*Mazatlán sí está en el PND, aunque no se vea
*El PRD reclama incongruencia de Carlos Felton
*La polémica del desayuno entre Martha y JALS
FRANCISCO CHIQUETE
El puerto de Mazatlán tiene hoy una justificación histórica sin precedente para atraer inversión pública. Y sin embargo, no aparece como si aparecen otros puertos que se supone son de menor importancia al menos en la coyuntura. En dos ocasiones ha tenido que salir al quite el gobernador para decir que sí, que forma parte del Plan Nacional de Desarrollo y que tiene garantizados los proyectos de modernización que se le exigen para constituirse en puerta de acceso al Corredor Económico del Norte.
En los años ochenta, cuando Miguel de la Madrid gobernaba al país o administraba la quiebra financiera del país, Manzanillo surgió como el gran puerto del Pacífico, desplazando a Mazatlán (De la Madrid era originario del estado de Colima, y por tanto interesado en el desarrollo de su puerto. Encima, por esos tiempos vino a gobernar al estado Francisco Labastida Ochoa, quien igualmente pagó su cuota de paisanaje con un rescate casi antinatural del puerto de Topolobampo, al que puso en el mapa nacional.
En los albores de este siglo, Juan Sigfrido Millán Lizárraga consiguió que un mayor número de gobernadores convocados a Los Pinos para definir la obra de infraestructura con mayor impacto regional, votara por el hasta entonces desconocido proyecto de construir una carretera que modernizara el paso de la Sierra Madre Occidental, con un cruce transversal a la República. Vicnte Fox quedó convencido y lanzó el proyecto, aunque los recursos salieron a cuentagotas durante su sexenio, el de Felipe Calderón y el primer año de Enrique Peña Nieto, a quien le tocó terminarlo.
Nació entonces la idea de un puerto de gran calado, con instalaciones modernas que atrajese a la grandes cargas destinadas a la costa este de los Estados Unidos, sin que debieran pasar por el canal de Panamá.
No es sólo la carga por supuesto. Detrás, se espera, vendrán los inversionistas a hacer negocios, a invertir en pabellones industriales, en la producción de nuevos artículos acabados con los materiales traídos del oriente e introducidos al mercado estadunidense para aprovechar el tratado de libre comercio México-Estados Unidos-Canadá.
Al fin que sólo se requieren para ello cinco mil millones de pesos.
Pero resulta que en la presentación del Plan Nacional de Desarrollo, este ambicioso proyecto no apareció a simple vista. El gobernador Mario López Valdez debió acudir al rescate, detallando las partes del proyecto que estaban consideradas.
Para el 2013 no hubo presupuesto asignado de modo que otra vez el gobernador tuvo que intervenir y conseguir dinero para la profundización del canal de navegación. Este 2014 tampoco hubo dinero presupuestado, pero había quedado un remanente de los 200 millones del año previo. Se entiende que con tan escasas cifras, no hayamos sido incluidos en el segundo informe de gobierno.
Tampoco se podía esperar mucho: el 7 de junio del año pasado vino el presidente, le pidieron que conociese el proyecto del puerto y dejó al secretario de Comunicaciones y Transportes, para que se lo expusieran en una reunión que se desarrollaría en el Centro de Convenciones, pero la reunión se trasladó a los rústicos salones del Cuchupetas.
Tampoco es olvido. Es simplemente que para el nuevo puerto de Mazatlán se piensa esperar a que caiga una sociedad inversionista que se interese en el proyecto y traiga el dinero, sin que la federación deba desembolsar. No faltarán partidas relativamente menores, pero en tanto no haya un consorcio chino o coreano que se interés por nosotros, seguiremos como Penélope en su banco de andén.
EL PRD RECLAMA A FELTON
POR “INCONGRUENCIA”
El dirigente estatal del PRD, Heriberto Arias Suárez, admite que el alcalde Carlos Felton González tiene legalmente el derecho de retirar y suplir al perredista Ángel García en la dirección de Ecología Municipal, pero reclama incongruencia de parte del munícipe, pues hubo un acuerdo político que llevó al PRD a sumarse a la campaña del Partido Acción Nacional y finalmente a ganar la elección.
Arias Suárez no entra en detalles sobre el episodio. Simplemente advierte que al PRD no le gusta lo que ocurrió, es decir, cierra la posibilidad de que el munícipe hubiese consultado, avisado, procesado de algún modo el paso que dio. Aunque el propio PRD había mantenido una actitud hosca hacia el alcalde, lo que ocurre en la práctica es una ruptura, probablemente definitiva.
En todo caso habría que recordar que las últimas alcaldías que ha ganado el PAN las ha logrado con márgenes de cinco mil votos de ventaja, y siempre en asociación política con el PRD. Por más débil que sea ese partido, su piso electoral sí debe andar por los siete mil votos, lo que da una idea de la importancia que ha revestido su participación en las coaliciones del 2010 y del 2013.
Por cierto el despido de Ángel García, explicado ayer por la secretaria del ayuntamiento como una renuncia voluntaria, motivó reacciones, y fuertes, en las filas del propio Partido Acción Nacional, donde se fortalecieron las fobias que arrastran las corrientes internas.
CÉSAR CAMACHO Y LOS
PLEITOS ENTRE PRIÍSTAS
Esta tarde, cuando César Camacho Quiroz tome protesta a los nuevos dirigentes de las estructuras priístas en los municipios de Sinaloa, quedarán borrados los enfrentamientos, los disgustos que han marcado la relación entre diversos grupos y sus dirigentes, aunque en realidad ha sido en Mazatlán donde este asunto ha escalado.
Para la presidenta del PRI estatal, Martha Tamayo Morales, no pasa nada. Lo único que ocurre es que el delegado de la Semarnat y su gente no han querido participar en la actividad política, porque no han querido pagar el desayuno al que deberían sentarse a procesar su participación den las actividades partidistas.
Conocedora de lo que dice, Tamayo Morales lanzó un puyazo que duele, pues por un lado sostiene que son ellos mismos quienes se han marginado, y por una razón elemental, mezquina, como es el ahorro de un desayuno, haciéndose eco de las proverbiales cualidades ahorrativas del jefe político del grupo.
Ante un golpe tan juguetón y tan contundente, Jorge Abel sólo respondió que nunca los han convocado a un desayuno político, mientras uno de sus seguidores ofreció cubrirlo completo, nomás que les pongan hora y fecha. Parece cotorreo, nimiedad, pero los agarres están fuertes y a la orden del día.