Los habitantes piden al gobierno federal que atienda sus necesidades, para no tomar la vía violenta contra el crimen organizado.
Michoacán.-
Hasta ayer por la noche, los caminos de la carretera Aguililla-Apatzingán continuaban cerrados por carteles delictivos pese a la promesa del gobierno federal de abrir la vialidad en un horario garantizado de las 10 de la mañana a las 6 de la tarde.
Los habitantes del municipio de Aguililla, quienes permanecen en resistencia al pie de cuartel militar de la región, advirtieron que no se moverán del lugar hasta que no se desmantelen los retenes de grupos delincuenciales y se abra la circulación a la población de manera urgente, de lo contrario podrían convertirse en una resistencia civil armada.
“Yo le pido al Presidente (Andrés Manuel López Obrador) que recapacite y que antes de hacer las cosas como las está pensando hacer que venga y vea. No queremos llegar al punto de tomar las armas porque ahora sí que sido una opción, no queremos llegar a este punto”, advirtieron.
“Aguántenme tantito compadre, mira estamos en eso”, aseguró a los civiles, en llamada telefónica, el comandante Montealegre, mando del 65 batallón de las 43 zona militar en Aguililla quien ayer se comprometió, además, a proporcionar 12 vehículos con personal castrense para patrullar la zona.
Los pobladores del municipio de Aguililla han sufrido desde hace al menos dos semanas cortes intermitentes del suministro de la luz eléctrica, servicio de agua e Internet. Además de que la obstrucción de la carretera no les permite abastecerse de insumos básicos para su subsistencia. Todo lo atribuyen a acciones de la delincuencia organizada.
“Pareciera que hay complicidad con los grupos criminales y el pueblo ya estamos hartos. Lo único que hicimos fue querer paz aquí en el pueblo. Tenía alimentos guardados en un frizen y todos los tuve que tirar… Mi casa huele a animal muerto por todos los restos que tiramos ayer” relató un poblador que padeció los cortes de luz de los últimos días.
Este lunes, autoridades del gobierno federal se habían comprometido a reabrir la circulación en la carretera que conecta el municipio de Aguililla con Apatzingán, y reducir la guarnición militar a solo 12 vehículos que vigilarían la zona de manera permanente, pero aún no ha ocurrido.
Por la tarde, después de una reunión llevada a cabo en el municipio de Apatzingán, autoridades dieron a conocer la respuesta al pliego petitorio de los aguilillenses que incluye también la rehabilitación de las carreteras dañadas por los grupos delictivos; la reactivación de programas sociales; la instalación de una sucursal del Banco del Bienestar que ayude a captación de remesas; además de garantizar el flujo de energía eléctrica y los servicios de telefonía e internet que permita clases a distancia.
“Sus peticiones serán debidamente analizadas por la autoridad con competencia y las atribuciones necesarias para dar respuesta a fin de atenderlas a corto y mediano plazo (…) En ese orden de ideas, en los próximos cinco días hábiles les haremos llegar el calendario de reuniones con autoridades correspondientes de los tres órdenes de gobierno para informar las acciones que se implementarán para atender sus planteamientos” respondieron en documento en poder firmado por el gobierno de México y sus representantes: Lorenzo Gómez Hernández, director de la Unidad de Gobierno de la Secretaría de Gobernación; Arturo Medina Padilla, titular de la Unidad de Políticas y Estrategias para la Construcción de Paz con Entidades Federativas y Regiones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana; y Enrique Razoque Palazuelos, titular de la Unidad para la Defensa de los Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación.
Este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó al diálogo y pidió a la población de Aguililla no dejarse manipular por grupos delictivos que tienen otros propósitos y que aunque aparentan ser muy buenos, repartiendo despensas, sólo utilizan a la gente. Dijo a los pobladores de Aguililla que el gobierno está en la mejor disposición de ayudarles pero pidió no resolver las cosas con violencia. Aseguró que conoce toda la región y que el pueblo de Michoacán es bueno y trabajador. Pidió no dejarse enganchar.
