Es cierto que desde antes de su inauguración, la carretera Mazatlán- Durango presentó algunos desperfectos que fueron arreglados en tiempo y forma, pero eso no quiere decir que con los problemas que provocó la tormenta tropical Sonia, el lunes anterior, las cosas estén peor.
En todo caso, lo que hay que hacer es que quienes están a cargo de su mantenimiento realicen las operaciones de revisión correspondiente para que se mantenga una seguridad constante y se eviten cualquier tipo de conflictos, destacó el presidente de la Fecanaco Sinaloa, Guillermo Romero.
Agregó que es una carretera, que como toda obra que sufra el fenómeno que pasó, habrá de sufrir las consecuencias.
Sin embargo que bueno que se dieron cuenta de lo que está ocurriendo, que se detecten con el tiempo debido para que se hagan los arreglos pertinentes.
Lo mejor de todo que fue no causó daños mayores y sobre todo, que no hubo consecuencias en pérdidas de vidas humanas.
Reiteró en la importancia de efectuar una revisión con medidas de prevención y seguridad, pues va a seguir existiendo el mismo problema, que cuando tengamos fenómenos similares, ya no tengamos situaciones como la las que vivimos al grado de que se cierre.
“Hay que recordar que se enfrentó a la naturaleza su construcción, no es como lo que comúnmente vemos donde se hace una autopista como la Culiacán- Mazatlán; esta es una vía histórica por todo lo que se enfrentaron sus constructores, no vemos que haya desperfectos que afecten el futuro de. Nos mandaron un mensaje y tenemos que tener especial cuidado. El enfrentamiento a meteoros naturales es algo que estaremos viendo siempre, pero no por ello, podemos decir que las cosas no saldrán bien”, puntualizó.