Aunque no hay fórmula para crear un ambiente 100% adecuado para compartir el tema con tus allegados, recibir acompañamiento psicológico antes y después de hacerlo puede ayudar a construir relaciones de respeto, comprensión y comunicación.
Mexicali, B.C. a 09 de junio del 2021.- A cualquier edad, la familia se concibe como el lugar en el que toda persona encuentra un espacio de cuidado, aceptación y respeto; sin embargo, a medida que se va desarrollando, cada individuo consolida una identidad, y en este proceso es posible que surjan diferencias entre lo que la familia espera de la persona, y lo que ella ha definido sobre sí misma.
Esta construcción de identidad propia o diferenciación del sistema familiar implica el reconocimiento de lo que la hace distinta de su familia, incluyendo creencias, tradiciones y opiniones que se dejan de lado para adquirir las propias.
La expresión de la sexualidad es uno de los temas que, con frecuencia, resulta complicado de abordar dentro de la familia, particularmente cuando se vive una preferencia sexual diversa; es decir, no heterosexual, o una identidad de género distinta a la biológica, indicó la Mtra. Ivon Guerrero Ceballos, directora de la Escuela de Psicología de CETYS Universidad Campus Mexicali.
Por eso, antes de compartir con la familia la identidad de género y/o preferencia sexual con la que te identificas, lo mejor es reflexionar y encontrar una visión clara sobre la forma de pensar y de sentir de tus familiares al respecto, para encontrar la forma que te ayudará a expresarte con más seguridad y claridad. Pregúntate:
- ¿De qué forma se expresa mi familia ante la diversidad sexual?: Si sus comentarios son de desagrado, crítica o malestar, lo más probable es que no van a recibir la noticia de buena manera.
- ¿Cómo trata mi familia a quienes piensan u opinan distinto? ¿Existe respeto y tolerancia ante ideas que difieran de las propias?: Esto te ayudará a tener claridad sobre el tipo de comentarios que se harán alrededor de la noticia, y a prepararte para reaccionar de forma asertiva ante ellos.
- ¿Mi familia ha mostrado conductas violentas o de agresión ante personas sexualmente diversas? Es una situación muy dura, pero si tu integridad puede correr peligro, quizá debas optar por no hablar con ellos sobre el tema.
- ¿Con quién puedo contar? Es importante identificar redes de apoyo: amigos, pareja, compañeros, incluso instituciones; ellos deben de estar al tanto de tu decisión y estar atentos a cómo se desarrollan los eventos luego de compartir con tu familia tu identidad y/u orientación sexual.
“Concebimos la familia como un lugar en el que de manera incondicional recibiremos aquello que nos hace bien, pero tristemente no todas las familias tienen la capacidad de brindar esto a sus miembros y no es sencillo reconocerlo, pero al hacerlo es posible seguir adelante con los proyectos y metas personales”, detalló la directora.
Aunque no hay fórmulas ni recetas para establecer un ambiente en el que puedas hablar con tus seres queridos y recibir a cambio apoyo y tolerancia, pues cada familia es distinta, una buena idea antes de hacerlo es contar con acompañamiento psicológico tanto de forma individual como familiar, y continuarlo posteriormente, ya que esto puede ayudar a construir y/o fortalecer relaciones de respeto, comprensión y comunicación sana.
Por otra parte, cuando se han agotado todos los medios e intentos para convivir adecuadamente, debes recordar que “afortunadamente hay espacios (instituciones, grupos de apoyo, amistades, colectivos) donde puedes hallar aceptación, amor, comprensión y respeto por la persona que eres y donde la expresión de tu sexualidad no será motivo de censura, burla o desagrado”, concluyó la especialista.