Llueven registros “morenos”; Estrella Palacios y Pucheta, ya; Informe express del gobernador en el Congreso
FRANCISCO CHIQUETE
En Morena han menudeado los registros de aspirantes a candidatos y seguramente hoy, que se cierra el periodo, caerán muchos de los que permanecen indecisos. Por lo pronto en los principales municipios ya están los más mencionados.
Los registros abundaron por diversos rumbos del estado. En Ahome por ejemplo, Gerardo Vargas Landeros fue de los primeros en garantizarse un lugar en la disputa interna. Aunque su formación como político tradicional lo empujaba a esperar hasta el último momento, para tener más proyección, el riesgo de que la igualdad de género lo desplace, le llevó a solventar temprano su trámite.
En Culiacán también quedó registrada Tere Guerra, quien hasta dio conferencia de prensa para enterar al público. En cambio hasta el cierre de esta entrega, no había confirmación de que el alcalde en funciones, Juan de Dios Gámez lo hubiera hecho, aunque se considera que sí estará en la lista.
Igual se especulaba sobre Merary Villegas, quien está dispuesta a darle la batalla al tercer piso para obtener esa postulación. De conseguirla, sería la segunda vez que se alza con la vctoria. La primera fue su designación como presidenta del comité estatal morenista, donde por cuestión de género, desplazó a Manuel de Jesús Guerrero Verdugo, cercanísimo del gobernador.
En Mazatlán quedaron registrados los dos principales personajes de la disputa: Estrella Palacios, actual secretaria de Turismo, y Fernando Pucheta Sánchez, exalcalde y exsubsecretario de ese mismo ramo.
También lo hizo el agente inmobiliario Carlos Escobar y estaría por hacerlo la exsíndica procuradora Elsa Bojórquez. Hasta este martes no lo habían hecho ni Guerrero Verdugo ni Alejandro Higuera Osuna. La especulación dentro de Morena es que no habían recibido una línea sólida para hacerlo, aunque el gobernador había dejado en libertad de participar a todos sus colaboradores, sin exigirles ni siquiera una solicitud de permiso o renuncia al cargo.
Como se sabe, en los cuatro municipios más grandes del estado, los partidos deben repartir las postulaciones en forma equilibrada, es decir, dos hombres y dos mujeres. Por ello cada equipo y corriente se protege con cartas para cada uno de esos casos.
El proceso es largo. Los que solicitaron sus registros deberán esperar hasta el 17 de febrero, casi por carnaval, para saber si fueron aprobados, y van a someterse a las encuestas que formalmente van a definir quiénes compiten en la elección constitucional.
UN INFORME DE
PISA Y CORRE
El gobernador Rubén Rocha Moya resolvió el problema de presentar su segundo informe en la misma forma que le evitaron el primer intento: con in descontón.
Sin agua va, el Congreso programó la sesión en que Rocha leería su documento e interactuaría con los diputados. No hubo tiempo de organizar una marcha, mucho menos un bloqueo como el del pasado 29 de noviembre. Rocha Moya llegó con un acuerdo más o menos discreto de la Junta de Coordinación Política, donde los que menos pesan son los pocos opositores, integrados al PAS.
No pasó absolutamente nada. Ni un escándalo, ningún enfrentamiento, ni tampoco una sorpresa agradable o una información sorpresiva. Fue un trámite burocrático que sólo sirvió para que se le demostrara a “la Universidad Partido” que no controla los eventos públicos de Sinaloa.
Incluso generó más controversia la revelación hecha por el propio Rubén Rocha Moya de que hubo un encuentro formal con Héctor Melesio Cuén Ojeda, sin que se hubiese llegado a acuerdos. Por supuesto, es imposible que los haya: ni Cuén quiere soltar el control universitario, ni Rocha acepta que le retachen la Ley de Educación Superior porque espera eso: que con esa ley, Cuén tenga que soltar a la UAS, que está en sus manos desde hace dieciocho años.
¿CUÁL ES LA SORPRESA?
Sinaloa recibió una muy negativa proyección a causa del video en que dos jóvenes son tableados por las calles de Guasave, bajo una vigilancia intensamente armada de sicarios. A todo mundo desagradó el hecho, como es natural.
Pero no dejamos de preguntarnos ¿cuál es la sorpresa? Han sido frecuentes los casos de hombres, sobre todo jóvenes, golpeados salvajemente por sujetos no identificados, pero evidentemente ubicados como parte del crimen organizado. Incluso ha habido asesinatos contra quienes se dedican a alguna actividad delictiva realizada fuera de las “normas” de los cárteles,- no por hacer justicia, sino para evitar el calentamiento de “sus” plazas. En todos los casos, como este reciente de Guasave, se ha enseñoreado la impunidad, pues las autoridades prefieren fingir demencia y ceguera.