*La gran amenaza que son los policías
*Se apuntaron los diputados del PAS
*Los otros partidos, en la dulce espera
FRANCISCO CHIQUETE
Buena decisión tomó la Procuraduría General de Justicia del Estado al consignar al agente que en un acto de incapacidad para manejar adecuadamente las armas, asesinó a un pequeño que estaba dentro de su casa. Es cierto que la PGJE no tenía de otra, pero ha habido casos en que no lo hace, a pesar de las evidencias, o por lo menos no lo hace oportunamente,
Este es uno más de los varios casos ocurridos en que los agentes policíacos muestran que no están preparados para el cargo. Ni física ni sicológicamente, lo que los convierte en verdaderos peligros para la sociedad. Y lo peor en que en alguna ocasión hay impunidad, aunque sea de manera relativa.
Anoche, durante la entrevista del subprocurador general Martín Armenta con el programa Guardianes de la Noche, su narración de los hechos parecía encaminada a decir que no había delito qué perseguir, sin dejar de lamentar la muerte del menos en todo momento. Al final terminó reconociendo la gravedad de los acontecimientos, la responsabilidad del agente y lo preocupante de este y otros casos, aunque siempre estableciendo que se trata de unos cuantos policías, definitivamente los menos, algo que no estaba a discusión.
En principio el agente dijo que al brincar una barda, en persecución de un presunto delincuente, se le disparó accidentalmente la pistola. el propio subprocurador reconoció que esa situación no había sido acreditada.
Luego recordó la versión de que hubo disparos en contra y el agente sacó la pistola para defenderse, lo que motivó el tiro que le costó la vida al pequeño. La propia madre del niño dijo que se topó con el perseguido y que le vio en las manos algo así como una pistola, aunque hasta el momento no se ha encontrado ni el arma ni el casquillo supuestamente percutido, lo que descalifica esa versión.
Lo que parece a fin de cuentas es que el policía se volvió loco con la adrenalina y quizá para amedrentar al delincuente hizo un disparo sin ver hacia dónde iba y fue a atravesar una puerta de madera, detrás de la cual estaba el niño. Fue un hecho fortuito, pero derivado de una falta de capacidad para manejar los hechos.
El gente está consignado ante el Ministerio Público, pero eso es apenas el principio. Ha habido casos en que también se consigna, pero los resultados no son satisfactorios.
Ocurrió en Bamoa, cuando una patrulla de la ministerial detuvo un vehículo contra el que abrió fuego, supuestamente porque les pareció sospechoso o lo relacionaron con otro de características similares que tenía un reporte. El problema fue que en el coche no iban delincuentes, sino niños deportistas a cargo de una señora que no entendía el porqué de la agresión.
Uno de los chamacos quedó inválido, con secuelas por daños en los dos pulmones, en el páncreas y por supuesto, en la columna vertebral.
Los agentes involucrados fueron consignados,. De ellos sólo dos fueron sometidos a juicio, aunque hasta el momento ninguno de ellos ha pisado la cárcel porque, pese a la gravedad del caso, se consideró que podían enfrentar el juicio en libertad, aunque eso sí, no están trabajando, al ,menos no en la corporación.
Pero hay otros casos más comunes en los que agentes policíacos han demostrado que son una amenaza para la sociedad.
Hace un mes, los ministeriales perseguían a un presunto delincuente. En realidad se trataba de un agente de la Policía Preventiva Municipal de Culiacán (¿y dónde quedó la diferencia?). Borracho, el agente se enfrentó a balazos con sus perseguidores, que por supuesto también hicieron fuego y en la refriega mataron a una anciana que tuvo la mala suerte de quedar en medio. De los tres indiciados, dos están ya en libertad.
Un poco antes, en la cabecera municipal de Concordia, un agente de la Policía Ministerial decidió en mala hora hacer turismo durante sus vacaciones. Vaya usted a saber en qué andaba, que de El Fuerte, donde estaba asignado, fue a dar a Concordia y sin importar su condición de vacacionista, fue a dar por la noche a la base de la Ministerial en esa ciudad.
En eso llegó un policía municipal en su motocicleta, acompañado. El Ministerial se propasó molestando a la muchacha, pero el que se molestó fue el municipal. Se enfrentaron y el ministerial sacó la pistola, que traía a pesar de estar de vacaciones, y mató a su eventual rival en amores. Se dio a la fuga, pero fue interceptado en Villa Unión, de donde lo mandaron al Cecjude. Una semana después amaneció muerto, con el dictamen de suicidio. Dicen que ahí, efectivamente, hay gente comedida que muy solícitamente ayuda a quienes toman esa fatal decisión.
Estos son apenas unos cuantos ejemplos. Hay varios más en que agentes en activo son detenidos asaltando o en otros delitos. No se diga exagentes, y sobre todo exagentes recientes.
Luego entonces no es casual que haya insistentes acusaciones de que en las corporaciones policíacas el problema sigue siendo el mismo de siempre, a pesar de las enormes inversiones en capacitación y equipamiento, que por lo visto no han dado los resultados esperados. Y si en las policías perviven los problemas, en la sociedad se mantienen el temor y la desconfianza.
LOS APUNTADOS
Antes que ninguna otra fracción, los integrantes del PAS que serán diputados locales fueron, entregaron sus documentos y se apuntaron para la integración de la próxima legislatura. Es un paso burocrático, normal para los partidos políticos tradicionales, pero de gran significación para una organización nueva, que incursionó por primera vez y que tuvo resultados sorprendentes, Sorprendentes hasta para ellos mismos.
Ya pasada la calentura de que podían llegar a ser cuatro diputados, resignados a que la cuarta cuRul se les quedó a ocho votos de diferencia (y no suyos, sino del PRI en el distrito XX), los pasistas no quisieron seguirse imaginando dentro del Congreso y fueron a presentarse, apuntarse y de una vez, metafóricamente, solicitar sus credenciales.
Por supuesto, el grupo fue encabezado por Héctor Melesio Cuen Ojeda, quien por supuesto, habló en nombre de todos y reiteró los compromisos que había ya adelantado sobre la disposición para que la fracción pasista sea portavoz de la sociedad, para analizar a fondo cada iniciativa, para no ser tapadera de nadie ni negociar a espaldas de la gente.
Héctor Melesio Cuen Ojeda, Rosario Sánchez Zataráin y Roberspierre Lizárraga, que participaron en ese orden en la lista de plurinominales, ya sólo tienen que esperar de aquí al inicio del mes de noviembre, en que empezarán los trabajos de la organización de la próxima legislatura, en que ellos podrían llegar a ser parte importante, dependiendo de cómo asuman su capacidad para confirmar y conformar mayorías calificadas (aunque les faltó esa cuarta posición para sentarse con el PRI al tú por tú, en un caso de esa naturaleza).
Emocionado, Héctor Melesio Cuen dijo que “son los primeros diputados que tiene el partido sinaloense en su historia y esto tiene como consecuencia de que tengamos una gran responsabilidad, puesto que la gente confió en nosotros, nos dio su apoyo, nos dio su voto y hoy más que nunca vamos a luchar para que aquí se aprueben iniciativas, se hagan reformas de beneficio para la ciudadanía.”
LOS DEMÁS, EN
LA DULCE ESPERA
Las otras fracciones están en la dulce espera. No por embarazo, aunque ya conocemos el producto que v an a dar a luz, sino porque no ha funcionado formalmente el dedo que ungirá a los respectivos coordinadores, En el PAS, por supuesto, la decisión ya se tomó y hubo una autodesignación que nadie osará discutir.
La semana pasada comentábamos aquí la línea adelantada del delegado del CEN poriísta en Sinaloa, Armando López Nogales, diciendo que los diputados electos van a elegir, aunque una de las cartas fuertes es Jesús Enrique Hernández Chávez, para decepción de Ramón Barajas, quien ha tratado de hacer consenso entre los diputados del norte de la entidad.
En el Partido Acción Nacional todavía no saben qué va a pasar. Si la designación vendrá directamente del comité ejecutivo nacional, donde supuestamente tienen mucho interés en que no haya manos metidas del gobierno de Mario López Valdez. O si ganará una corriente local que contemporice con el tercer piso, que sigue teniendo no sólo espacios de diálogo, sino preeminencia política antes grupos y corrientes importantes.
El Partido de la Revolución Democrática no tiene mucha prisa. Para dos diputados, que además no tienen mucho en común, y que además están dentro de la corriente malovista, no hay mucho qué alegar.
Por cierto que el PRD finalmente enfrentó el asunto de su relación con el gobierno de Mario López Valdez, Aquí les comentamos que se habían dado un mes para decidir si seguían siendo parte de
este régimen o si rompías, Pues ya tomaron una decisión. Y la decisión fue, asómbrese, un nuevo
plazo para determinar qué harán. No es nada malo como táctica. Total, entre plazo y plazo pueden llegar al 2016 y entonces se acabó el problema. En realidad ahí no hay condiciones para que prospere un rompimiento, ni siquiera teórico, como el del PAN, pero los dirigentes no le quieren quedar mal a Edgardo Burgos y a la dirigencia formal del PAN, por si hay chance de hacer otra coalición más adelante, aunque les vaya como les vaya.