*El Crimen Organizado ¿manda mensaje al Gobernador? *No es fortuita la destrucción a balazos de 114 videocámaras de vigilancia en Culiacán *El Alcalde de Mazatlán fue “destrozado” en redes sociales por un presunto viaje de vacaciones a Hawái que sería “su muerte política” *La explicación del Alcalde es que viajó a una boda de un familiar de su esposa y no solo avisó, sino que pidió permiso al Gobernador para hacerlo *Cae en Madrid otro cómplice de García Luna parte de la red de lavado de dinero y narcotráfico contra quienes se libraron 61 órdenes de aprehensión Reiniciamos nuestras entregas de la columna “En el blanco” luego de tomar una semana para publicar en su lugar “Anécdotas de este reportero”. Y como tuvieron buena acogida, las anécdotas las publicaremos una entrega por semana.
El mensaje a Rocha Moya. Lo que pasó en la velada de fin de año. No es un asunto fortuito. Y como bien lo dice el Gobernador Rubén Rocha Moya, lo sucedido fue “planeado”. En la celebración del Año Nuevo, Culiacán mostró el rostro oculto que todos saben que existe, pero que muchos intentan no tomar en cuenta. El crimen organizado lanzó su mensaje de muerte. En la celebración de fin de año, apenas sonaron las doce campanadas anunciando el inicio del nuevo año 2024, el rugido de la metralla apareció. Disparos de todo tipo de armas de fuego retumbaron por toda la capital sinaloense.
En otros municipios también se reportaron disparos. Como en Mazatlán se hicieron en algunas zonas del municipio. Pero nada comparado con lo que se documentó en videos de lo que había sucedido en Culiacán. El rugido de las ráfagas de todo calibre inquietó a muchos. Más cuando no aparecieron ni policías municipales, tampoco estatales y lo que son Guardia Nacional, Ejercito y Marina se paseaban en convoyes que resultaron poco efectivos. Pero tras la lluvia de disparos apareció el verdadero objetivo de los criminales.
Conforme avanzaba el día, se iban poco a poco conociendo las consecuencias de la “velada”. Ocho personas se reportaron con lesiones por “balas perdidas”. Y primero se dijo que alrededor de 49 cámaras de videovigilancia habían resultado dañadas a balazos. Luego la cifra aumentó a más de 80. Finalmente, y en forma oficial el Gobernador reconoció que 114 cámaras habían resultado dañadas a balazos. “En una acción premeditada y coordinada”, dijo el Gobernador. El haber destruido más del 40 por ciento del total de cámaras de videovigilancia en la capital del estado, es ya un hecho que debe de preocupar al Gobierno. De que hayan tomado a esas cámaras de “tiro al blanco” y dejar parcialmente “ciegos” a las autoridades que a través de ellas vigilan Culiacán, es otro punto que debe preocupar. ¿Qué mensaje están enviando los delincuentes al Gobierno?.
Solo ellos lo saben y uno podría especular muchas cosas. Lo cierto es que es un mensaje para poner en claro su fuerza y la impunidad con la que se pueden mover por donde ellos quieren y a la hora que ellos quieren. ¿Será parque este viernes se cumple un año de la detención de Ovidio Guzmán precisamente en Culiacán?. No sabemos. Lo cierto es que o están los delincuentes preparando algo en la capital del estado o simplemente fue una a demostración de fuerza, para decirles al Gobierno quien manda en Sinaloa.
El polémico viaje a Hawái. Días previos a la velada de fin de año, corrió en redes sociales que el Alcalde Edgar González había realizado un viaje Hawái. Particularmente a la exótica Honolulu. Nada despreciable para viajar de placer. Y tampoco despreciable para vivir una velada de fin de año en el esplendor y siempre comentado Hawái. Al Alcalde se lo acabaron en las redes sociales. Hubo publicaciones “pagadas” que impulsaron en redes una fotografía en la que aparecía Edgar González en un aeropuerto acompañada de un escrito que daba cuenta de que viajó a Hawái a la velada de Año Nuevo. Hubo quienes justificaron el viaje. “cada quien tiene derecho a vacacionar”. “Si no lo hizo con recursos del Ayuntamiento, entonces está bien”. Pero hubo duras criticas ante lo que en esos momentos era un “supuesto viaje de placer del Alcalde”.
El silencio del Alcalde acrecentó la ola de críticas. No hubo nada que lo contuviera. Lo menos que supusimos fue que había sido un grave error político del Alcalde. Que en un gobierno en el que la “austeridad republicana” es una bandera política, sería un pecado muy grande que lo ponía seguramente al borde de perderlo todo. Habría que esperar la reacción del Gobernador Rubén Rocha Moya cuando se enterara. Si por menos quemó al exdirector de Fitur Alfonso Reséndiz cuando viajó en avión particular propiedad del Grupo Arhe al Tianguis de Acapulco, ¿Qué no haría con el Alcalde?. Pero ayer Edgar González apareció públicamente con su primera agenda oficial del año. Y no solo eso, encabezó una conferencia de prensa para dar a conocer el balance de la celebración de Año Nuevo. El despacho del Alcalde lució atiborrado de reporteros. Muchos como yo acudimos por el morbo de saber la versión de Edgar González respecto a todo lo que se dijo de su viaje de fin de año. Y no necesitó Tehuacán y mucho menos la chicharra.
Aceptó que efectivamente viajó a Hawái. Que salió el pasado fin de semana (en días no laborales). Que viajó para asistir a una boda. Y que apenas permaneció allá 24 horas y tanto él como su esposa se regresaron de inmediato. La boda fue de un familiar de su esposa. Nos dijo que el viaje fue de Mazatlán-Los Angeles-Hawai. Y de regreso fue de Hawái-Los Ángeles-CdMex-Culiacán. Y que era ya un viaje planead con anticipación y que no solo avisó al Gobernador, sino que solicitó permiso. Y se lo concedieron. El Alcalde nos comentó en corto que su esposa tenía síntomas de gripa y a punto estaban de cancelar el viaje. Pero que él fue quien la convenció en hacerlo.
Siguen cayendo cómplices de García Luna. Ahora fue en Madrid en donde la Interpol aprehendió al empresario Jonathan Alexis Weinberg Pinto, acusado como prestanombres de la red de corrupción que se sigue al exjefe policiaco Genaro García Luna. Como es sabido en mayo pasado un juez de control libró 61 órdenes de aprehensión en contra de cómplices de García Luna entre ellos exservidores públicos y empresarios.
A los 61 cómplices de García Luna se acusa de formar parte de toda una red de corrupción por lavado de dinero, narcotráfico y asociación delictuosa. La Fiscalía sigue adelante las investigaciones y también caminan las ordenes de aprehensión. Hay quienes se han “acogido” al derecho que les asiste de “colaborar” para lograr librar las posibles aprehensiones.