Madueña, Cuén y Benítez Torres
Mientras sigue el acoso, persecución, denuncias por abuso de autoridad, cateos y otras lindezas de parte de la Fiscalía Especializada del estado de Sinaloa, que encabeza Sara Bruna Quiñonez, pero con el gobernador Rubén Rocha Moya detrás de todo este aparato judicial que busca “doblar” al rector de la UAS, Jesús Madueña Molina, hay otros casos más “viejos” judiciales que están en la espera como es el del ex alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez Torres.
También Héctor Melesio Cuén Ojeda, líder estatal del PAS, es acosado desde las altas esferas del poder sinaloense y, si pudieran, ya lo hubieran llevado ante un juez instructor. Tres casos “judiciales”, pero donde se ve que la ley es totalmente dispareja.
Esta mañana, el que fuera director de Gobierno y responsable del Departamento Jurídico, Antonio Aguilar Colado, a la llegada de Benítez Torres al poder municipal en el 2018, ahora señala lo laxa y la lentitud de una justicia para el químico y en donde han prevalecido las argucias y las “chicanadas”.
Aguilar Colado puntualiza: “Aquí el tema es que el químico se pasea por Mazatlán con impunidad, como burlándose de los mazatlecos y retando a la autoridad; es una actitud de valemadrismo”.
Agrega que hay una aparente tardanza para que se aplique la justicia y que en otros casos los tiempos ha sido estrictos y no en este proceso judicial; además hay otros implicados, como el Tesorero municipal, la Oficial Mayor y un regidor, entre otros ex funcionarios. “Hay un grupo de bandidos que se tapan con la misma cobija”, enfatizó el abogado.
Y remata: “El químico se pasea en el puerto como si no pasara nada, como si no tuviera ningún pendiente con la justicia; anda presumiendo la impunidad como si burlara de los mazatlecos por la forma tan descarada en que asiste a un café de Olas Altas…Hay un valemadrismo del químico, mientras la ley se relaja”.
Gálvez, Chiquita… Pero Picosa
Luego de que la Comisión de Quejas del INE le pide al Presidente de la República abstenerse, bajo cualquier modalidad o formato, de realizar manifestaciones, emitir comentarios, opiniones, o señalamientos sobre temas electorales, ya sea de forma positiva o negativa, cuidando que su actuar se encuentre ajustado a los principios constitucionales de imparcialidad y neutralidad, el Mandatario se queja de que no se le respeta su derecho de réplica y olvida que él fue primero en negar esa facultad al resto de los ciudadanos, incluyendo a la senadora Xóchitl Gálvez al cerrarle las puertas de Palacio Nacional.
El Presidente, al modo, justificó el viernes pasado por hablar de la senadora Gálvez argumentando que no ha sido notificado; por ello decidió revelar que las empresas de la política hidalguense recibieron mil 400 millones de pesos por contratos en los últimos 10 años.
Por su lado el fin de semana en gira por Veracruz, la senadora panista le respondió al Primer Mandatario que “‘cometió un perro oso y procederé legalmente”. La senadora no es muy alta de estatura, más bien bajita, pero muy respondona; chiquita, pero picosa, dice el refrán.
Dejó constancia de conocer el lenguaje del béisbol, el deporte del Presidente, y dijo que López Obrador “está a punto del ponche. Vamos 2-0. Le gané un amparo, le gané la queja ante el INE y ahora va la demanda penal”.
Xóchitl Gálvez publicó un mensaje en donde el Presidente a través de twitter asegura que sus empresas han tenido contratos con el gobierno y particulares por 1,400 millones de pesos; con este documento el Presidente “deja evidencia que está usando todo el aparato del Estado para investigarme dolosamente por mi aspiración. Sígale, no le tengo miedo, no hay nada que ocultar. Ha violado con esto una serie de leyes y, por ello, procederé legalmente contra usted y quien resulte responsable”, subrayó la senadora panista.
Periodismo y Muerte
Aunque en Sinaloa hay una relativa paz en agresiones y crímenes contra periodistas, aunque siempre está el acoso de policías y delincuentes, México y otros estados de la República la violencia no da tregua a los comunicadores. En Sinaloa los asesinatos que se recuerdan son los de Javier Valdez y de Enrique Ramírez, por ser de los últimos dos comunicadores victimados y reconocidos por su trabajo. El sábado por la tarde en un lugar muy concurrido en el puerto de Acapulco fue victimado de varios balazos el periodista Nelson Matus Peña, de 42 años.
Para este crimen se utilizaron a dos pistoleros. Matus Peña era editor del portal Lo Real de Guerrero y estaba especializado en nota roja. En agosto de 2022 fue ultimado el periodista Fredi Román. En junio, en ese mismo estado ya habían matado al comunicador Gerardo Torres Rentería. En menos de un año en el gobierno de la 4T en Guerrero, de Evelyn Salgado, han sido asesinados tres periodistas.
En Nayarit, la semana pasada le quitaron la vida al periodista Luis Martín Sánchez, corresponsal del diario La Jornada.
Cabe señalar que entre 2000 y 2022 alrededor de 161 comunicadores han sido asesinados.
Organismos internacionales señalan a México como un país donde es peligrosa la práctica del periodismo.
Señalan diversos factores como elementos importantes que propician los asesinatos de comunicadores, en donde más del 90 por ciento de los responsables de esos crímenes quedan impunes.