*Todos les fallan a los 43 desaparecidos
*Incidencias de la carrera por el 2016
*Un forma en que se miden los políticos
FRANCISCO CHIQUETE
Un año de la desaparición de cuarenta y tres estudiantes –muy probablemente asesinados- en Guerrero, y el país sigue mostrando exactamente las mismas barbaridades y carencias que lo han llevado a su situación actual.
Se encontraron los padres de los estudiantes de Ayotzinapan con el Presidente Enrique Peña Nieto, y en lugar de avanzar hacia alguna solución, los mexicanos nos encontramos con una cerrazón igualita a la de septiembre de 2014.
El presidente se comprometió ante los padres a que se hagan las investigaciones correspondientes. Es lógico, pero que lo anuncien como un compromiso surgido de la reunión es absurdo. ¿No es papel de gobierno, obligación del gobierno, procurar justicia? ¿No se había ya anunciado que se extendería el plazo a los especialistas internacionales?
Lo menos que pude hacer el gobierno, efectivamente, es reiterar su compromiso con la justicia, pero hacer una lista de obviedades establecidas en la ley, no ayuda a distender la situación.
En la contraparte, los padres asistentes a diálogo no terminaban de escuchar el mensaje y ya estaban rechazando. Se entiende y es muy lógico el dolor que enfrentan. Nadie puede soportar impasible una pérdida de ese tamaño, pero muchos de las exigencias de sus representantes están encaminadas a exhibir a un gobierno ineficiente, que a acelerar la búsqueda de justicia.
El gobierno no ha podido esclarecer nada de aquello que dejó perder por su tardanza en asumir la responsabilidad de las investigaciones, y un año después la actitud sigue siendo de dar explicaciones burocráticas que lejos de sacarlo del problema, le restan credibilidad incluso cuando aporta elementos que pueden ser valiosos.
Es una desgracia que el anuncio de una nueva identificación haya sido destruido con dos descalificaciones públicas, una de personas que no tienen la menor idea de lo que hablan, y otra de los expertos argentinos a quienes sólo les bastó con poner en duda lo anunciado, para que a la PGR se le cayera de las manos el supuesto as de triunfo que acababan de exhibir.
Hoy las exigencias de quienes rodean a los padres parecen más búsqueda de una revancha social que de búsqueda de respuestas. Y la verdad es que cuando no hay eso, cuando no hay soluciones la sociedad tiene derecho a exigir que se le repare el daño o el ánimo por alguna otra vía.
ENTRE LAS CARRERAS
Y LOS RUMORES
Como estaba programado, el sábado estuvo aquí el secretario general de gobierno, Gerardo Vargas Landeros, quien encabeza la Feria de Servicios Interinstitucionales con que se atienden necesidades diversas de la gente, y por supuesto, se hace presencia político con miras a la sucesión en el gobierno de Sinaloa, que como se sabe, será definida el año próximo.
La feria, como ya es normal, tuvo miles de asistentes. Personas de escasas posibilidades económicas que ven satisfechas necesidades tan elementales como la atención médica, un trámite escolar y subsanar carencias relacionadas con el registro civil, entre otros renglones. Una tarea perfectamente enfocada que sólo durante el fin de semana, entre Mazatlán y Culiacán, le dio oportunidades a Gerardo Vargas y su equipo, de interactuar con más de once mil personas.
Pero ates de eso hubo una reunión no programada públicamente, incluso negada o desconocida de manera formal y que generó decenas de rumores por toda la ciudad y luego por todo el estado.
-¿Ya supiste? ¡Gerardo Vargas tiene a más de mil personas en el Hotel Hacienda!
-¡Ahora sí ya se le hizo: el Hacienda está lleno de gente que va con Gerardo!
-¿Crees que esté bien? ¿no se te hace muy prematuro?
-¿No crees que puede ser muy riesgoso par el jefe?
-Y además están fulano, y zutano y mengano…
Vargas Landeros por supuesto, tenía todo previsto y correcto. Algunos cientos de personas estaban ahí porque fueron convocadas para hablar de los créditos al transporte público, en un programa de modernización que se había anunciado un día antes.
En efecto, fulano, zutano y mengano, prominentes por sus condiciones de fedatarios, habían acudido a invitación a su gremio, que participa ahora en las jornadas interinstitucionales, lo que los hacía parte de los cuatrocientos asistentes para los que tiene capacidad el local, aunque el movimiento de ayudantes, fans y choferes, hiciera parecer que las instalaciones estaban desbordadas, aunque estaban también el presidente de la Intercamaral en Sinaloa, Guillermo Romero, y de paso el presidente de la Canaco, Oscar Tirado, quien en estos casos tiene que hacer un paréntesis de sus actividades de posicionamiento en el PAN, donde lucha por ser regidor del próximo ayuntamiento.
LA CONSTANCIA DE
DIVA HADAMIRA
Como ocurre con frecuencia, Gerardo no estuvo solo en la región, Durante el fin de semana la senadora Diva Hadamira Gastélum Bajo realizó una actividad intensa en tres municipios, visitando Concordia, Rosario y Escuinapa. Como es Senadora, la aspirante a la gubernatura sinaloense tiene perfecta cobertura para realizar actos públicos en los que además le acompañan los presidentes municipales.
Todo sirve para hacer presencia: desde programas de vivienda del gobierno federal, o acciones más modestas como la entrega de bicicletas para niños en edad escolar que tengan dificultades para trasladarse a donde están sus escuelas, pero también diálogos con la clase política, encuentros con miembros de grupos sensibles, como los pescadores, tan afectados por una temporada que mal arranca y peor puede terminar.
Diva no ha aflojado en su empeño y sus seguidores quedaron muy complacidos porque el presidente Peña dijo ante un grupo especial de la ONU que para poder sacar adelante al mundo, para dinamizarlo, hace falta dar más espacios a las mujeres, empoderarlas para que lleven buen término las acciones de la sociedad.
La decisión de la gubernatura en Sinaloa es una de las que forman el arranque de temporada política. Si no hay una decisión a favor de las mujeres en otras entidades, Diva Hadamira podrá seguir aspirando a la candidatura.
UN LIBRO QUE SE PASA DE LA RAYA
En la semana también fue presentado el libro de Alejandro Oláis Olivas Heriberto Galindo, una biografía no autorizada. Se trata de un escrito sólido, informado, construido con grandes capacidades para hacer visible la impresionante carrera política del exdiputado guamuchilense que está igualmente metido en la carrera gubernamental.
El libro, como reconoce el propio Oláis Oliva, es un alegato a favor de Galindo, del proyecto que éste enarbola. Es una lista de personajes locales y nacionales, de gente que ha destacado, empezando con don Ernesto Álvarez Nolasco hasta Enrique Peña Nieto, que trabaja de presidente de la Republica. También aparecen, como tenía que ser, Jesús Reyes Heroles y David Ibarra Muñoz.
Gestiones muy regionales como la clínica del IMSS para Guamúchil y acciones prominentes como la participación en la ONU, la titularidad en el consulado de Chicago y en la embajada de México en La Habana. Todo deslumbrante, como la dirección del Consejo de Recursos para la Atención de la Juventud, donde se estableció la primera política pública formal para los jóvenes en México.
Seguramente que no hay un argumento más estructurado a favor de un aspirante. Este libro bien distribuido entre las personas adecuadas es un vehículo de divulgación sin igual, de una carrera que tiene que reconocerse brillante y exitosa a pesar de espacios tan tremendos como los que Galindo debió enfrentar después de malograda la campaña electoral de Luis Donaldo Colosio, y cuando estuvo a punto de morir junto a José Francisco Ruiz Massieu, incluyendo la pérdida de una nueva oportunidad pues estaba llamado a ser el segundo de la Cámara que encabezaría el político guerrerense.
El único problema es que en un país donde no se lee, el libro no da para competir como elemento de divulgación y convencimiento.
TODOS QUIEREN ESTAR AL CIEN
Sergio Torres pago hasta con una amonestación del Congreso del Estado por poner en marcha durante la elección federal, la campaña Al cien por Culiacán, pero a fin de cuentas, le queda la satisfacción de haberle metido el lema a los políticos de su partido y de otros.
El viernes, el dirigente estatal del PAS, Héctor Melesio Cuen Ojeda, dijo a un grupo de reporteros que fue él quien creó ese slogan. –Pa’mi mejor que Sergio Torres lo ande pregonando, porque la gente se va a acordar de mí, apuntó el político uaseño después de su correspondiente cuota de reiteración de que va por la gubernatura de Sinaloa y que está listo para encabezar una alianza con otras fuerzas políticas.
Ayer, en la Feria de Servicios Institucionales de Culiacán, Gerardo Vargas y el secretario de Economía del estado, Aarón Rivas Loaiza, fueron a uno de los stands de salud y se midieron la presión arterial. Al conocer los resultados, ambos afirmaron sonrientes que están “a más del cien” y que ya no sufren la presión.
Cuando un término se pone de moda, quienes los usan no se detienen con nada.