México posee gran potencial de generación de energías verdes que deben ser prioritarias; incluso, de no tener fuentes renovables, se deberían considerar alternativas para evitar el uso de la energía nuclear, ya que sus riesgos son mucho más grandes que sus beneficios, analiza Experto CETYS
Mexicali, B.C., a 09 de noviembre del 2020.-
El uso de energía nuclear ha demostrado que no es a prueba de errores. Cuando se ha visto implicada en accidentes, las consecuencias han sido lamentables. Eventos como el de Chernóbil, Rusia, en 1986, son precedentes a tomar en cuenta ante el interés de construir una planta nuclear en Baja California, manifestado en días recientes por la Secretaría de Energía (SENER) a través de su titular, Rocío Nahle.
Generar energía usando material radiactivo es equivalente a correr en bicicleta con un vaso de aceite hirviendo sobre la cabeza: si el terreno que se transita es plano, lo más probable es que no ocurra nada, pero si el terreno es inestable, el vaso puede derramarse sobre la cabeza y rostro del conductor, produciendo consecuencias desastrosas y daños permanentes, explicó el Dr. Jesús Mora Ramírez, Coordinador de la Ingeniería en Energías Renovables de CETYS Universidad Campus Mexicali.
“Un accidente nuclear genera daños medioambientales que duran por décadas, y afectan la vida humana por varias generaciones. Agua contaminada, tierra que no puede usarse para sembrar, deformidades, cáncer y enfermedades genéticas hereditarias, son algunos de sus principales efectos. Además, la nube radiactiva se esparce por kilómetros a la redonda llevando la toxicidad a ciudades vecinas. El riesgo de desastre parece un asunto simple, pero esta sencilla razón es suficiente para no construir ninguna planta nuclear en ningún lugar del mundo”, aseveró.
Por otra parte, tomando en cuenta su enorme potencial para generar energías renovables, “no es ni siquiera necesario considerar la energía nuclear como una opción en México”, estimó el académico.
En el documento Prospectiva de Energías Renovables 2016-2030, emitido por la SENER, se establece que México podría operar hasta el 61% de su sistema eléctrico con el aprovechamiento de las fuentes eólica y solar solamente, mismas que pueden integrarse eficientemente en el sistema mexicano.
El mayor potencial de generación con cada fuente renovable es el siguiente:
- Eólica: 87,600 GWh
- Solar: 6,500,000 GWh
- Biomasa: 11,485 GWh
- Hidráulica: 44,180 GWh
- Geotérmica: 52,013 GWh
“Ante este panorama, no es solamente innecesario hablar de energía nuclear en México, sino es contrario a la tendencia actual en el desarrollo de energías renovables nacional”, dijo el Dr. Mora.
Hasta ahora, el mejor argumento a favor de la energía nuclear es su costo, que de acuerdo con datos del Instituto de Energía Nuclear de EUA puede producirse por menos de 3.4 centavos de dólar por kWh, y hasta 4.3 centavos las más costosas, frente a los entre 5 y 7 centavos que cuesta el KWh de energía eólica y los 13 centavos de costo de la energía solar fotovoltaica.
Sin embargo, es importante reconocer que los costos de producción de energía con fuentes renovables están descendiendo significativamente año con año, haciendo más atractiva su aplicación y preferencia sobre otros tipos de generación. Además, México tiene un lugar privilegiado en el mundo por su diversidad de climas, lo que facilita la adopción masiva de generación de electricidad con fuentes renovables.
“El potencial de generación verde de electricidad es suficientemente conveniente como para considerar la energía eólica, solar, hidráulica, geotérmica y biomasa, mucho antes que la energía nuclear. Incluso si no se tuviera potencial de ninguna otra fuente renovable, hay otras estrategias para evitar el uso de la nuclear, cuyos riesgos medioambientales y de salud son mucho más grandes que los beneficios económicos. En pocas palabras, abrir una planta nuclear no es recomendable en Baja California, ni en ningún otro lugar de México”, concluyó el Coordinador.