- “Que investiguen”: Rocha
- ¡Criminal lo del metro!
- Tres partidos no dieron el ancho
“QUE INVESTIGUEN”: ROCHA
Sin duda que es muy temerario decir y descalificar, sobre todo si no existen las pruebas suficientes, de que en la elección del 6 de junio influyó el narcotráfico o los grupos de la delincuencia organizada en favor de un candidato a gobernador, como es el caso de Rubén Rocha Moya.
Hubo denuncias de violencia e intimidaciones, aunque el número no es tan importante para declarar inválida estos comicios. Buena parte de que no haya más querellas ante las instancias electorales, como la Fepade y otras dependencias del INE y Consejos estatales y municipales electorales, es responsabilidad de los propios candidatos que supieron de “incidentes” pero no quisieron reportar por miedo o cultura cívica y política.
Hubo tiempo para todo: organizar los procesos electorales en todo el país, no solamente en Sinaloa; funcionarios acreditados con representantes de casillas; hubo todo un andamiaje electoral; luego un desarrollo de campañas de dos meses con candidatos en las calles y la zona rural; después el día de las elecciones con la participación de notarios y otro equipamiento técnico y humano para denunciar las irregularidades y todo aquello que debiera decirse, pero una semana más tarde llamarse “robado” tiene muchas peligrosas aristas y una de ellas es que el ganador es “ilegítimo”.
Mario Zamora Gastélum está en todo su derecho de exigir limpieza en las elecciones, pero muy diferente buscar anulas las elecciones para gobernador. Por eso y otras razones, la respuesta del ahora gobernador electo Rubén Rocha Moya es contundente: “Mario es un mal perdedor”.
El ex rector de la UAS en un largo comunicado de prensa incluso se manifestó abierto a cualquier investigación, pues una vida limpia lo respalda, y puntualizó que faltan al respeto al pueblo de Sinaloa quienes señalan que los 624 mil 225 ciudadanas y ciudadanos que votaron por él, lo hicieron “incitados por el crimen organizado y no por sus ansias de un gobierno que no robe, no mienta y no traicione, como el que encabezará el 1 de noviembre”.
El académico, maestro, abogado y doctor en educación Rocha Moya, lamentó que se le estigmatice tan sólo por ser oriundo de Badiraguato, una región de gente noble, donde “viven más de 30 mil sinaloenses y es una ofensa para ellos; Badiraguato es el municipio más pobre de Sinaloa; no tiene sentido, me apena mucho que se haga eso”.
A pregunta expresa sobre una supuesta investigación en contra de gobernadores electos por parte del Centro de Inteligencia Nacional, dijo “que se trata de guerra sucia poselectoral proveniente de un candidato perdedor sin sentido ni sustento”, y respondió categórico:
“Estamos dispuestos a que se nos investigue, todos los que somos hombres públicos, personas públicas que tenemos una responsabilidad o la vamos a tener, estamos dispuestos a que nos investigue todo el mundo. Que me investiguen al derecho y al revés donde quieran”.
Cuestionó que hasta ahora se hable de una investigación y no antes, ya que transcurrieron 60 días de campaña, hubo una elección, se votó, le entregaron la constancia de mayoría y a estas alturas no se ha presentado ninguna impugnación ante las autoridades electorales.
¡CRIMINAL LO DEL METRO!
Ahora qué va a decir el Presidente de la República en su “mañanera” en torno a la omisión y negligencia criminal que costó la vida de 26 personas y dejó heridas en otras 70 y en donde están involucrados funcionarios de su círculo más cercano de colaboradores como el canciller Marcelo Ebrard y la jefa de gobierno de la ciudad de México, Claudia Sheinbaum?
Dicen los dictámenes dicen que la tragedia fue provocada por una falla estructural, asociada al menos a las siguientes condiciones identificadas hasta ahora: deficiencias en el proceso constructivo, proceso de soldadura de los pernos Nelson, porosidad y falta de fusión en la unión perno trabe, falta de pernos Nelson en las trabes que conforman el conjunto del puente, diferentes tipos de concreto en la tableta, soldaduras no concluidas y/o mal ejecutadas, supervisión y control dimensional en soldaduras.
Esto habla de una obra hecha sobre las rodillas, sin profesionalismo y con una larga estela de criminales ahorros. Así lo confirma el reportaje de The New York Times, donde el domingo pasado se publicó que las trabes de acero, así como la mezcla de la estructura de acero y el concreto no correspondían a las necesidades de la obra. Esto, en base a miles de fotografías de expertos.
Lo confirmó el ingeniero estructuralista Eduardo Ramírez Cato, fue la soldadura de los pernos Nelson y su número, necesario para soportar el paso y peso de los trenes.
Esto es en la primera fase del dictamen. En los siguientes se podrá establecer otros aspectos, como los informes de supervisión de obras y el manejo de las estimaciones de obra que pasó de Rioboo, luego Cinsa (de Grupo Carso). Esto, además de las bitácoras de mantenimiento.
Hasta el momento no se ha perfilado a culpables, porque quienes construyeron esas obras, cometieron un fraude al gobierno de la Ciudad de México, al poner materiales de baja calidad; autoridades no realizaron la supervisión de obras y, al final, no hubo mantenimiento y revisión.
TRES PARTIDOS NO DIERON EL ANCHO
Este año de elecciones, el país gastó en financiamiento público para los tres nuevos partidos que participaron en ese proceso electoral: Partido Encuentro Solidario (PES), Redes Sociales Progresistas (RSP) y Fuerza por México (FxM), casi 500 millones de pesos que pudieron ser mejor empleados en programas urgentes como la compra de medicamentos para niños con cáncer.
El total invertido en esas organizaciones se obtiene de las sumas que recibieron como parte del sistema de financiamiento público establecido en la legislación electoral mexicana bajo el supuesto de evitar que las elecciones nacionales sean contaminadas por dinero procedente de actividades ilícitas, lo cual también está por comprobarse, pues desafortunadamente hay muchos testimonios de intervención de organizaciones delictivas.
Cada uno de esos partidos recibió 161 millones 973 mil pesos y el resultado en las urnas fue negativo. Ninguno de los “nuevos” institutos ofreció nada que atrajera la simpatía de los electores y por lo mismo los tres perderán su registro oficial y, lo más grave para ellos, es que ya no recibirán ese financiamiento público, para alivio del erario federal.
Ayer mismo, el Instituto Nacional Electoral informó haber iniciado formalmente el proceso de liquidación de los tres supuestos institutos políticos.
