La industria del turismo enfrenta una de las peores incertidumbres de los últimos tiempos, sin embargo, la necesidad económica y el ánimo de servicio de la planta laboral ha permitido que miles de familias continuen luchando por un humilde sustento económico, afirmó Fernando Pucheta Sánchez, presidente de la agrupación «Pucheta, Una Mano Amiga».
El ex alcalde entrevistó a cuatro trabajadores de hoteles y restaurantes y expuso sus casos en redes sociales; los cuatro han pasado por los mismos problemas para ganar sus sueldos: descansos solidarios, la falta de propinas que es lo que supera en muchas ocasiones el salario que ganan e incluso el desempleo desencadenado por la ausencia de turistas en esta época de la pandemia.
Nancy Yadira Valdovinos, de 32 años y Luis Alberto Lizárraga de 28 años, son meseros de un hotel de esta ciudad; María Elena González, de 58 años y Zenaida Navarro de 31 años, son camaristas en diferentes centros de hospedaje. Los cuatro viven de las propinas que dejan los turistas y locales tanto en restaurantes como en habitaciones, sin embargo, semanalmente tienen dos o tres días de descanso solidarios.
Pese a la falta de más ingresos por las estrategias de ahorro que implementan las empresas, los trabajadores prefieren no abandonar sus empleos, pues tratan de ejecutar su trabajo lo mejor posible ya que de ahí depende las propinas que reciben de los turistas y comensales. Es decir, en ocasiones, las pequeñas recompensas que dejan los visitantes son mayores en conjunto que un día de sueldo.
Pucheta Sánchez pidió a los turistas y mazatlecos valorar el trabajo de los prestadores de servicios turísticos, guardando las medidas sanitarias contra la enfermedad y apoyarlos en medio de esta crisis. Igual consideró importante fortalecer a la industria turística con herramientas que permitan mejorar la calidad sanitaria de la prestación de sus servicios.