*Ellos no festejan la Noche Buena por estar trabajando
Mientras que unos festejan Navidad en la comodidad de sus hogares, junto a sus seres queridos, a otros les toca trabajar las 24 horas.
No hay pago en la mesa, toca atender a los clientes que hacen sus compras de último momento.
Los llaman afortunados, a todo aquel que puede darse el lujo de descansar la noche del 24 de diciembre o trabajar medio día.
Para los tianguistas es diferente, hay que salir a trabajar, hay que salir a ganarse la vida y más en este año que ha pegado tan fuerte a la economía mundial.
“No celebramos la Navidad, nos toca venir a trabajar, aquí estamos las 24 horas para que las personas puedan encontrar juguetes o ropa de último momento; tenemos que trabajar son de las pocas fechas que tenemos buenas”, expresó María Ramos trabajadora.
Ellos no se ponen tristes, saben que así es la vida y lo único que queda es tratar de celebrarlo a su manera; a pesar de no estar con sus familias el ambiente se inunda de amor y buenos deseos lo que agrega un espíritu navideño al lugar.
“Aquí nos quedamos la mayoría de los puestos, aquí dormimos, pero no importa que estemos trabajando, también se siente la sensación de fiesta y de familia ente los que estamos aquí”.
Los tianguistas no regresarán a sus casas está noche, dormirán en el lugar en la espera de Noche Buena y así atender a las personas.