*Despliega fuerzas el PAN en registro de candidatos
*Empiezan a aparecer armas secretas de Martín Pérez
*Terminó la temporada de registros; Camacho En el PH
FRANCISCO CHIQUETE
Martín Pérez Torres fue presentado en sociedad, como luego dicen. Es que lo llevó el PAN al octavo distrito, para saludar nomás, porque el registro ya estaba hecho en la capital del país. Como quiera, él estaba exultante, entusiasta ante los trescientos o poco más de militantes que agitaban banderas y gritaban porras.
El evento muestra además del entusiasmo, la composición del PAN. Con el candidato estaban el alcalde Carlos Felton González y su esposa, pero no muchos de los funcionarios, ni siquiera aquellos que más han destacado en la carrera partidista; el diputado federal Martín Heredia Lizárraga, identificado ahora como el sostén político de Pérez Torres; los dirigentes estatales y locales del partido y muchos cuadros.
Dice la canción que hay ausencias que triunfan. No se puede decir que la de Alejandro Higuera Osuna haya triunfado, pues ahí nadie lo mencionó, pero ya en el análisis se advierte que habiendo sido el primero de los impulsores de la carrera del candidato, no haya acudido a este primer evento público, sobre todo cuando se habla de divergencias, tan serias como pueden ser las divergencias de parte del hoy director de los Conaleps en Sinaloa.
Pero el evento no estaba para ausentes. El gusto de los asistentes se expresaba con gritos, con el zumbido de banderas agitadas, en gritos y aplausos cada vez que se nombraba a alguien. Muchos paras Martín Pérez, muchos para Carlos Felton, recibido por su grey con cariño, muchos también para Martín Heredia, de quien se nota que es el dueño de la plaza, o bien de las corrientes que asistieron al registro de la candidatura, que fue para eso que les convocaron.
Los asistentes llegaron poco a poco, llenando aurigas y más aurigas, que eran estacionadas por lo menos una cuadra antes de las oficinas del octavo distrito del INE, cuya cuadra fue cerrada a la circulación de vehículos. Más de trescientos asistentes que en efecto, pusieron el alma y el corazón en las manifestaciones de gusto y de cariño a su candidato.
Por cierto que Pérez Torres reveló en el breve discurso uno de los recursos con los que piensa atraer al ciudadano y generar simpatías: llegó ahí acompañado por la nomenclatura panista, pero también de los beisbolistas profesionales Juan José Pacho y Daniel Fernández, dos hombres que han sido ídolos en la ciudad y que hoy se convierten en estandartes partidistas.
Vaya usted a saber cuál será o haya sido la filiación política de ambos, pero hoy están ahí, al lado del dueño del equipo de béisbol en que trabajan: los Leones de Yucatán. Y es que el empresario Erick Arellano Hernández, suplente de Martín Pérez, ha dicho a diestra y siniestra que está dispuesto a meterle lo que sea necesario para alcanzar el triunfo. Ya empezó con el manejo de dos personajes de lujo, como Pacho y Fernández.
Los mítines del PAN fueron breves. Lo mismo en el sexto distrito, con Nadia Haydee Vega Oliva, que en el octavo, con Martín Pérez Torres, fue poco lo que tuvieron que esperar, pues las presentaciones ante los consejos distritales se realizaron sin mucho protocolo. La gente se fue contenta, esperanzada, aunque para quienes vinieron de Rosario, Escuinapa, en el caso del sexto, y de Walamo y Villa Unión, en el caso del octavo, todavía tenían un buen rato de traslado para llegar a sus respectivos hogares.
UN REGRESO MODESTO
PERO CON ESPERANZAS
Alejandro Camacho, otrora destacado militante de Acción Nacional, se adelantó dos horas al arribo de sus excompañeros. Acudió por supuesto a registrarse como candidato a diputado federal por el distrito octavo, ahora bajo las banderas del Partido Humanista, que acude a su primera elección.
Haremos, dijo, una campaña diferente a la que realizan los partidos tradicionales, sin derroche de recursos, sin insultar a una sociedad que carece hasta de lo más elemental, buscando una comunicación directa con los mazatlecos. Confió en que la sociedad recordará el desempeño que tuvo durante su paso por la Presidencia Municipal.
Camacho Mendoza entró al PAN en 1985 y al año siguiente ya fue candidato a presidente municipal. Aunque no ganó, fue regidor por la vía plurinominal y en 1988 fue candidato a diputado federal, con escasos resultados. En 1995 sin embargo, ganó la Presidencia Municipal, impulsado por los efectos de la crisis que generaron los llamados “errores de diciembre”.
Después de eso fue diputado local, coordinador de la bancada panista, y en la jauja de la docena blanquiazul federal, se desempeñó como delegado en Sinaloa de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
Pero cuando terminó esto, se encontró atrapado entre las corrientes de Felton y de Higuera, que no dejaron espacios para otros actores políticos en el PAN. Intentó ser dirigente del comité directivo municipal y la pinza dominadora lo dejó fuera de toda posibilidad, de modo que tomó una decisión amarga por lo que hace a sus querencias, luminosa porque le abre nuevas expectativas que ya no se le daban en su casa inicial.
SEMANA DE REGISTROS
El PRD registró en la semana a Ángel García Contreras por el octavo distrito, mientras Morena hizo lo propio con Maximiliano Ruiz, Encuentro Social a Patricia Escobar; el PAS a Giova Camacho como candidato independiente, el Panal a Anabel Pérez Luna y la alianza PRI Verde a Quirino Ordaz, en la ciudad de México.
Por supuesto, hay partidos que van por la diputación, y los hay que van por reafirmar su presencia, por proyectarse al futuro y hasta por la sobrevivencia, ya que su registro depende de que alcancen o no el tres por ciento de la votación nacional, una tarea muy difícil, sobre todo en estados como el nuestro, donde los electores están tan polarizados.
Sin duda, PAN y PRI serán protagonistas de la contienda. En ambos partidos hay intención de los grupos y corrientes internas para hacer frentes únicos. ¿Hasta dónde lo conseguirán? En buena medida de eso dependerá que sus posibilidades de triunfo se concreten.
En las elecciones presidenciales anteriores, el octavo distrito ha sido muy generoso con el PRD, aunque eso fue en tiempos de Andrés Manuel López Obrador como candidato, sin que esas simpatías se transfiriesen a los aspirantes a diputados federales. Hoy el partido del sol azteca enfrenta una fuerte división y es muy posible que Morena le supere y conquiste el liderazgo electoral de la izquierda.