¿Por qué la Mary Jane de Kirsten Dunst no cruzó la puerta multiuniversal? El mandamás de Marvel lo aclara.
A lo largo de 19 años y dos reboots (que se dice pronto), la carrera de Spider-Man en el cine ha acumulado una cantidad ingente de personajes secundarios. Y, si bien Spider-Man: No Way Home ha hecho lo posible para poner de acuerdo estas continuidades, no ha llegado a hacerlo del todo.
Porque, si bien el filme de Jon Watts ha reunido a Tom Holland con Andrew Garfield, Tobey Maguire, Willem Dafoe, Alfred Molina y Jamie Foxx (entre otros), ha mostrado también varias omisiones de aúpa. Las más importantes de ellas, seguramente, han sido las de Kirsten Dunst como Mary Jane Watson y Emma Stone como Gwen Stacy.
Ahora, en una entrevista para el New York Times (vía ComicBook), Kevin Feige ha aclarado estas ausencias. Y, más que para reconocer que los intérpretes de turno no estaban por la labor, sus declaraciones le han servido para justificarlas en pro de la claridad del guion.
«Cuando la gente vea la película, lo entenderá», señala Feige, indicando que, para los implicados en la película (el director Watts, la productora Amy Pascal y los guionistas Chris McKenna y Erik Sommers), la meta era que «el último año de instituto de Peter Parker no se perdiera entre toda la locura que se monta gracias a su encuentro con el Doctor Strange».
«Eso podría haber pasado con mucha facilidad, y esa es la razón de que no haya otras 20 personas en la película», remacha el productor. Así pues, quienes esperábamos ver a Mary Jane y su casi tocaya M. J. (Zendaya) charlando sobre los pros y los contras de tener un novio trepamuros nos hemos perdido una oportunidad única.