– La temporada concluye el 30 de noviembre y se han pronosticado 19 para el Pacífico Mexicano.
– Hasta el momento se han formado 16 entre huracanes y tormentas.
– La información meteorológica permite conocer más de la naturaleza y prevenir en consecuencia: Hugo Nordalh Valdez.
– Falso que influya la marea para inundaciones en Mazatlán. Los ciclones son fenómenos naturales asociados al ciclo del agua, pues se originan por evaporación y condensación de ésta. En México inician su formación y presencia en el mes de mayo y, generalmente, dejan de formarse en el mes de noviembre. Regularmente miden entre 10 y 15 kilómetros de alto y van desde los 50 a los 100 kilómetros de ancho. Debido a la potencialidad de sus vientos se califican en depresiones tropicales, tormentas, huracanes y ciclones. Para la presente temporada, que oficialmente concluye el día 30 de noviembre, el Servicio Meteorológico Nacional, pronosticó un total de 19 ciclones tropicales con nombre para este 2013.
Hasta el momento se han formado los huracanes Bárbara, Cosme, Dalila, Erick, Gil, Henrriete y Manuel; así como las tormentas tropicales Alvin, Flossie, Ivo, Juliette, Kiko, Lorena, Narda, Octave y Priscilla, la cual surgió la madrugada del lunes lejos de las costas nacionales por lo que todavía no produce efectos.
IMPORTANCIA.- Para el Jefe del Servicio Meteorológico de la Conagua en Mazatlán, Hugo Nordalh Valdez la información meteorológica es importante porque nos permite conocer un poco más de la naturaleza, en este sentido, del comportamiento del estado del tiempo tanto en superficie como atmosférica, lo que permite en determinado momento tomar decisiones que pueden salvar vidas humanas. “En superficie un observador meteorólogo está capacitado para identificar el tipo de nubes, de donde vienen, en que altitud y nivel se encuentran, la velocidad del viento, la visibilidad, en fin todos los parámetros ver cómo medir por medio de aparatos y en El Globo (estación de Mazatlán) lo hacemos cada doce horas para saber en qué estado está la atmosfera y poder así compartir la información y llegar a un pronóstico”, explica. Reconoce que la meteorología es una ciencia inexacta por eso produce “pronósticos”, adelantándose a lo que pudiera suceder; pero en la actualidad debido a los avances tecnológicos ahora los pronósticos son hasta un ochenta por ciento más exactos que hace 20 años. Sin embargo, este tipo de fenómenos atmosféricos como los ciclones muchas veces son erráticos dependiendo de condiciones que van desde la temperatura del agua, corrientes oceánicas y el clima o presión.
Al ser cuestionado acerca de la función de un ciclón o huracán en la naturaleza, Nordalh Valdez explica que lo que hace es disipar el calor. “¿Qué hace la tierra cuando tiene calor? Tiene una corriente marina que se lleva el calor y si no es suficiente en la zona de los trópicos, entonces tiene un mecanismo que son los vientos alisios, los vientos del norte y el sur, pero si aún no es suficiente entonces crea otro mecanismo y esto es que empieza a subir el calor y bajar el viento frío de la atmosfera, es decir converger los vientos de arriba hacia abajo pero en forma espiral, por eso se le llama ciclón”, explica. Un ciclón, por ende, es un remolino gigante que llega a ocupar un espacio de cientos o miles de kilómetros cuadrados, que llega a tener hasta 500 kilómetros de ancho con un centro de baja presión que puede tener desde los 25 a los 40 kilómetros. Las estaciones también afectan o influyen en la formación de este tipo de fenómenos.
CONDICIONES.- Las condiciones básica sopara la formación de un ciclón son una temperatura mínima de 26 grados en la superficie del agua, una presión baja y una humedad muy alta; con lo que los vientos empiezan a fortalecerse y girar. Al girar forman una zona de inestabilidades que a medida que va incrementando sus vientos forma una depresión que va a sentar un movimiento errático hacia un punto del océano. Mientras sus vientos sostenidos no lleguen a los 62 kilómetros por hora se sigue considerando depresión; pero, al rebasar dicha velocidad se le califica como tormenta tropical y de acuerdo a los lineamientos de la Organización Meteorológica Mundial se le asigna un nombre. Los nombres ya están preestablecidos en seis listas que se van rotando, año con año; por ejemplo, la lista que se está utilizando en este año es la misma que se utilizó en el año de 2007. Cuando ya se tiene una tormenta tropical y sus rachas se intensifican a 120 kilómetros por hora pasa a ser huracán categoría uno. Ciclón es cuando el sistema empieza a tener forma giratoria, es decir a dar vueltas el viento.
Hugo Nordalh nos informa que la palabra huracán viene de un vocablo que utilizaban los mayas e indios caribes para definir al dios de las tormentas y significa Dios de Un Pie. Conforme crecen los vientos puede clasificarse como huracán categoría cinco, el cual es el presente vientos mayores sostenidos de 250 kilómetros por hora. MAREAS. El meteorólogo Nordalh Valdez indica que en el caso de Mazatlán, el hecho de que haya marea alta o baja para que se inunde no tiene nada que ver, porque siempre que todo sistema de baja presión va a subir la marea. “Un huracán clase cinco te levanta la marea cinco metros, mientras que el de clase Uno te la levante de uno a dos metros”.
En Mazatlán se encuentra uno de los quince observatorios más completos, de los 85 en total, con los que cuenta Conagua en el país. En opinión de Nordalh Valdez para evitar tantas desgracias que ocurren con estos fenómenos atmosféricos no se deben de permitir asentamientos en lugares bajos, lo que representa el primer error en una sociedad como la nuestra; el permitirlo y que la gente no tenga conciencia y se establezcan en lugares de alto riesgo. “No estamos respetando la naturaleza. Igual cuando se hacen construcciones no se respetan las avenidas de los arroyos. Aquí en Mazatlán en la colonia López Mateos íbamos a cazar patos a una laguna que estaba enfrente y que hoy esta lleva de negocios; en la parte de la Sánchez Celis íbamos a pescar, era una laguna que hoy está tapada”. Todo eso era un lecho de agua que de precipitarse actualmente debe de buscar su salida y eso es una falla que tenemos en la planificación de nuestra ciudad.