Suecia anunció el miércoles la suspensión «por precaución» de la vacuna Moderna contra la Covid-19 para los menores de 30 años debido al riesgo de inflamación cardíaca en los jóvenes, señalando no obstante que la probabilidad de este efecto secundario es «mínima».
La Autoridad de Salud Pública (FHM), encargada de la campaña de vacunación, «decidió suspender el uso de la vacuna Spikevax de Moderna para todos los nacidos a partir de 1991, por principio de precaución», indica en un comunicado.
Esta decisión se toma «después de signos de aumento del riesgo de efectos secundarios como la inflamación del miocardio y el pericardio», precisa FHM.
Según la agencia, el riesgo es mayor después de la segunda dosis y en los varones. «El riesgo es mínimo, es un efecto secundario muy raro», subraya.
«La miocarditis y la pericarditis suelen desaparecer por sí solas, sin causar problemas duraderos, pero los síntomas deben ser evaluados por un médico», explica la agencia.
Alrededor de 81,000 personas menores de 30 años recibieron la primera dosis de Moderna en Suecia y no la segunda.
La Agencia Europea del Medicamento había ampliado en julio su autorización de la vacuna Moderna a los adolescentes de 12 a 17 años.
Información por EL ECONOMISTA