(DF, Crónicas Urbanas)
José Quintero/envinado especial
Tepito, el barrio bravo de la gran ciudad, tiene su historia y es uno de los más antiguos del Distrito federal, ubicado en la delegación Cuauhtémoc. Su ubicación exacta es Iniciando por la avenida del trabajo a la altura de Constancia hasta Héroes de Granaditas, y de Constancia hasta la avenida Peralvillo y de esta rúa hasta Ignacio Rayón, en la Colonia Morelos.
Son unas 25 manzanas, aunque el comercio, principalmente la fayuca, se ha extendido hasta casi el centro (Zócalo) de la gran ciudad de México y hasta los límites de otro monstruo inmobiliario y de edificios que es Nonoalco-Tlatelolco.
Tepito es constantemente estigmatizado y vilipendiando, pues se cree que allí se da todo lo malo de la urbe capitalina, desde el comercio de todo lo ilegal, traído del extranjero, hasta ser el principal centro de drogas del Distrito Federal y, en consecuencia, refugio de la criminalidad y la violencia.
Es cierto que en el barrio bravo se puede encontrar o, al menos, contactar hasta armas de grueso calibre. Un estudio reciente del gobierno de la ciudad de México señaló que desde Tepito se comercializan diariamente más de media tonelada de mariguana y 8 kilos de cocaína.
Muchos mexicanos, sobre todo de la provincia, les da miedo visitar la gran ciudad y un pavor entrar a Tepito, por temor al robo y al asalto, pero el barrio bravo es “calmado” y “tranquilo” con los que hacen compras o simplemente lo visitan para conocer de cerca esa otra cultura, la de barriada, de los albures y de los campeones de box.
Tepito tiene historia y cultura, incluso algunas obras y hasta libros, como Los Hijos de Sánchez, de Oscar Lewis, se han escrito como análisis antropológicos. Otro gran escritor, Carlos Monsivais escribió sobre la vida y los moradores de este barrio.
Hoy, como ayer, cualquier persona puede recorrer Tepito y comprar lo que quiera, porque aquí, en el barrio, encuentra de todo: desde zapatos, bolsas de piel y vinil de moda, ropa, juguetes, perfumes, licor adulterado y cigarros, así como toda clase de pornografía. Reiteramos, usted encuentra de todo.
Aunque hay quienes, para acudir a Tepito, recomiendan lo siguiente: asistir con ropa sencilla, casual; con el dinero suficiente para comprar lo que buscas; no llevar joyas y menos ostentarlas; asistir de día; llegar en transporte por el metropolitano (metro) o en microbús, porque el tráfico para el auto es intenso; ir a Tepito con buen ánimo, aunque alerta.
