El Tribunal Superior de Justicia determinó que las garantías estadunidenses eran suficientes para asegurar que Julian Assange recibirá un trato humano.
Estados Unidos ganó un recurso ante el Tribunal de Apelación de Londres contra un fallo en enero que había denegado la extradición del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a ese país por riesgo de suicidio, ya que según, era demasiado frágil para soportar el sistema judicial estadunidense.
El Tribunal Superior de Justicia determinó que las garantías estadunidenses eran suficientes para asegurar que Julian Assange recibirá un trato humano y ordenó a una juez de primera instancia que envíe el pedido de extradición a la Secretaría de Interior para su revisión. El departamento, que supervisa la aplicación de la ley en Gran Bretaña, tendrá la decisión final sobre el traslado.
»No hay ningún motivo por el que este tribunal no deba aceptar las garantías que dicen que tendrá», señaló el fallo de la corte. «No hay base alguna para suponer que Estados Unidos no ha dado las garantías de buena fe».
La prometida de Julian Assange, Stella Moris, calificó la decisión de «grave error judicial» y dijo que sus abogados presentarán un recurso «a la mayor brevedad posible».
Julian Assange, de 50 años, está retenido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, en Londres. Sus partidarios se congregaron en el exterior de tribunal el viernes con pancartas que pedían su liberación.
A principios de año, una juez de primera instancia rechazó el pedido de Estados Unidos para extraditar a Julian Assange por cargos de espionaje derivados de la publicación de documentos militares secretos en WikiLeaks hace una década. La magistrada de distrito Vanessa Baraitser alegó motivos de salud y señaló que era probable que Assange se suicidase si entraba en el duro sistema carcelario estadunidense.
Estados Unidos presentó un recurso desafiando la noción de que la salud mental de Julian Assange lo hacía demasiado vulnerable para resistir un juicio en el país. El abogado James Lewis dijo que el fundador de WikiLeaks «no tiene un historial de enfermedades mentales graves y duraderas» y no llega al umbral que determinaría que no puede resistirse a autoinfligirse daño.
Las autoridades estadounidenses dijeron a los jueces británicos que si acceden a la extradición, Julian Assange podría cumplir cualquier sentencia de prisión que reciba en su Australia natal. Además, señalaron que no sería retenido en la penitenciaría de máxima seguridad de Florence, Colorado.
La fiscalía estadunidense acusó a Julian Assange de 17 casos de espionaje y de uno de uso indebido de computadoras por la publicación de miles de documentos militares y diplomáticos filtrados a través de WikiLeaks. Los delitos acarrean una pena máxima de 175 años de cárcel, aunque Lewis afirmó que «la sentencia más larga impuesta nunca por este delito es de 63 meses».
Información por MILENIO