*Trabajan en plena calle aguantando hasta más de 33 grados
Las temperaturas en Mazatlán estuvieron de los 33 a 34 grados la semana pasada, por lo que es difícil estar mucho tiempo en la calle.
Sin embargo, los vendedores ambulantes continúan su trabajo a pesar de las condiciones climáticas.
Tal es el caso de los vendedores del famoso Bonice, que, platican, para poder soportar las temperaturas del puerto ellos mismos consumen este producto que venden, que va congelado y procuran hidratarse mucho. También utilizan cachuchas o sombreros que cubran su cabeza y ropa que los proteja del sol.