*A cuatro meses del asesinato de Cuen Ojeda, hay más preguntas que respuestas
*La FGR atrajo el caso, descubrió que la Fiscalía estatal intentó desviar la investigación y que a Cuen lo asesinaron en el mismo lugar de donde “secuestraron” al Mayo
*Más de 500 desaparecidos, 438 asesinatos, más de mil vehículos despojados, casas incendiadas, balaceadas y el temor que no se va en esta guerra sin fin
*Disparan con arma de fuego contra una vivienda en Mazatlán. No se reportaron lesionados
*Pareciera que el titular de Seguridad en Sinaloa asume poses de Poncio Pilatos. Dice que tomen sus precauciones de seguridad al salir de sus casas
*Aniversario de la Armada de México, evento que encabezaron los altos mandos de Marina y de el Ejercito con la ausencia del Gobernador y la alcaldesa
*Murió Pil Tostado, un personaje entrañable en Mazatlán. Fue alcalde del puerto y un servidor público como pocos
¿Quién asesinó a Cuen y por qué?. Este lunes se cumplen cuatro meses del asesinato de Héctor Melesio Cuen Ojeda. El exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, exfundador y líder del Partido Sinaloense, exalcalde de Culiacán, exdiputado local y diputado federal electo en el momento de su asesinato, fue ultimado el 25 de julio pasado. Su muerte aún está rodeada de un halo que por donde se le quiera ver, despide algo putrefacto. Lo poco que se conoce de la forma en que Cuen Ojeda fue asesinado es lo informado por la Fiscalía General de la Republica. Y quien curiosamente marcó la pauta para que se conociera el lugar en donde fue asesinado fue Ismael Zambada quien ese mismo día fue “secuestrado” y obligado a viajar a los Estados Unidos en donde fue detenido y permanece hasta hoy encarcelado.
Cuen Ojeda fue convocado a una reunión en Huertos del Pedregal. A ese encuentro acudiría el Gobernador Rubén Rocha Moya. Estarían presentes Ismael Zambada y algunos miembros de “Los Chapitos”. Iván Archivaldo Guzmán o alguno de los demás miembros. El motivo de ese encuentro, de acuerdo a lo divulgado por Zambada, era para encontrar un camino que permitiera terminar con la disputa entre Cuen Ojeda y Rocha Moya por el control de la Universidad Autónoma de Sinaloa. De los asistentes dos se trasladaron a Estados Unidos, Zambada de manera forzada y Joaquín Guzmán López que se dice fue quien lo “secuestro”. Otro de los que acudieron fue Cuen Ojeda, que resultó asesinado. Y el cuarto que sería Rocha Moya afirma que él no asistió a esa reunión. Es más, que ni fue enterado. Y se enredó en su explicación que dio de su presunto viaje a Los Ángeles ese mismo día, sin evitar salpicar en sus argumentos de defensa al empresario Jesús Vizcarra, de quien dijo que le prestó uno de sus aviones para realizar el viaje.
Y si el entramado del asesinato de Cuen Ojeda ya en el escenario de esa supuesta reunión era complejo, la intervención del Estado a través de la Fiscalía Estatal vino a exhibir un intento de ocultar la verdad. La Fiscalía sinaloense como es sabido creo la versión de que Cuen Ojeda fue asaltado en una gasolinera y en ese acto recibió impactos de bala. La falaz narrativa llegó al extremo de inventar que Cuen Ojeda llegó aún con vida a la Clínica Cemsi y que ahí finalmente murió. Lo que la FGR descubrió fue que Cuen Ojeda fue asesinado en Huertos del Pedregal, donde se encontraron rastros de su sangre. Y que la hora de su muerte no coincidía con la que se dio a conocer en la Clínica Cemsi. “Alguien” ordenó que el cuerpo de Cuen Ojeda fuera incinerado, a sabiendas de que no se habían cubiertos los protocolos de los forenses.
En medio de este escándalo, la Fiscal General de Sinaloa Sara Bruna Quiñonez “renunció” al cargo. Su paradero es hoy una incógnita. Menos se sabe si aparece como “indiciada” en la carpeta de investigación que tiene en sus manos la FGR. De las graves irregularidades que se cometieron durante y después del homicidio de Cuen Ojeda por parte de la Fiscalía estatal, nadie que se sepa ha sido acusado y mucho menos aprehendido. La Fiscalía General de la Republica apenas tomó el caso en sus manos dio a conocer avances significativos. Pero de repente callaron.
Hay muchas interrogantes en torno al asesinato de Héctor Melesio Cuen Ojeda. ¿Dónde está Fausto Corrales?. El joven que condujo la camioneta con el cuerpo de Cuen Ojeda a la Clínica Cemsi. ¿Cómo fueron aparar a esa camioneta las huellas de sangre de Rodolfo Chaidez Mendoza?. Este señor fue identificado como uno de los escoltas de Zambada. ¿Quién o quienes asesinaron a Cuen Ojeda?. ¿Quién o quienes se beneficiaban con su asesinato?. Las interrogantes están en la cancha de la FGR. Y lo que digan sin duda servirá para dar luz al esclarecimiento de este crimen.
La guerra que nadie frena. De acuerdo a cifras de la Comisión Estatal de Búsqueda, con datos de la Fiscalía General y por lo menos cuatro colectivos, en dos meses de conflicto armado en Sinaloa contabilizan más de 500 desapariciones. Los informes precisan que el mayor numero de casos se registra en Culiacán con 271, Mazatlán con 117, Navolato 29, El Dorado con 28 y Elota con 18.
El tema de los desaparecidos en esta cruenta guerra que se sigue librando, es conmovedor. Porque no solo son los desaparecidos, habría que sumarles los familiares y amigos cercanos. Miles de familias sinaloenses se encuentran en estos momentos en medio del dolor que significa el no saber nada de sus seres queridos que fueron “levantados” por grupos armados. El reclamo en medio de ese sufrimiento, es la exigencia para las autoridades de que se aboquen a encontrar a los desaparecidos. Si el fracaso del Gobierno en resolver el grave problema de violencia que vivimos es evidente, el tema de los desaparecidos es de una magnitud que pocos logran imaginarse. En esta guerra interminable se tiene un registro de 438 homicidios, entre ellos ocho elementos de la policía. De igual forma hay por lo menos cuatro agentes de seguridad desaparecidos.
Disparan contra vivienda en Mazatlán. Poco antes de las seis de la mañana de ayer sábado, los disparos de arma de fuego alertaron a vecinos de la populosa colonia Benito Juárez en Mazatlán. Sujetos armados a bordo de una motocicleta abrieron fuego contra una vivienda ubicada por la calle Aguilar Barraza entre Novena y Privada del Vigía.
Los vecinos alertaron a las autoridades que de inmediato se movilizaron hacia esa zona. Por fortuna no hubo desgracias que lamentar. Pero el hecho abona al temor de la población.
El Poncio Pilatos de Sinaloa. Para muchos indignó. Para otros les provocó mayores interrogantes. Y es que el Secretario de Seguridad Publica en Sinaloa Gerardo Mérida Sánchez recomendó a los ciudadanos que “al momento de salir del hogar, debemos de salir con nuestras propias medidas de seguridad”. A que realmente se refiere el Secretario.
De si salimos de casa es a cuenta y riesgo de nosotros mismos. O que sepamos por donde transitar para no exponerse. O que los ciudadanos pueden portar armas para su propia defensa. El argumento de Mérida Sánchez pareciera un intento de “lavarse” las manos.. Tiene mucha razón Sergio Torres diputado local y líder de MC en Sinaloa, el Secretario de seguridad no está a la altura de lo que se requiere en estos momentos en el estado.
No acudió el Gobernador. Ayer se conmemoró el día de la “Armada Nacional”. El acto se llevó a cabo en las instalaciones de la Octava Región Naval con sede en Mazatlán con la ausencia del Gobernador Rubén Rocha Moya e incluso de la alcaldesa Estrella Palacios. A la ceremonia acudieron representantes de ambos, Flor Emilia Guerra, Secretaria de Pesca y Moisés Ríos, Secretario del Ayuntamiento.
El acto estuvo presidido por el Comandante de la Octava Región Naval el Vicealmirante José Daniel Reséndiz acompañado por el Comandante de la tercera Región Militar General Guillermo Briseño. Ambos acompañados de sus principales colaboradores en Marina y el Ejercito.
Se nos fue El Pil. José Luis Tostado, más conocido como “El Pil” exalcalde de Mazatlán, falleció ayer. Las complicaciones en su salud lo postraron en cama en las ultimas se semanas. Una excelente persona. Un servidor publico de primera. Recuerdo una anécdota que me compartió siendo él Presidente Municipal de Mazatlán. Le pregunté porqué no trabajaba por las tardes y noches en Palacio. Su respuesta fue categórica: “Mira esta chamba es pasajera. Termina el periodo de alcalde y te vas.
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