Inegi. En los últimos cinco años ganaron relevancia económica los municipios ligados a la industria automotriz, no así aquellos de zonas donde se extrae crudo.
La economía nacional está cada vez menos petrolizada y ejemplo de esto es que municipios productores que históricamente habían tenido mucha relevancia en el país como Ciudad del Carmen, Campeche, y Paraíso, Tabasco, perdieron participación e importancia en los censos económicos del país, mientras que los que albergan a la industria automotriz están ganando terreno.
En videoconferencia para presentar el resultado final de los Censos Económicos 2019, Julio Santaella, presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), explicó que las actividades de manufactura, comercio y servicios privados no financieros van ganando terreno al aumentar 10 por ciento de participación en la economía y pasar de 64 a 74 por ciento en su conjunto.
En contraparte, dijo, se está reduciendo la participación del segmento de electricidad, agua y gas, pero en particular de la minería, que ha tenido una disminución en su participación de valor agregado bruto de 17 a 10 por ciento, debido principalmente a la caída de la extracción de petróleo del país durante este periodo.
“La extracción de petróleo ha tenido una tasa media anual de decrecimiento de alrededor de 2 por ciento y esto se ve reflejado en que nuestra economía nacional es cada vez menos petrolizada y por lo tanto está creciendo la participación de otras actividades como manufacturas, comercio y servicios privados no financieros”.
“Esta despetrolización de la economía nacional también se ve desde el punto de vista geográfico; municipios petroleros muy importantes como Ciudad del Carmen, en Campeche, y Paraíso, en Tabasco, han perdido participación e importancia en estos censos”.
Por el contrario, abundó, la industria automotriz es una de las que ha ganado mayor participación en los últimos cinco años, generando alrededor de 858 nuevos establecimientos para llegar a 3 mil 300; generó casi medio millón de nuevos empleos, para llegar a un millón 300 mil, y su tasa de crecimiento media anual del valor agregado censal fue de más de 10 por ciento.
Destacó que gracias a esta industria, municipios como el de Pesquería, Nuevo León, duplicó su valor agregado bruto y el de San José Chiapa, Puebla, casi lo cuadruplicó.
Por su parte, el director general de Estadísticas Económicas del Inegi, Arturo Blancas, explicó que los primeros cambios estructurales de la actividad económica es que a nivel sectorial el comercio y los servicios crecieron, mientras la minería y electricidad cambiaron.
La manufactura subió tres puntos porcentuales en comparación con hace cinco años. “Podemos ver cómo ahora el comercio toma más impacto, porque toma mayor participación y tenemos que tener claro que la distribución y la venta de gasolina, por ejemplo, es muy diferente a como era hace cinco años, y ahora tenemos mucho más jugadores tanto en la parte eléctrica como en los energéticos fósiles, esto nos está llevando a una estructura diferente”, aseguró Santaella.
INFORMALIDAD
La informalidad tiene un peso importante en el país, ya que de 6.3 millones de establecimientos que hay en México, 62.6 por ciento tiene este estatus (4.8 millones) y agrupa a 18.9 por ciento del personal ocupado, pero solo genera 3 por ciento del valor agregado.
El Inegi informó que dado que los censos se realizaron previo a la pandemia, se levantará un nuevo estudio para determinar cuántos negocios sobrevivieron a ésta.
Y ADEMÁS MEDIR RIQUEZA SOLO PARA ESTADÍSTICAS
La propuesta del líder nacional de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, de medir la riqueza entre los mexicanos puede hacerlo el Inegi, pero la información solo podrá ser usada con fines estadísticos, no para temas fiscales o judiciales, aseguró Julio Santaella, quien destacó que en la encuesta ingreso-gasto se indaga, no la riqueza como tal, sino los ingresos de los hogares mexicanos.
Información por MILENIO
