*Mujer invidente de 36 años
*Oscuridad en sus ojos, luz en el alma
Milagros de Jesús Benítez Martell con de 36 años, invidente de nacimiento, con gran carisma y una hermosa voz para cantar se niega “limosnear” y prefiere su guitarra y sus canciones para ganarse de manera productiva el sustento diario que en ocasiones le han querido robar de su bote de monedas.
Pese a estar en la “oscuridad”, su vida es luminosa y alegre; “siento feo no mirar, pero también así no veo las tragedia que pasan en el mundo”, afirma sin tristeza alguna.
Milagros de Jesús refleja mucho optimismo y admite trabajar en la calle, que tiene permiso, pero que aun así a veces la molestan los inspectores. Le solicita apoyo al alcalde Luis Guillermo Benítez Torres a quien le canta el “Corrido de Mazatlán”. Ya entrada en la entrevista, Milagros le pide al munícipe le regale una guitarra.
Cuenta que ya le robaron dos guitarras y que por eso se quitó del Oxxo de la calle Leandro Valle.
La joven le manda un mensaje a esos ladrones y dice: “Que se porten bien y que no roben a la gente que trabaja”.
Dice que aprendió desde chica a tocar la guitarra; que se siente muy contenta poder trabajar; es “una gran satisfacción poder llevar el plato de comida a la casa, pero con el sudor de la frente y no andar pidiendo dinero, sobre todo no ser groseros con la gente”.
Pese a ser invidente, hay limosneros que la agreden de palabra. Dice con orgullo que no tiene vicios y que los cigarros que tiene junto a su bocina para ampliar la música, son para venta.
La “artista” afirma que llega alrededor de las 12 horas y se va a las siete de la tarde, aproximadamente y que la comida, a veces, se la regala la gente que la compra en los puestos de comida de la zona.