El mandatario negó que esté interviniendo en el proceso electoral, sino que “luchamos por la democracia”, afirmó.
Luego de que el candidato a la gubernatura por la coalición Va Fuerte por Nuevo León, Adrián de la Garza Santos, interpusiera una denuncia ante la Organización de Estados Americanos (OEA) contra el Presidente de la República por entrometerse en las elecciones, Andrés Manuel López Obrador aseguró que no tiene nada que ocultar.
“No tenemos nada que ocultar y estamos luchando por la democracia, queremos la transformación del país y estamos en contra de la corrupción. Puede venir cualquier organización y están las puertas abiertas, no impedimos a nadie que observe lo que está sucediendo en nuestro país”, dijo.
En su conferencia mañanera, el mandatario sostuvo que no hay censura para nadie, y defendió la demanda pública que realizó sobre la entrega de las denominadas “tarjetas rosas” en Nuevo León. “Consideramos que es un delito”, reiteró, pero aclaró que la Fiscalía General de la República (FGR) será la encargada de revisar el caso y determinar si ese trata de una acción ilícita.
“Si este consejero dice que no es un delito está bien y es su opinión, pero le corresponde a la Fiscalía resolver sobre la denuncia. Él siempre se adelanta porque están ahí para impedir la democracia, de tiempo atrás”, declaró.
López Obrador comentó que tampoco ha recibido apoyo de los consejeros del Instituto Nacional Electoral, sino que han puesto obstáculos, pues “se han hecho de la vista gorda siempre”, aunque celebró que la democracia no dependa de ellos, sino de la población.
Apuntó que este tipo de organismos son producto de un sistema antidemocrático, ya que fueron creados para impedir que los ciudadanos no “tengan las riendas del poder en sus manos”. Sin embargo, determinó que la situación es distinta en la actualidad.
“No nos adelantemos, esperemos a que la Fiscalía decida. Todo mundo tiene derecho a ir a la OEA, a la ONU, cualquier organismo internacional y qué bien que está este tema como debate, lo más importante es que se pueda detener la compra del voto”, resaltó.
Mediante sus denuncias, el Presidente resaltó que busca combatir el “tráfico con la pobreza de la gente”, y señaló que el día de la elección no sólo se va a votar, sino que se cuidará que no existan actos antidemocráticos, como el robo de casillas o actas, “todo lo que hacen los mapaches electorales”.
Información por MILENIO