*Este es el Sinaloa que nos deja y que hoy visita AMLO
*Un estado inmerso en la violencia, con balaceras, narcobloqueos, asesinatos, levantones y la tranquilidad perdida de cientos de sinaloenses
*Enfrentamientos violentos entre grupos armados en la zona de Concordia arroja de saldo 11 muertos, un lesionado y el bloqueo de la autopista Mazatlán-Durango
*En Mazatlán se desata la sicosis por los reportes de levantados y el ocultamiento de las cifras reales de parte del Gobierno
*Por fortuna hoy inicia el “puente escolar”, por el viernes de reuniones técnicas de maestros
*La próxima alcaldesa de Mazatlán recibirá una “papa caliente”
Este es el Sinaloa que deja Presidente. El estado se convulsiona por esta “guerra”. A 19 días de iniciada la lucha entre “chapitos” y “mayos”, los enfrentamientos violentos se siguen sucediendo, el bloqueo de carreteras también con el incendio de vehículos incluidos. Esta sangrienta lucha ha costado vidas, ha provocado daños económicos por más de tres mil millones de pesos, pero, sobre todo, ha robado la tranquilidad de miles de familias sinaloenses. Dañado la educación de nuestros hijos, la perdida de empleos, el cierre de empresas. Y todavía no se ve un fin de esta “guerra”.
Pero señor Presidente ahora que está nuevamente de visita en Sinaloa, es menester comunicarle que las fuerzas armadas desplazadas con toda atingencia por usted, están cumpliendo con sus ordenes expresas. Están los militares y la Guardia Nacional para “evitar confrontaciones y cuidar a la población”. Bien atinadamente lo dijo el General Francisco Jesús Leana Ojeda, Comandante de la Tercera Región Militar en Sinaloa, la violencia concluirá cuando los criminales dejen de pelear.
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Mejor interpretación de su posición señor Presidente no pudo tener el General. Los ejemplos de esta política, su política de seguridad, ya se habían visto en Michoacán, en donde el Ejercito ha sido un simple espectador de la violencia y dejó que los grupos armados se mataran entre ellos. Lo mismo sucede en estos momentos en Chiapas. Eso mismo se está aplicando en Sinaloa. Nada más señor Presidente, el Cartel de Sinaloa no es como cualquier otro.
Aquí ellos han mandado y hoy demuestran que efectivamente ellos mandan. Sus balaceras provocan el cierre de escuelas y suspensión de clases. El Gobierno del Estado es un punto a la izquierda. Son como “los maderos de San Juan…) piden paz y no les…hacen caso. Carecen de credibilidad. Y los militares que envió a Sinaloa “para evitar confrontaciones”, los acaban de acusar de estar atrás de los “levantones”. Este grave problema de la desaparición de personas (sabemos que el tema no le gusta y además le molesta), es una de las vertientes de esta guerra que inyecta un miedo especial a las familias sinaloenses.
Desde antes del 9 de septiembre, cuando se desató la guerra en que vivimos, se había anunciado su visita al sur de Sinaloa, particularmente a El Rosario. Hubo momentos en que pensamos que esa visita se cancelaría, dado el problema de inseguridad que se vive en estos momentos. Se pensó que habría un rasgo de prudencia de su parte. Craso error, no fue así. Hoy estará exponiéndose usted y quienes lo acompañan. Y lo más delicado, estará la Presidenta electa Claudia Sheinbaum. ¿Se imagina si algo les llegara a suceder?. Ni pensarlo.
Habrá que pedir que como dijo el General Leana Ojeda, sean los delincuentes quienes decidan acabar con esta disputa sangrienta. Que tomen conciencia. Que como dijo el Gobernador Rubén Rocha Moya “pidan porque concluya con vida” su mandato de Gobernador. Que alguien le avise a López Obrador. Que su petición del pasado 13 de septiembre a los narcotraficantes para que cesaran las agresiones y su afirmación de “sé que me escuchan”, pues lamentamos decirle que no es así. Esta vez no le hicieron caso. Vea como está Sinaloa. Vea como lo deja a cinco días de que termine su sexenio.
Se recrudece la violencia. 10 personas asesinadas que pudieran ser más. Dos lesionados que fueron trasladados para atención médica a hospitales de Mazatlán, con uno que murió posteriormente. Y la sicosis que se ha desatado en el puerto con los reportes de “levantones” cometidos por civiles armados que operan a plena luz de día, han terminado con la relativa tranquilidad que se ha tenido en la zona sur de Sinaloa. Por la mañana de ayer se conoció que en las comunidades del municipio de Concordia por la comunidad de Loberas grupos armados se enfrentaron.
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Desde la noche del miércoles hasta la madrugada de ayer jueves, las ráfagas de toda clase de armas se escucharon por todos los rubos. El alcalde de Concordia Raúl Díaz confirmó el enfrentamiento. También que en la comunidad de Loberas se encontraron siete cuerpos. Pero las cosas no quedaron ahí. La violencia llegó hasta la autopista Mazatlán-Durango. En el túnel “El Sinaloense” se reportó un bloqueo y se encontraron dos cuerpos de civiles con impactos de balas. Horas después se confirmó que en otro túnel ya más cerca de la caseta de “Coscomate” se presentó otro bloqueo de la autopista. Ahora con e incendio de por lo menos un tráiler.
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El tema de los “levantones” se ha convertido en temor en Mazatlán que crece como bola de nieve. Y por más que las autoridades oculten información, maquillen cifras, minimicen la gravedad de los hechos, las redes sociales los están obligando a aceptar la realidad. Se habla de alrededor de 12 “levantones” en los últimos días. Pero también de 18 y hasta una cifra de 28. No se sabe realmente. Pero aún y todos esos intentos de ocultar la realidad, las redes comenzaron a dar a conocer con fotos de los desaparecidos, el llamado de sus familias y amigos por que aparezcan vivos. Ya se dio un cierre de vialidades en Mazatlán, exigiendo al gobierno respuestas. La Fiscalía del Estado, así como las policías municipales y estatales, se han dedicado solamente a tomar nota y recibir denuncias de los desaparecidos. No hay respuestas. No hay acciones que se vean y que muestren e interés o la voluntad de las autoridades estatales y municipales de dar con el paradero de decenas de personas que han desaparecido en esta cruenta guerra.
La lumbre aquí esta. Los reportes de civiles armados circulando por las calles y avenidas de Mazatlán, unos ciertos otros falsos, están contribuyendo a una sicosis colectiva. Por la mañana se dio a conocer que un joven de la Preparatoria Rubén Jaramillo había sido “levantado”. También que un agente de la policía municipal estaba desaparecido. Se había dicho que eran dos policías los desaparecidos.
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