Un Descanso para Benítez
Mientras que el proceso judicial contra el ex alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez Torres, toma un “impasse” luego de la prórroga hasta mediados de abril para comparecer ante el juez de control, esta mañana también el actual presidente municipal porteño, Edgar Augusto González Zatarain, se toma un tiempo para que los tribunales hagan su trabajo y dice que será “respetuoso sobre los juzgados y abstenerse de opinar, porque mis comentarios pueden afectar de alguna manera el proceso”.
El rosarense enfatizó que espera pronto termine este proceso para que se aclare esta situación para los mazatlecos. El munícipe recordó que es alcalde de un importante municipio.
Es correcto y saludable lo que afirma González Zatarain porque es gobernante y no instancia judicial; de paso el químico está muy defenestrado para que se siga haciendo más leña de él.
En el mismo acto en donde estuvo el alcalde mazatleco también fue entrevistado, por separado, el diputado Feliciano Castro, líder de la Jucopo del Congreso del estado, quien dijo que los legisladores ya cumplieron con sus obligaciones de ejercer los controles en el ejercicio de un gobierno municipal y el “juicio político” está pendiente hasta que no haya sentencia; ahora el asunto está en manos de los jueces y la Fiscalía.
AMLO, Dimes y Diretes
Mientras el Presidente de la República, luego de que fuera publicado el “plan B” electoral en el Diario Oficial de la Federación, para su entrada en vigor posteriormente, reiteró su propuesta no afecta en nada el funcionamiento del INE, contratacó a las críticas de sus dectractores y dijo que algunos consejeros electorales tienen salarios de más de 160 mil pesos, además de viáticos, seguro médico privado, caja de ahorro y fideicomisos especiales, por lo que los calificó como “cinicazos”.
Y agregó: “A los que vinieron a marchar no saben en qué consiste la reforma legal ni la constitucional. La bloquearon porque es el dinero de la élite, la democracia dorada del INE, sueldos elevadísimos, viáticos para viajar por el mundo, es una inmoralidad, son deshonestos”.
En tanto el diputado Santiago Creel y presidente de la mesa directiva del Congreso de la Unión a su vez retó al Presidente de la República a demostrar con qué ingresos se ha mantenido por más de una década, incluso sin cuentas bancarias.
Textual Creel le dice a López Obrador: “Seguramente tú lo escondes (el dinero) con tu familia, amigos o en sobres amarillos. Mucho de lo que tengo es fruto de un patrimonio familiar que se ha administrado con responsabilidad y con responsabilidad social” y aquí viene lo interesante: “¡Pero otro tanto, y tú lo sabes!, me lo he ganado trabajando y con mucha honra, como lo hacen miles, millones de mexicanos y mexicanas, a diario para salir adelante aun inclusive con tu desastre. Sabes perfecto que antes de ser servidor público durante muchos años me he dedicado a la abogacía de manera destacada. Dirigí una firma de abogados, la más reconocida en el país y en el extranjero”.
Y luego, con mayúsculas le reprocha el diputado: “QUÉ FALTA DE MEMORIA TIENES. SE TE OLVIDÓ QUE FUI NI MÁS NI MENOS TU ABOGADO DURANTE VARIOS AÑOS SIN COBRARTE UN PESO. NO SÓLO FUISTE CON TU HIJO A MI DESPACHO EN EL EDIFICIO OMEGA, ACUÉRDATE. FUISTE A MI CASA, TE RECIBÍ CON MI FAMILIA…”
Así andan los dimes y diretes en las altas esferas del poder.
Militarización en Duda
Ni una sola explicación. Militares mataron en Tamaulipas a cinco jóvenes que regresaban, según dicen sus padres, de divertirse en una discoteca en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Sólo uno sobrevivió.
El boletín oficial de la Secretaría de Defensa Nacional argumentó que los soldados que realizaban un patrullaje en la colonia Manuel Cavazos Lerma, en Nuevo Laredo, vieron una camioneta pickup blanca, sin placas y a exceso de velocidad. Escucharon “un estruendo” y los militares dispararon contra los tripulantes y pasajeros.
De parte de los jóvenes nadie iba armado y nunca fueron realmente un peligro para los militares.
Hasta el momento no hay una aclaración creíble de parte del Ejército, ni la Fiscalía General de la República, ni el gobierno federal, ni el del gobernador Américo Villarreal.
Este hecho lleva a la reflexión de que los militares no están entrenados para realizar labores de seguridad policíaca; la seguridad interna del país debe estar en manos de policías civiles. Ese era el espíritu de la creación de la Guardia Nacional o la Gendarmería.
Estaremos pendientes porque lo que hoy sucedió en Tamaulipas puede repetirse en Sinaloa o cualquiera de sus 18 municipios.