a su marido en el edificio policial hace más de una semana tenía en vilo al país y ha provocado indignación por el manejo que las autoridades han hecho del caso.