Sinaloa Vive con Miedo
Las dirigencias estatal del PAN y PRI, Wendy Barajas y Paola Gárate, respectivamente y por separado, acusan a los gobiernos de Morena en Sinaloa y en Mazatlán que no ofrecen las garantías mínimas de seguridad para que ciudadanos vayan a elecciones para síndicos y comisarios en distintas ciudades del estado. “Hay miedo en Sinaloa y Mazatlán”, precisa la panista y también regidora mazatleca Barajas.
“En las sindicaturas de Mazatlán y en todo Sinaloa, no hay condiciones para que se lleven a cabo los plebiscitos; aun cuando hay interés de muchas personas en participar, tienen temor por las situaciones que ocurren, además anteriormente ya han sucedido otras presiones que impiden la participación, esto es preocupante y nosotros anteponemos salvaguardar la vida y la integridad de los ciudadanos”, afirmó por su lado Paola Gárate.
Debido a la convocatoria lanzada en el Cabildo de Mazatlán, el PRI considera que no es prudente que en estos momentos se esté valorando la renovación de síndicos y comisarios municipales, programada para el 26 de enero, esto, por los focos de violencia que se están viviendo en el estado, puntualizó.
Mientras, la presidenta panista, Wendy Barajas, afirmó que los gobiernos de Morena en el estado y municipal en Mazatlán digan que “todo está bien cuando hay mucha inseguridad y este problema se vive día a día; también en lo nacional”.
Como dirigente estatal opinó y respaldó a simpatizantes que van en la Planilla Azul a las elecciones de síndicos y comisarios en Mazatlán, aunque dijo que lo hacen en condiciones de inseguridad; en “la zona rural hay miedo, no podemos apagar el sol con un dedo. No vamos a coartar el derecho de participar en esos comicios de ciudadanos y no de partidos; en la zona rural esta es una forma de participar en la democracia, son representantes del pueblo… la gente quiere ser escuchada, por qué quitarle ese derecho de participar y de elegir”, subrayó la panista.
Deportaciones que Vienen
Mientras México se prepara para apoyar a connacionales que sean deportados, el Congreso de Estados Unidos se dispone a aprobar una ley que permita las expulsiones de inmigrantes sin papeles que hayan cometido delitos menores, aunque no hayan sido condenados, con lo que Donald Trump contará con una nueva herramienta legal para detener y empezar a expulsar masivamente a inmigrantes del país, señalan reportes en la Unión Americana.
En tanto, organizaciones de promigrantes indican que esa medida tiende “a acorralar a millones de inmigrantes para su detención masiva y deportación por cualquier medio necesario”, según comunicado de Juliana Macedo do Nascimento, directora adjunta de Activismo Federal de United We Dream Action.
La Cámara de Representantes aprobó la norma la semana pasada y el Senado dio después luz verde a su tramitación gracias a una votación en que fue decisivo el apoyo de los senadores demócratas. El calendario no está cerrado, pero el debate y aprobación final de la ley podrían producirse incluso esta misma semana, a tiempo para que Donald Trump la aplique luego de tomar posesión el próximo lunes 20 de enero.
La ley exigiría al servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) detener a los inmigrantes no autorizados que sean acusados, detenidos o condenados por hurtos, robos y atracos no violentos y ordenaría que fueran detenidos hasta que fueran expulsados del país. Con la ley actual hace falta haber sido condenado por dos delitos menores o por uno grave para que los inmigrantes afronten la deportación.
En el norte del país ya se hacen los preparativos de atención humanitaria legal que pudieran requerir los migrantes mexicanos que pudieran ser deportados por parte de Estados Unidos a través de la franja fronteriza de México, informó Juan Ramón de la Fuente Ramírez, secretario de Relaciones Exteriores.
Ayuda Humanitaria
Y mientras, el gobierno de México envió a Los Ángeles a 72 expertos en labores de protección civil como ayuda humanitaria en el combate a los incendios en esa devastada ciudad norteamericana, según informó la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, en la conferencia de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Los incendios que iniciaron el 7 de enero en la zona de Palisades han dejado 15 mil 632 hectáreas afectadas, 3 mil 644 daños a infraestructura, unas 20 personas fallecidas y obligado a la evacuación de 70 mil personas.
La funcionaria mexicana informó que hay una alerta roja en la región derivado de que se esperan fuertes vientos de más de 80 kilómetros por hora que podrían impulsar el fuego.
Por videollamada, Laura Velázquez dijo que el equipo de 72 especialistas y combatientes de incendios de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Comisión Nacional Forestal (Conafor) llegaron el sábado a Los Ángeles, y fue el primer equipo internacional en sumarse a estos trabajos de emergencia.
El lunes, los combatientes de incendios de la Conafor fueron asignados a atacar los incendios forestales, además de que realizan labores para abrir y ampliar brechas cortafuegos. En tanto, a los especialistas de la Sedena les fueron encomendadas tareas de búsqueda y rescate de personas en zonas de difícil acceso.
