1.- Increíble pero cierto. Después de dos elecciones internas en las que todo el proceso y su culminación en las urnas fue un vergonzoso chuchinero. La del domingo 7 fue una elección ejemplar, según el titular del Instituto Nacional de Elecciones (INE), Lorenzo Córdova Vianelo. La consejera del INE, Pamela San Martin, informó que solamente cuatro casillas no se instalaron y hubo 585 incidentes, de los cuales 390 fueron resueltos satisfactoriamente” (Cfr. Ángel Cabrera y Misael Zavala. La Jornada. 7/09/2014) Por ello no fue casual que Jesús Zambrano[i], líder nacional del PRD, exhumara entusiasmo por el resultado, pero no sólo porque esa elección[ii] no descarriló al Sol Azteca, también porque Nueva Izquierda (NI)[iii] se llevó casi el 70% de los delegados de una copiosa votación de casi dos millones de militantes[iv], pues con esos votos se hará de la Presidencia y la Secretaría General de esa organización partidaria, porcentaje que se reflejará asimismo en los estados y municipios del país.
2.- Pese al triunfo arrollador de la izquierda pactista, esta corriente tiene serios problemas que tendrá que resolver los más pronto posible, porque como afirma Juan Ignacio Zavala:“El PRD es (…) una masa amorfa difícil de entender ideológicamente (Milenio. Juan Ignacio Zavala.10/09/14). Pero uno de los problemas más serios que experimenta este segmento de la izquierda es su esquizofrenia[v]”, que es a un tiempo política y moral. La mayoría de los militantes que han adoptado la vía reformista en cada coyuntura importante se tambalean y se devuelven a cohabitar con los que predican el viejo manual de nacionalismo revolucionario, y eso a pesar de la evidencia de que esta vía ha condenado a los venezolanos a una suerte de anomia de inmensas proporciones, como también les ha ocurrido a los países que ahora giran alrededor del chavismo.
LAS DUDAS QUE LOS ARRASTRAN
3.- Este retroceso a la estatolatría y la proclividad a la estridencia no es porque duden de la pertinencia de su proyecto liberal de izquierda, sino por un pésimo cálculo político: suponen, que su universo de simpatizantes se volatizaría ante las bravatas escatológicas de sus amigos/enemigos de la “izquierda radical. Los desquicia, por ejemplo, no tener 30 mil clientes enfebrecidos votando a mano alzada: tanto los desquicia que “olvidan” que sus simpatizantes y militantes son personas que prefieren cambiar al país a través de las urnas, es decir, de manera cool, y por supuesto mediante los instrumentos del plebiscito y el referéndum.
4.- Su reiterado regreso al pasado contiene también una duda no tan metódica: viven en una permanente incertidumbre sobre la utilidad de su vocación pactista, toda vez que sus “compañeros de viaje” priístas y panistas pueden no incluir sus puntos de vista en la Mesa de los Acuerdos, o peor aún: prescindir de ellos, toda vez que ambos partidos y sus aliados poseen ahora los votos suficientes para generar reformas del calado de las que hemos sido testigos. Esta circunstancia les produce la sensación de andar flotando en la nada sin nadie, con cien pájaros volando y ninguno en mano. Su oposición a la Reforma Energética es el síndrome de este sentimiento y, al mismo, tiempo un guiño tropical a sus ex compañeros de ruta.
5.- Y en esta ambivalencia se convierten en víctimas colaterales de los radicales y de los partidos con los que signaron el Pacto. Veamos el porqué: los gobiernos del PRD no actúan con firmeza para proteger los derechos de tránsito de millares de ciudadanos ante las recurrentes movilizaciones y plantones de la “izquierda” nacional revolucionaria. Esta pasividad que además no concita su gratitud sino su descalificación, genera un repudio generalizado que es aprovechado por el PRI y el PAN para llevar agua a su molino, pues a través de diversos cantos de sirena convierten en defensores de los millones de ciudadanos que aborrecen que les arrebaten su tiempo cuando van a casa, al trabajo, al hospital, a la escuela y demás sitios donde se despliega su vida cotidiana. El PRD, pues, de esta manera pierde con los promotores de la estridencia; pero junto con éstos pierde legitimidad ante ciudadanos de a pie, que el PRI y el PAN cachan proclamándoselos prototipos de una patria ordenada y generosa.
6.- Si bien es cierto que las reversas y los pasos adelante del PRD, tienen que ver con la frágil tradición liberal que existe en México, a diferencia de las corrientes liberales de izquierda que campean en Europa que gozan de una extendida legitimidad. Podría objetarse asimismo que estos zigzag reflejan la composición del PRD y la correlación de fuerzas que se manifiesta en su seno en cada coyuntura política. Hoy este argumento carece hoy de sentido: desde el domingo 7 esta organización partidaria es casi homogénea, primero porque López Obrador había salido de sus filas para formar un nuevo partido y porque en la reciente elección, fue “derrotado” un pasado/presente que tiene un olor a naftalina tan semejante a la loción que aromatizaba al viejo PRI. De aquí en adelante no habrá pretextos, ni siquiera para afirmar que obedecen a la frágil tradición liberal que existe en México.
7.-El PRD si quiere trascender y conformarse como una sólida corriente de izquierda liberal, debe evitar sus sempiternas fugas hacia atrás o hacia delante, como se afirmó anteriormente. Y esto es así porque una y otra vez aparece como una fuerza subordinada o de la izquierda radical, que le ha prestado a sus candidatos, o a un PRIAN que lo desdibuja sobre todo porque no han sabido/no han querido explicar su programa y su estrategia a la sociedad con un buen tono pedagógico y, sobre todo, a través de su congruencia política, poniéndose de lado de los 60 millones de mexicanos que hoy sobreviven con un ingreso entre nada y casi nada. Y si bien el Jefe de gobierno del DF, Miguel Mancera, ha lanzado una campaña por el aumento del salario “porque son los más bajos de América Latina”, lo cierto es que esta iniciativa no ha sido acogida con toda su fuerza y creatividad por toda la militancia del PRD. Si algo define a un partido de izquierda es la lucha contra la desigualdad. Y esta es una enorme deuda que el PRD tiene con los mexicanos de a pie.
8.- El PRD tampoco ha hecho lo suficiente para forzar desde abajo y desde arriba una ley que quedó pendiente y con la cual se daría certidumbre al conjunto de reformas y especialmente a la Energética y a la antimonopólica. Me refiero a la ley anticorrupción con la cual podría impedirse que los políticos, los empresarios y cabilderos sigan medrando con los recursos nacionales como hasta hoy. El PRD empezó a proponer públicamente esta ley de leyes una vez que se “terminó” el ciclo de reformas peñistas, pero de pronto la dejó ,está en el archivo donde se esconde lo que no puede olvidarse. Este silencio en el discurso perredista los convierte de facto a ese partido en cómplice de la depredación nacional, que puede crecer exponencialmente toda vez que la suma de valores que estarán al (des)amparo del mercado, requieren severas regulaciones de una ley que ahora vive el sueño de los justos. El PRD debe ocuparse de esta ley urgentemente.
9.- Además esta subordinación a la izquierda radical o al PRIAN, que en realidad es una incapacidad de mostrarse como pares en sus arreglos políticos, no pocas veces los desfigura y los hace ver como vendidos “al sistema” o como partido que va a medio caballo entre el respeto a las instituciones y su sempiterno irrespeto, pero también es cierto que no pocos perredistas han renunciado a luchar en serio por el poder para servirle a la gente, pues muchos de ellos son vivales se han “contentado” con la cosecha de plurinominales o con diversas canonjías que les arrojan los gobiernos de “coalición” para mantenerlos callados y algunos de sus prohombres se dedican a pescar sinecuras. El PRD que hoy nos ha sorprendido a todos con una elección ejemplar, copiosa y a favor de la izquierda liberal, debe empezar a limpiar la casa de sus eternos vividores porque lo desfiguran política y moralmente.
10.- El PRD tiene el tiempo contado para corregir sus debilidades y para incrementar sus fortalezas. En el 2015 vivirá su gran prueba de fuego: El PRD tendrá como rival en el DF, su gran caja de resonancia, a Morena, a cuya cabeza estará López Obrador. Pero en esta prueba de fuego estarán también el PRI unido con el PAN, según algunos analistas. Y podría ocurrir lo peor: que ante este pleito de “familia”, que son los más enconados, se le habrá al PRIAN la puerta de par en par para que vuelva al gobierno del DF. El PRD puede quemarse en esta prueba de fuego y más aún si no resuelve sus contrahechuras.
Elioedgardo11@hotmail.com
[i]La oposición común encabezada por Bejarano y Marcelo Ebrard contra Los Chuchos los llevó a iniciar negociaciones para formar coaliciones de facto en las elecciones del próximo año, enfocándose a lo que va a suceder en el Distrito Federal, el bastión de la izquierda que el PRI, en una alianza en ciernes con el PAN, les quiere arrebatar. El planteamiento central de la alianza, planteada a López Obrador por Marcelo Ebrard, que encabeza el Movimiento Progresista, y René Bejarano, líder de Izquierda Democrática, se enfoca en el Distrito Federal, el único bastión que le queda a la izquierda, y que está en riesgo de perder una buena cantidad de su poder frente a la eventual alianza del PRI con el PAN en la capital, que llevan semanas platicando. (Raymundo Rivapalcio/Estrictamente Persona. 8/09/14). A este excelente periodista le salió el tiro por la culata: ¿Adoptará López Obrador a bejarano y a Ebrard cuando van más desplumados que un gallo después de haber perdido una pelea?
[ii]El proceso interno del PRD hizo enojar a López Obrador, quién esperaba cachar los pedazos de partido roto después de un choque de trenes el domingo pasado. Se quedó con las ganas. Su candidato, el caos, perdió abrumadoramente. Así como los perredistas encontraron un método democrático para tener una elección interna sin fracturarse, también es posible que realicen elecciones para nominar candidatos en una fecha adecuada que impida a los derrotados irse a Morena. (Pablo Hiriart. La razón. 7/09/14)
[iii] La agencia Nóvosti resalto en sus páginas: Las izquierdas triunfantes son promotoras del Pacto por México, que firmaron todas las fuerzas políticas representadas en el Congreso, al inicio del gobierno de Enrique Peña, en 2012, para acordar una ambiciosa agenda de reformas estructurales, demoradas por décadas en México. (Agencia Novosti. 9/09/14
[iv]La única medición que importa sobre lo que sucedió el domingo y que muy seguramente resultará en la presidencia de Carlos Navarrete en el Partido de la Revolución Democrática es la cantidad de votos que el sol azteca logre en junio del próximo año en las elecciones intermedias, las primeras de su historia en que tendrá, en la izquierda, un rival de cuidado: Morena. Carlos Puig. Milenio. 8/09/14)
[v] Luego que la dirección del PRD fue controlada por los ex priístas Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo y López Obrador, el PRD fue jaloneado entre tribus menores hasta que el grupo de Los Chuchos –Jesús Ortega y Jesús Zambrano, (ahora fortalecido con la tribu de las ligas de René Bejarano) tomo el control mayoritario, al margen de Cárdenas, Muñoz Ledo y López Obrador. Carlos Ramírez.(9/09/14)