*Parálisis mental de nacimiento la tiene así
*Es también la historia de una madre
Juanita García con sus 22 años sabrá de su tragedia de haber nacido con discapacidad mental? Cuánta inteligencia tendrá para saber de su realidad de estar postrada por siempre? Sabrá que para poder vivir su madre está al límite de la limosna vendiendo dulces y soñando el milagro de una casita para tener un techo y no estar mes a mes con el riesgo de que las corra el rentista?… Hay tragedias que se superan, está tendrá algún día un final feliz?
Es la breve historia de una madre soltera de Durango, Teresa Rosas Miranda, que los golpes de la vida la trajeron con sus hijas hace 11 años hasta Mazatlán.
Juanita tiene parálisis cerebral desde nacimiento. Su madre no se acoge a la limosna; antes limpiaba casas, pero no podía estar cerca de su hija que demanda muchos cuidados y a riesgo de que la critiquen por tenerla al lado, en la venta de dulces, y que piensen que la “usa para dar lástima”, Teresa aguanta y sólo ofrece bendiciones y que “Dios les dé más”.
Sin olvidar la fuerza y el valor de un “Eterno”, Teresa cree y confía que su hija habrá de curarse por un “milagro de Dios”. Sin embargo, terrenal como todo humano, cuando se enferma Juanita sobre todo de bronquitis, Teresa acude al “similares” para dar solución a esa enfermedad.
Recuerda que allá en la sierra de Durango Juanita se enfermaba mucho del pecho; peregrinó mucho con los gobiernos locales de ese estado y hasta con la quema de su casa por la violencia del narcotráfico y no le quedó otra que venirse a Mazatlán donde el clima ha sido benéfico para su hija.
Esta no es la historia de Teresa, una madre que sufre y que nunca ha pensado en abandonar a su hija como otra gente que lo ha hecho con personales especiales, sino la vida de Juanita que con la expresividad de sus ojos no sabe, quizás, lo que sucede en este mundo tan difícil y complejo a veces.
Sabrá Juanita, quien ya vivió una vida al menos de 22 años, los sufrimientos de una madre que ha estado siempre a su lado y no dejarla morir de inanición o abandonarla a las puertas de un orfanato o de cualquier oficina de un DIF?.
Qué te importa a ti, lector o seguidor de Sinaloa en Línea, la vida de Juanita?