*La foto de Galindo con el presidente Peña
*Pacto de civilidad entre E. Arce y Ramírez
*Se quejan maestros de desvío de recursos
FRANCISCO CHIQUETE
Hubo un tiempo en que las fotos eran un instrumento de convencimiento tan eficaz como después fueron las encuestas. Una foto con el presidente era de veras un exitazo para cualquiera que aspirase a un puesto de elección popular, a veces sin que existiese verdaderamente una relación entre el político local y el encumbrado.
Algún inocente hubo que en su momento puso entre las líneas de su currículum que había hecho valla en el auditorio nacional para la toma de posesión del presidente José López Portillo, y que incluso lo había saludado.
Los tiempos son otros, por supuesto, y Heriberto Galindo lo sabe, pero también sabe que las demostraciones de cercanía siguen siendo importantes para muchos cuadros que andan en busca de señales para definir quién va a ser “el bueno”.
Por eso en estos tiempos de las redes sociales, una foto con el presidente, en actitud de confianza, puede convertirse en un elemento valioso dentro de las filas partidistas, por supuesto, con la conciencia de que no garantiza nada.
Como quiera, el gusto nadie se lo quita, ni la intención, aunque aparezca con la manifestación de “lealtad, respeto y compromiso”. La foto corresponde a la jornada inaugural del encuentro de legisladores de países que pertenecen a la OCDE, en la residencia oficial de Los Pinos.
A propósito de aspirantes, y en este caso cercano también a Galindo y al grupo en el poder: hoy está en Mazatlán el senador Aarón Irízar López, quien trae una apretada agenda pública. Irízar recorre el estado con frecuencia, pero dosifica sus apariciones en medio, en una evidente estrategia de evitar el desgaste. En la entrega de mañana tendremos seguramente una entrevista y un análisis de sus actividades.
PACTO DE CIVILIDAD DE
CANDIDATOS EN EL PRI
Martha Tamayo Morales, la dirigente estatal del PRI, se dice contenta de que el nuevo comité municipal de su partido en Mazatlán se vaya a elegir en competencia directa y no en planilla de unidad. –Es que hubo quienes dijeran que queríamos imponerles algo, y esa es la mejor prueba de que no, explica.
De todos modos, por supuesto, hay preocupación por lo que vaya a deparar esta contienda, de modo que anuncia la firma de un convenio de civilidad que garantice una campaña limpia, en la que se tenga claro que lo importante es el partido y su unidad. La firma se llevaría a cabo este viernes, de acuerdo con los planes de la dirigente.
En realidad ni Eduardo Arce Becerra ni Ricardo Aurelio Ramírez González son personas que peleen o que establezcan la ofensa ni la diatriba como instrumento de competencia. Se trata de dos personajes civilizados que son conocidos por su buen trato, sus expresiones educadas y su gusto por presentarse en todas partes sin problemas.
Pero por supuesto, eso no excluye las posibilidades de una campaña fragorosa en que la guerra sucia aparezca. El equipo de activación que acompaña a Arce Becerra, sobre todo los extremistas del lado de Jorge Abel, tienen una amplia experiencia en el ramo. Y lo mismo pasa con algunos de los grupos, sobre todo actores políticos que se han sumado a Ricardo Aurelio y que en las más recientes campañas han alcanzado presencia gracias a actitudes agresivas.
Entre los pocos límites y reglamentos que tiene la campaña interna se encuentra el financiamiento. Cuando mucho, dijo Martha Tamayo, pueden gastar un tres por ciento de lo que costó la campaña electoral más reciente, lo que ella misma calculó en ciento cincuenta mil pesos. Quienes se enteraron soltaron la risa: si depende de Jorge Abel, director de una de las campañas, y del candidato Ramírez, el costo se abatirá prácticamente a cero, sobre todo porque además hay monto límite, pero no financiamiento partidista.
Como dice Martha Tamayo, durante todo este tiempo se estuvo acusando a la dirigencia estatal de tratar de imponer a un dirigente. Fueron sobre todo los jorgeabelistas, aunque también otros grupos dispersos, los que hicieron una especie de campaña a partir de la descalificación a este proceso.
No partían de cero. En cuanto pudo, la exsenadora Tamayo trajo de Culiacán a un dirigente municipal con calidad de delegado, al profesor Eduardo Garrido Achoy, supuestamente porque tratándose de un militante de tanta trayectoria y tanta autoridad, podía establecer orden entre los grupos y poner al PRI a trabajar en un solo frente.
Le falló. El profesor Garrido, a pesar de desplegar su historial y la autoridad que tantos le reconocen en Culiacán, no pudo aquí ni siquiera seleccionar un solo candidato para la principal sindicatura, la de Villa Unión, que se perdió a pesar de que había posibilidades reales de salir adelante.
Por lo pronto los jorgeabelistas andan en friega detrás de cada uno de los consejeros políticos municipales que consideran dubitativos para ganar la elección, como el tesoro más preciado de la historia. El Cayito anda en busca de los dirigentes para garantizar participaciones propias y de los representados en la asamblea crucial, la del voto.
OTRA VEZ LOS DINEROS
DE LA EDUCACIÓN
Decenas de maestros e manifestaron ayer públicamente para protestar porque no les han pagado una serie de prestaciones, que van del aumento salarial y en prestaciones, hasta la inclusión o actualización de los mentores en el rollo de la carrera magisterial, que por supuesto, significa más ingresos.
Dice el dirigente de la sección 53 del SNTE, Silvino Zavala, que las broncas acumuladas significan una bolsa superior a los trescientos millones de pesos, que incluyen el aumento, la carrera magisterial, las liquidaciones a los profesores que se jubilaron, el salario de unos cien profesores a los que no se les ha pagado una sola quincena desde que empezó el ciclo escolar en agosto, basificaciones en Cobaes y otros puntos que se encuentran en situación de conflicto.
En opinión de Zavala el problema se deriva de una desviación de recursos, del uso del dinero que les manda la federación para estas cosas de educación y que se gastan en otros rubros de la administración. La acusación es muy fuerte, es contundente, y lo peor del caso es que tiene respaldo de la contraparte.
El mismísimo secretario de Educación Pública y Cultura, el doctor Francisco Cuauhtémoc Frías Castro, con ese estilo directo y franco de decir las cosas, confirma que las partidas del gobierno federal para la educación empiezan a llegar en noviembre y diciembre, pero que no se aplicaron oportunamente, quizá por la crisis que tuvo el gobierno el año pasado.
El caso es que Zavala amenaza con manifestaciones iguales o más fuertes a la que ayer tuvieron sus colegas de la sección 27, que estuvieron en la unidad de gobierno, reclamando por el dinero de la carrera magisterial.
En opinión del dirigente, lo peor es que en lugar de dar soluciones, lo que hacen es dar explicaciones de por qué no se ha resuelto cada una de las demandas, y así no se avanza. De todos modos insiste en mantener el diálogo y anuncia que el próximo martes tendrá una entrevista con el secretario de Administración y Finanzas.
Si no hay resultados, la inconformidad irá creciendo, y aunque no hemos querido que esto afecte al ritmo de las actividades educativas, llegará el momento en que la gente no soporte más, sentencia.
LA ETERNA PLEGARIA
DE LAS ESTADÍSTICAS
Ante acontecimientos como los de San Ignacio, cada vez que ocurre una muerte violenta en la sierra, la sociedad reacciona recelosa, temerosa incluso porque así fue como empezaron los malos tiempos que llegaron a su punto máximo en el 2010. Es más: donde ocurrió la doble ejecución del martes por la noche, fue que empezó aquella pesadilla.
Como todos saben, los tripulantes de un vehículo fueron emboscados (aunque también hay quien habla de un enfrentamiento a balazos con el resultado de dos personas muertas y otras dos heridas, uno de ellos por ciento, refugiado en el monte mientras llegaban las autoridades y garantizaban que los agresores –o los contrarios- ya no regresarían.
Es una película muy vista que así como está, no afecta a la parte urbana de Mazatlán, pero que constituye una referencia muy negativa, especialmente porque en esa parte del municipio las autoridades no han logrado verdaderamente la pacificación. Es esa zona la que queda como remanente de la vieja racha y a pesar de sus frecuentes agresiones, no termina de ser combatida por la autoridad.
Pero como siempre, cuando se le pregunta a alguna autoridad por un acontecimiento como éste, responde como respondió ayer el secretario de Seguridad Pública Municipal, Juan Antonio Murillo Rojo, no pasa nada digno de contar a casa: “Puedo afirmar de manera categórica que los índices delictivos en el municipio de Mazatlán, en este primer semestre que está por concluir estamos muy por debajo, tratándose de homicidios dolosos y también de otros delitos cometidos, en relación con otros años”.
Seguramente que tiene razón, pero el señor secretario debería considerar que detrás de las estadísticas que a él le satisfacen tanto, por muy bajas que le puedan parecer, hay vidas humanas,. Vidas perdidas, familias que se quedan sin un miembro, independientemente de a qué se dedicara esa persona y de cuáles fueron las circunstancias en que se le asesinó, dicho sea esto porque frecuentemente se justifican los crímenes con antecedentes o supuestos antecedentes policíacos de las víctimas.
Ya lo ha dicho el propio gobernador Mario López Valdez: con una persona que asesinen, ya hay motivos de preocupación y falla en los resultados. Estas agresiones no pueden ser justificadas ni disminuidas con las estadísticas. No si se quiere alcanzar una solución real a un problema que muerde y que sobrevive a todo, especialmente a las declaraciones de prensa.
RENUNCIAS UNIVERSITARIAS
Muy movidas han estado las representaciones universitarias en el norte de la entidad, Ayer se anunció la renuncia irrevocable del vicerrector de la UAS en la zona norte, Benjamín Castañeda Cortez, quien explica que su actividad como autoridad universitaria era ya incompatible con su particular carrera dentro del ámbito académico y de investigación.
Curiosamente fue la misma explicación que dio el vicerrector de administración y finanzas de la Universidad de Occidente, Ezequiel Avilés Ochoa, quien hace unos días presentó su dimisión y ayer fue sustituido.
El rector de la UdeO, Aarón Sánchez, tomó protesta al nuevo vicerrector, Mario Ramón Ahumada Astorga, quien se desempeñaba en la misma área, como director de administración. Ese otro puesto es ocupado ahora por José Ildefonso Medina Robles.
En la UAS, la sustitución se definirá hasta el próximo jueves, en la sesión del Consejo Universitario. Mientras tanto, se desempeñará ahí el actual secretario académico, Toribio Ordóñez Lagarda.