*Vienen a pasar las fiestas de Navidad con su familia
*No para todos es miel y dulzura
Después de varios días de estar en altamar, algunos pescadores tienen la suerte de pasar las fiestas de Navidad con sus familiares, pero no todos los trabajadores del mar pueden estar en tierra, ya que tienen que ir tras el camarón que les genera ingresos para subsistir.
Pero esto último no es el caso de José Juan López, quien luego de 46 días de pesca, regresan y con una buena producción de casi 6 toneladas de camarón de buen tamaño, lo que les podría redituar a un marinero un ingreso de 18 mil pesos.
Este fue su segundo viaje y dan gracias a Dios el haber regresado bien, sin contratiempos y mucho menos haber sido víctimas de un asalto, como el recién ocurrido el día de ayer, casi frente a la clínica Oceánica, en este puerto.
Llegaron en la madrugada y lo primero que hicieron fue descargar, para dejar todo bien en el barco y poder cenar a gusto con sus seres queridos, donde degustaran unos ricos camaroneros gratinados, producto de su esfuerzo.
Así como él, también están los trabajadores de tierra, entre ellos Juan Manuel Reséndiz Veliz, quien por tener una niña de un año de edad, necesita trabajar y desde hace cinco meses labora en la descarga del camarón que traen los barcos, que atracan en el parque Alfredo V. Bonfil.
Así como ellos son cientos las personas que a diario acuden al tradicional muelle pesquero en busca de un ingreso, que les ayude a solventar sus gastos, esto debido a la falta de trabajo en la ciudad, y como ellos mismos dicen el mar es grande y espera que de para todos
