Culiacán, Sinaloa a 28 de octubre del 2020.-
La Secretaría de Salud, a través de la COEPRISS, exhorta a la población a prevenir los riesgos para la salud por los cambios bruscos de temperatura ante el ingreso de los frentes fríos.
Lo anterior porque de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) se pronostica que entre 50 y 60 frentes fríos -basados en el histórico climatológico-, entren a México durante la temporada 2020-2021 que inició el 2 de septiembre con el primer frente meteorológico del periodo otoño-invierno y se estima culmine en mayo próximo, por lo que se espera que comiencen a bajar las temperaturas.
Jorge Alan Urbina Vidales, Comisionado Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios de Sinaloa (COEPRISS), comentó que al bajar las temperaturas se incrementa la incidencia de las enfermedades respiratorias, actividad que se suele presentar entre octubre y mayo, por lo que es en esta época cuando se centran las acciones de prevención y apoyo a la población más vulnerable y se hace un llamado a la ciudadanía para seguir medidas de autoprotección y extremar precauciones con el propósito de evitar las enfermedades respiratorias.
Subrayó que ya van diez de los 54 frentes fríos pronosticados en México para esta temporada, mismos que ingresan por la frontera norte, por lo que debe ponerse especial cuidado en las personas más vulnerables como son los adultos mayores de sesenta años y los recién nacidos, bebés, niños menores de cinco años, mujeres embarazadas, enfermos crónicos o inmunocomprometidos, hipertensos, diabéticos, personas con problemas respiratorios, anemia o padecimientos cardiacos, entre otras afecciones.
“En Sinaloa se espera un ambiente fresco a ciertas horas de la mañana y de la tarde noche por lo que es importante que la población vulnerable se mantenga abrigada con ropa gruesa y aumentar el consumo de agua ya que en tiempo de frío se produce una mayor pérdida de líquidos que se deben de reponer”, aseveró.
Señaló que hay que iniciar la prevención puesto que de noviembre a abril se espera que los sistemas invernales sean más intensos de moderados a fuertes y generen temperaturas más bajas.
“Sabemos que en Sinaloa la mayoría de los frentes fríos arriban entre diciembre y enero, por lo que durante esas fechas se espera generalmente un descenso promedio en las temperaturas de hasta 4 grados en la zona norte”, dijo.
“En nuestra tierra –agregó- es difícil que se alcancen temperaturas de cero grados o menos pero en el norte de la entidad y las zonas serranas sí se presentan temperaturas extremas: recordemos que en febrero de 2011 se registraron temperaturas mínimas de 0 grados en el norte de Sinaloa, aunque siempre el pronóstico es reservado y hay que estar atentos a los reportes del Servicio Meteorológico Nacional”, afirmó.
“El frío es un riesgo para la salud por lo que es fundamental prevenir evitando cambios bruscos de temperatura, cubrirse boca y nariz al salir a exteriores, usar cubrebocas, ponerse bufanda y no respirar aire frío, consumir alimentos ricos en vitaminas A y C, como frutas (mandarinas, naranjas, etcétera) y verduras, y lavarse las manos con frecuencia”, comentó.
“Hay que dormir abrigado, dejar de usar el aire acondicionado y no bañarse con agua fresca porque esto puede tener repercusiones en la salud; también se deben tomar precauciones con las estufas en viviendas con poca ventilación porque un descuido puede causar intoxicación por monóxido de carbono y tener cuidado también con las instalaciones eléctricas”, advirtió.
Jorge Alan Urbina Vidales recomendó también evitar la exposición a contaminantes ambientales, no fumar en lugares cerrados y cerca de niños, ancianos y personas enfermas, usar crema para proteger la piel del frío, vigilar constantemente adornos, luces e instalaciones eléctricas que puedan generar incendios, evitar que los menores y los adultos mayores manipulen líquidos calientes y apagar velas, braceros y mecheros antes de dormir.
Apuntó que según la información proporcionada por CONAGUA los frentes fríos pueden generar descensos abruptos de temperatura que son típicos en estos sistemas, heladas, rachas de vientos intensos, fuertes oleajes, abundante nubosidad y lloviznas, e incluso nieve en zonas serranas o regiones montañosas.
“Los meses más fríos son diciembre, enero y febrero, y los dos primeros meses del periodo más gélido del año son los que tienen menos horas de sol, y esto coincide con el tiempo que las masas de aire polar tienen una mayor incidencia por lo que son los meses de mayor impacto en la temporada invernal; para saber más de los frentes fríos hay que esperar el Foro Climático de Invierno que se celebra en noviembre donde formalmente se dará a conocer el pronóstico para la temporada y en enero se hará una última revisión”, comentó.
Enfatizó que se debe evitar la automedicación y ante cualquier malestar se debe acudir al médico o al centro de salud más cercano así como prestar atención a la información meteorológica y atender las recomendaciones de Protección Civil, Secretaría de Salud y Coepriss.
Coepriss emite las siguientes recomendaciones para evitar la propagación de enfermedades respiratorias:
Usar ropa adecuada a esta temporada: abrigarse, utilizar gorros, bufandas y calcetines gruesos.
Evitar los cambios bruscos de temperatura.
En los hogares tener cuidado con el uso de estufas, braseros y otros aparatos utilizados para producir calor en ambientes cerrados, porque pueden ser causa de intoxicación por inhalación de monóxido de carbono e incluso de incendios
Tener especial cuidado con la población vulnerable
Aumentar el consumo de agua para reponer líquidos en tiempo de frío
Usar cubrebocas y lavarse las manos con frecuencia
Consumir alimentos ricos en vitaminas A y C
Evitar la exposición a contaminantes ambientales y no fumar en lugares cerrados
Si eres población con factores de riesgo acudir de manera ordenada a las unidades del Sector Salud que aplican la vacuna contra la influenza de manera gratuita a personas vulnerables hasta el 31 de diciembre
Evitar la automedicación que es habitual en algunas personas y puede causar daño a su salud.
Acudir al médico ante cualquier duda o enfermedad.