*Peña Nieto paró a acelerados y no dio pistas
*¿El enemigo es López Obrador, o la pobreza?
*Gerardo Vargas borra sus pintas ¿y los otros?
FRANCISCO CHIQUETE
El presidente Enrique Peña Nieto dio varias directrices durante su encuentro con la estructura priísta. Es evidente que la estrategia ya dejó de ser la pasividad arrollada por las circunstancias, para fijar una agenda propia que por supuesto, deberá competir contra las de otras fuerzas del país y de su propio partido.
En primer lugar aplicó un estatequieto a los que ya están pensando en la sucesión presidencial del 2018. Es cierto que los que se sientan con boleto para participar van a seguir haciéndole su lucha, pero tendrán que cuidar más las formas porque ya hay una orden presidencial y desobedecerla puede significar la pérdida de esa oportunidad, real o imaginaria.
Por tanto, no se pudo adelantar si Manlio Fabio Beltrones seguirá teniendo juego político durante los siguientes tres años, ni se confirmó que Miguel Ángel Osorio Chong sale del gabinete, y por tanto no hay manera de decir si Luis Videgaray está fortalecido o no en sus aspiraciones. Por el contrario, todos fueron mandados a la congeladora de manera indiscriminada.
Habrá que esperar a mitad de agosto, cuando se concrete el relevo en la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del PRI. Se supone que va Enrique Martínez y Martínez, pero también que sería el destino de Osorio Chong, o el de Manlio Fabio Beltrones. Se especula igualmente que Beltrones podría ir a la Secretaría de Gobernación, pero seguramente se necesitaría que Osorio se fuese al PRI, efectivamente.
Antes de tres semanas estarán desvelados algunos de esos supuestos, pero mientras, hay otros aspectos del discurso de Peña Nieto que finalmente arrojan pistas sobre la idea que tiene el presidente de la actividad política.
Su fustigamiento a Andrés Manuel López Obrador, por ejemplo. Esa referencia contra los políticos populistas y demagogos era evidentemente dirigida al adelantado candidato presidencial del Movimiento de Regeneración Nacional y por supuesto, a movimientos como la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.
¿Las mediciones de Presidencia indican que López Obrador es el principal rival del PRI, o directamente del gobierno? Esto implica entonces que no se considera al PAN como un rival importante para la competencia electoral del 2018, a pesar de la división que se ve como un gran obstáculo para la izquierda mexicana, sobre todo ahora que en el PRD siguen aflorando las subdivisiones, que hacen más difícil el panorama de aquí a la elección presidencial.
Quizá Peña Nieto siga viendo al PAN como el aliado que fue durante este primer trienio de su gobierno, y por ello enfoca sus baterías contra quien ha mostrado no estar dispuesto a llegar acuerdos de ninguna naturaleza con el gobierno, probablemente ni siquiera con asuntos de elemental observación para la marcha de un país.
¿POR QUÉ SE LE TEMERÍA A
ANDRÉS MANIUEL LÓPEZ OBREDOR?
El presidente de Morena ha sido uno de los pocos políticos que se han sostenido como oposición absoluta al gobierno de Enrique Peña Nieto, que lo que da resultados importantes en un sector de la opinión pública que ha ido creciendo.
En condiciones normales sería muy difícil que un candidato de izquierda como Andrés Manuel López Obrador pudiese catalizar todo el descontento social en un panorama de divisiones y enconos tales, que no es descabellado pensar en una alianza perredista con el PAN para enfrentar el reto del 2018, como ya se llegó a analizar, aunque no a concretar, una alianza con el PRI para la elección que acaba de pasar en el Distrito Federal.
Pero las cosas están verdaderamente difíciles para la gente y ello hace que se busquen salidas que parezcan garantizar soluciones. Y las de López Obrador, tan despreciadas y combatidas por los especialistas, suelen ser dulces a los oídos de la gente marginada y enojada. Incluso de clases medias que se sienten amenazadas en sus niveles de vida.
Apenas en esta semana se dieron a conocer estadísticas en que se reconoce la condición de pobreza de un 54 por ciento de la población- El gobierno se defiende diciendo que a cambio de este escandaloso nivel de ineficiencia económica, se registró una reducción en los nieles de la llamada pobreza extrema.
La nota por supuesto, fue ocasión para que muchos se preguntasen a dónde van a dar los cientos de miles de millones de pesos que año con año maneja la Sedesol. Para que se saquen cuentas y se pregunte porqué con tanto dinero acumulado en programas sociales, especialmente los dirigidos contra el hambre.
Por supuesto, los programas son ineficientes, sirven como paliativos, pero su propósito final es convencer a los organismos internacionales de que los subsidios directos a la población marginada le elevaron el promedio de ingresos y la sacaron de los cajones de la pobreza extrema, pero eso no quiere decir que se hayan resuelto los problemas
La dádiva mensual se acaba cuando cambia el gobierno, sobre todo cuando cambia el partido en el gobierno y busca beneficiar a sus propias clientelas. La gente que deja de recibirlas queda de nuevo en la indefensión, colgada además de un modelo en que la única salida es el subsidio directo, porque a nadie se le ha ocurrido llevar programas de desarrollo sostenible a las áreas más afectadas.
Y luego está la realidad del resto: ¿cómo no va a haber pobreza, cuando el salario es ínfimo, cuando aun la gente que tiene empleo formal carece en su mayoría de un poder adquisitivo que le garantice los satisfactores básicos. Y de ahí viene la cascada: instituciones tan importantes para la población de escasos recursos, como el IMSS y el Infonavit, se sostienen con aportaciones que dependen directamente del salario. Si el salario está depauperado, también lo están las aportaciones de obreros y patrones, aunque para aquellos se traduzca en descuentos cada vez más excesivos, y para muchos de los segundos sean cargas muy pesadas de llevar.
A nadie en el gobierno ni en las academias de altos vuelos, le ha caído el veinte de que con salarios que compiten con los de Haití, la pobreza tiene que crecer, por fuerza.
Y por supuesto, con ello aumenta la clientela de los políticos considerados populistas.
TAMBIÉN AQUÍ LOS
MANDAN A DESCANSAR
Desde la clandestinidad de sus vacaciones, el gobernador Mario López Valdez mandó a los acelerados del 2016 que se tomen un receso en acatamiento a las disposiciones legales.
Aunque había sido el propio gobernador quien dio el banderazo de salida, los aspirantes no sólo se aceleraron, se revolucionaron en la lucha por la candidatura, y empezamos a ver en el estado acciones ya no se precampaña, sino de verdadera campaña electoral, cuando ni siquiera se ha emitido la convocatoria para renovar los poderes de la entidad.
El que respondió de inmediato, como corresponde, es Gerardo Vargas Landeros, quien admitió que como secretario general de gobierno debe dar el ejemplo de atención y de respeto a los ordenamientos del gobernador y los de las leyes correspondientes, de modo que no sólo de palabra, sino de obra, se lanzó a detener las acciones de su campaña del trébol.
Por supuesto que al momento de estar cubriendo con puntura las proclamas pintadas en bardas de todo el estado, Vargas Landeros rechazó que él hubiese sido el autor de esa campaña. No fueron instrucciones mías las que dieron origen a estas pintas, dijo, pero aducimos a borrarlas para que no se tome como un acto de rebeldía.
El funcionario, efectivamente, acudió personalmente y acompañado de su familia, a echarle brochazo a las pintas del trébol que además ostentaban sus iniciales –GVL-.
Es evidente que el aspirante panista Martín Heredia Lizárraga no va a responder de esa manera. Heredia tiene desplegadas docenas de anuncios espectaculares por todo el estado, en que aparecen su foto y una frase encomiando sus resultados como representante popular. También Heredia sostiene que no es él quien paga esos anuncios, ni los promueve tampoco, sino que se trata de una campaña de posicionamiento de la revista Región Informativa, de Guasave, cuyos editores se quieren posicionar en toda la entidad.
Heredia Lizárraga no va a hacer porque se suspenda esa promoción, como tampoco a a suspender el recorrido por el estado, las funciones de cine callejero ni otras acciones que está desarrollando para fijar su presencia en diversas regiones de la entidad. Tiene en este momento su cobertura como diputado federal y no la va a desperdiciar.
Además, le sirve también para marcar distancia del gobierno de Mario López Valdez, sobre todo porque algunos sectores, feligreses del sospechosismo, siguen sin convencerse de que se trata de un enfrentamiento real entre quienes fueran actores políticos tan cercanos.
A Heredia le conviene la separación para consumo de los panistas, y le conviene frente a los sectores inconformes con el gobierno malovista.
Héctor Melesio Cuen Ojeda por supuesto, seguirá con sus posicionamientos a través de declaraciones reiteradas sobre su aspiración, su incansable activismo como presidente del PAS y sus consideraciones como jefe de la fracción pasista en el congreso del Estado. Para él no aplica el llamado porque tiene muchas coberturas.
En todo caso habrá que esperar a que entren en operaciones los nuevos consejeros de lo que será el Instituto Estatal Electoral. Su protagonismo será la base para determinar si las coberturas de todos fueron suficientes.
Por cierto que Heriberto Galindo Quiñones tiene programado para agosto el último informe de actividades legislativas, pero lo tiene en bola, con todos los integrantes de la fracción que lidera, y de nuevo en Culiacán, de modo que haya justificación para uno de los llamados “eventos macro”.