El gobernador Cuauhtémoc Blanco denunció la existencia de una supuesta red de narcopolítica, misma que involucraría a medio centenar de políticos cercanos a Graco Ramírez.
La defensa del gobernador Cuauhtémoc Blanco fue la ofensiva. Tras la difusión de una fotografía en la que se le ve posando junto a líderes criminales, denunció la existencia de una supuesta red de narcopolítica en Morelos, misma que involucraría a medio centenar de políticos, desde presidentes municipales, diputados, senadores, candidatos, partidos, hasta funcionarios del primer círculo de la administración del perredista Graco Ramírez, con una decena de organizaciones criminales para influir en el ambiente político y delictivo de cara a la elección de 2024.
El lunes pasado el gobernador de Morelos se presentó en las instalaciones de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) de la Fiscalía General de la República (FGR) para denunciar “la guerra sucia”, y sin particularizar, acusó a funcionarios de Morelos que habrían pactado con el crimen, generando así la campaña en su contra.
Reportes policiales, ministeriales, registros de prensa, fotografías y grabaciones recabadas desde 2009 por funcionarios de Morelos, serían la columna vertebral de los señalamientos vertidos por Cuauhtémoc Blanco para sostener sus dichos sobre esta red narcopolítica.
