*Reconoce Jesús Valdés la marcada lealtad partidista del inolvidable «Pichi».
José Manuel (Pichi) Cervantes Castro, recibió este sábado un homenaje póstumo por la clase política tricolor justo en el auditorio de este partido y cuyos asistentes le otorgaron varios minutos de aplausos y quien le sucedió en la presidencia estatal, Jesús Valdés Palazuelos, le recordó con emotivas palabras y voz quebrada por la emoción.
Previo al homenaje, la familia Cervantes Carlón, colocó la fotografía del finado priista en la galería de expresidentes del Revolucionario Institucional, instalada en la sala de juntas.
Durante el homenaje y luego de recibir a la familia del Pichi Cervantes, se proyectó un video con imágenes que evidenciaron la marcada lealtad priista y también el gran amor por su familia.
Fue un priista de cepa, lo describió Jesús Valdés, al hacer uso de la palabra, al señalar que a José Manuel Cervantes le tocó estar en las victorias electorales del PRI, pero también le tocaron las derrotas, y en ambos casos se vio como un general, siempre leal al partido.
Uno de los amigos más entrañables del Pichi Cervantes, y quien también fue presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, Francisco Frías Castro, fue el primer orador de este evento, quien le recordó como compañero de generación de la licenciatura de Derecho de la generación 1967-1972.
“Fue un hombre, un compañero con un Don de Gente fuera de lo común, lo que le permitió ganarse la admiración de quienes fuimos sus amigos”, expresó.
Frías Castro le recordó jugando futbol en la plazuela Rosales, donde las porterías eran las bancas, o bien comiendo raspados con el «capi» Cisneros.
También le ubicó como el claro ejemplo de la “cultura del esfuerzo” y su marcada decisión de estarse siempre capacitando.
Al homenaje asistió la esposa, hijos, yernos y nietos del pichi Cervantes; la secretaria general del PRI Sinaloa, Cinthia Valenzuela; personal del comité directivo, exdirigentes y militancia partidista.
En el auditorio “Benito Juárez” del PRI no hubo presídium. Sólo una mesa larga llena de flores blancas, y sobre éstas la foto de El Pichi saludando con su brazo derecho en alto y vestido con una de sus típicas chamarras.
A las orillas, se ubicaron dos enormes fotos con el nombre del homenajeado.