* PRI, un Gran Perdedor
* Químico Déspota y Agresivo
* Otro Desprecio al Trabajo de Prensa
PRI, UN GRAN PERDEDOR
A mediados del año pasado el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que los partidos políticos de oposición, principalmente el PRI y el PAN, moralmente estaban derrotados y seguían en la lona un año después de las elecciones que lo llevaron al poder. En ese momento me pareció una descalificación excesiva patear al caído, a los partidos perdedores, pero a lo largo de estos últimos meses esos institutos políticos siguen erráticos y sin reponerse de la derrota.
En los últimos meses también se ha visto la guerra sorda que se libra dentro del PAN por los pocos espacios de poder que les queda para seguir, entre otros temas, manejando recursos públicos vía diputados o senadores del blanquiazul. También a través del propio partido.
Lo mismo o peor anda el PRI con su líder nacional, Alejandro Moreno, conocido como “Alito” y de quien se dijo que hasta el propio López Obrador metió la mano para que Moreno, hace un año, llegara a la presidencia nacional del tricolor.
Hace una semana, el sinaloense-mochitense Francisco Labastida Ochoa, ex gobernador de Sinaloa, ex secretario de Gobernación y ex candidato presidencial quien perdió contra Vicente Fox, sin venir a cuento arremetió sin más en contra de Alito en un programa de entrevistas por radio.
La periodista Martha Anaya a manera de introducción en la entrevista con Labastida, dijo: “Vaya momentos que vive el PRI, ¿no es cierto?”, y el sinaloense contesta de bote pronto:
“Para lo que queda del PRI diría yo (risas), el PRI como que son dos valores antagónicos… Yo creo que tiene una militancia de la cual yo podría decir, estupenda militancia, y tiene una dirigencia qué da pena y vergüenza… por lo menos la actual, y algunas que hemos tenido… lamentables; es una dirigencia tan mala en el partido, que en los tiempos de Peña (Nieto), es que no supo escoger al candidato presidencial…”
Alejandro Moreno no es un buen dirigente?, insistió la reportera y Labastida se fue hasta el fondo de la crítica:
“Es pésimo dirigente… me parece que tiene vicios personales, que si la mitad o el 10 por ciento de lo que dicen de él, de su propensión al dinero, éste, tiene un grave defecto y una gran debilidad… y luego no tiene la suficiente experiencia, hasta eso, sí ha pasado un tiempo en el partido, pero no le ha servido de mucho… le falta saber para qué quiere el partido y quiere ser Presidente de la República, pero obviamente ni siquiera puede ser, puede ganar una senaduría… a menos que se vaya de pluri…”
Finalmente Labastida afirmó que hoy el PRI está en vías de extinción y remató que Alito se equivocó al dejar la gubernatura de Campeche para ir a la presidencia del PRI, al “suponer, que así lograría inmunidad, protección, y para relanzar su futuro político, pero no le va a funcionar”.
Labastida parece que ya olvidó que perdió la Presidencia de la República y que no es el mejor priista para calificar al tricolor y sus liderazgos.
Labastida Ochoa y para otros priistas que también han hecho cuestionamientos al PRI, no faltó mucho la respuesta y también en los últimos días Alejandro Moreno ha dicho:
“Que se confundan ni se equivoquen el puñado de cínicos y derrotistas que nos auguran la extinción…entre ellos están los tecnócratas que perdieron la mayoría priista de diputados en el 97, para luego también perder en el año 2000 nada más y nada menos que la Presidencia de la República…Es verdad, dan vergüenza, mucha vergüenza, estos tecno-burócratas que le quedaron chicos al PRI y que todavía se atreven a lanzar críticas, en vez de trabajar por el partido. Estos cínicos, si no van a ayudar, que no estorben…”
Así andan los priistas de la greña y como comadres de lavadero.
QUÍMICO DÉSPOTA Y AGRESIVO
No es la primera vez que alguien califica al alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez Torres, con palabras duras del “más déspota y agresivo” de todos los presidentes municipales que han pasado por la silla de Palacio Municipal, como lo hizo esta mañana el luchador social, Miguel Gutiérrez, integrante de la dirigencia del MAS.
Todavía más crudo en las palabras, Gutiérrez dijo: “Qué le pasa…está enfermo o enloquecido?”
El integrante del MAS no es la primera vez también que manifiesta su malestar con el alcalde porque no atiende ni escucha al “pueblo bueno y sabio” de los verdaderos problemas sociales de numerosas colonias precarias de Mazatlán. El químico vive en su mundo, porque al estilo del Presidente de la República, él tiene “otros datos”.
Decíamos que no es la primera vez que alguien le suelta epítetos de esa naturaleza, también ya lo hizo y con mayor dureza, el ex director de la tenencia de la Tierra, Raúl Carvajal, cuando señaló que al alcalde porteño por sus actuaciones y desvaríos lo deben de llevar con un “psiquiatra”, con un “loquero”. Estas frases a raíz del pleito del munícipe con varios directores que los ha “renunciado”.
El sábado pasado, cuatro legisladores de Morena, de su propio partido, “lo reprobaron” en el ejercicio de su gobierno, aunque tres: Emilia Guerra, Alma Rosa Garzón y Antonio Crespo comentaron hasta “juicio político”.
Así que el alcalde marismeño que no llegó legítimo en las urnas, porque quien ganó la elección para él fue el Presidente López Obrador como el “Tsunami arrasador”, tampoco es legítimo en el poder porque a menos de un año y medio de la administración de tres, ha sumado mucho descrédito y no escucha, aunque si reprime a su pueblo. Todavía se enoja cuando le dicen que ha traicionado a la 4T.
OTRO DESPRECIO AL TRABAJO DE PRENSA
El alcalde mazatleco dice que tiene un respeto al trabajo de los reporteros, de quienes dice que los comprende porque están mal pagados por los dueños de las empresas, entonces qué culpa tienen ellos de que no conteste o evada las preguntas de los periodistas por más “ingenuas” o duras que sean?
Lo que parece reflejar el munícipe en falta de sensibilidad a responder a los problemas de la ciudad, ya sea porque no tiene elementos o porque está más allá de lo que pase en Mazatlán.
Los reporteros acuden al alcalde porque es la primera autoridad municipal, que se supone debe ser la más enterada y mejor informada; la que debe dar soluciones a todos los temas y aspectos cotidianos que se presenten. Además, como presidente municipal está obligado a informar sobre el manejo del gobierno.
Entonces ante quién van a ir los reporteros si el alcalde se esconde o intenta evadir las preguntas y a los periodistas. Qué tan difícil o peligrosa puede ser una pregunta de un comunicador para no contestarla con inteligencia, madurez y sentido común el hombre que se precia de ser el primer gobernante?
Esta mañana, el alcalde como el avestruz, metió de nuevo la cabeza en el hoyo.