*Cada 2 de noviembre los panteones se llenan de flores, ofrendas y velas
*Festividad de origen prehispánica y católica
Aunque el Día de Muertos es una de las celebraciones más importantes en la cultura mexicana, esta ya traspasó a toda una tradición internacional, ya que, hoy en día es común observar altares en Latinoamérica, así como en algunas ciudades de Europa y Estados Unidos.
Se dice que algunas almas comienzan a llegar desde el 28 de octubre, sin embargo, cada 2 de noviembre las familias mexicanas tienen la costumbre de visitar panteones para celebrar el retorno transitorio a la tierra de sus difuntos.
Esta festividad proviene de una mezcla entre la cultura prehispánica y la religión católica de los españoles, principalmente porque los pueblos indígenas al morir realizaban una fiesta con el fin de guiarlos en su recorrido a la tierra de los muertos, y, con la llegada de los españoles se implementaron otros elementos como las velas y algunas flores.
Cabe mencionar que el 7 de noviembre de 2003, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura -UNESCO- declaró a este importante evento como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
México festeja a lo grande el Día de Muertos, pues además de instalar altares, también acuden a misa, ponen ofrendas y realizan desfiles del icónico personaje de esta celebración, Las Catrinas.
Esta fiesta busca mantener viva la memoria de aquellos que han partido, donde en lugar de que sea un día triste, las personas lo transforman en celebración y respeto recordando a familiares fallecidos.