En el blanco por Fernando Zepeda H.

0
387

*Se recrudece la violencia en Culiacán y municipios vecinos. El Estado es rebasado y la federación responde con más militarización
*Todo parece indicar que la “guerra” entre las dos facciones del Cartel de Sinaloa ya se declaró
*El Gobernador habría asegurado que ya estaba controlada la situación. No le creyeron. Se suspendió el transporte, hubo cierre de comercios, se suspendieron clases
*Rocha Moya asegura que hay medios de comunicación que “exageran” los hechos violentos. Basta y sobra ver videos y testimonios para ver la magnitud
*Los hechos violentos de ayer en la capital del estado se dieron justo en el día que se programó la segunda audiencia de Zambada. ¿Coincidencia?
*Como si el recrudecimiento de la violencia en Sinaloa fuera poca cosa, el Congreso del Estado se lanzará a provocar otro enfrentamiento. Ahora contra la UAS
*Feliciano Castro sería quien convenció al Gobernador de lanzar su encuesta para reformar la Ley Orgánica de la UAS, sin importarle lo que pase con el mandatario
*Ayer por la tarde-noche corrió la versión de que el Gobierno “dobló” a uno de los 43 senadores de oposición para aprobar la reforma judicial. Sería Miguel Ángel Yunes contra quien apenas en julio se había expedido orden de aprehensión

Estado rebasado. Federación al rescate. El Gobernador Rubén Rocha Moya está contra la pared. La nueva jornada violenta que se vivió ayer en Culiacán, evidenció que el Estado ha sido rebasado y que la Federación es la vía para intentar imponer tranquilidad. En medio de una transición con un Presidente que se va y la nueva Presidenta que viene, políticamente el Gobernador queda en una situación de fragilidad. López Obrador ya se va y difícilmente podrá seguir apoyando como hasta hoy a Rocha Moya. Claudia Sheinbaum viene y podría decidir no “cargar” con causas ajenas. En los tiempos del PRI, la solución que se daba (y hay varios ejemplos) es que el Gobernador “se enfermaba” y solicitaba su retiro. Pero hoy en tiempos de la 4T la palabra del Presidente es Ley. Exonera de culpas a quien él quiere. Lo coloca a salvo. Pero ya se va.

Ahora el problema de Sinaloa y el tema de Rocha Moya pasará a la cancha de Sheinbaum. Ayer tras conocerse los hechos violentos en la capital de Sinaloa, en la “mañanera” el Presidente tuvo que reconocer que no tenía información de lo que había pasado y estaba ocurriendo aún en el estado. ¿Falta de comunicación?. No sabemos. Pero el hombre mejor informado del país (como él mismo lo ha dicho) no tenía la información de lo que pasaba en Culiacán. Y hasta llegó a pedir: “Ojalá y no se presente otro culiacanazo”.

Lo de ayer en Culiacán y municipios vecinos comenzó con enfrentamientos a balazos entre civiles. Luego apareció el ejército y fueron tres las facciones dentro de la pelea. Y es que los grupos criminales tal parece se han declarado ahora sí, la guerra. Tras el “secuestro” de Ismael Zambada que apareció junto con Joaquín Guzmán López en Estados Unidos el pasado 25 de julio, los asesinatos y balaceras en la capital del estado y municipios vecinos se han multiplicado. En los primeros momentos de las balaceras, el Estado no sabía con claridad lo que estaba sucediendo y no precisaba las zonas de conflicto.

Las fuerzas federales fueron las que intervinieron. Dos militares fueron alcanzados por las balas. Uno de ellos murió horas después. Dos civiles resultaron muertos. Uno de ellos con “pechera” y equipo táctico. Decenas de vehículos con impactos de balas fueron abandonados. Se habla de algunos de ellos blindados. El “agarrón” entre civiles se interrumpió por la aparición de las militares. Pero el riesgo de más enfrentamientos está latente.

Exageran dice Rocha. El Gobernador declaró ayer que “algunos” medios de comunicación exageran. Refiriéndose a la jornada violenta de ayer en el centro de Sinaloa. Y que eso lo aprovechan sus adversarios en redes sociales. Lo cierto es que los enfrentamientos violentos ayer temprano y el rugir de la metralla en Culiacán sembró el temor entre la ciudadanía. Los padres no llevaron a sus hijos a clases. Muchos comercios no abrieron y otros cerraron.

La Universidad Autónoma de Sinaloa de manera responsable ordenó cancelar las clases. Horas después la Secretaría de Educación Publica y Cultura emitió un comunicado donde suspendía clases “en la zona” donde se suscitaron los hechos violentos. Alguien debe de avisarle al Gobernador que los medios no tienen culpa de lo que está sucediendo en estos momentos en Culiacán y municipios vecinos. Los videos de la violencia ahí están. Los testimonios igual. Que en redes sociales hay quienes aprovechan y abusan de ellas, eso desde siempre ha sucedido.

Lo cierto es que desde el Gobierno estatal el manejo de estas crisis, desde los sucesos del pasado 25 de julio, con la aparición de Ismael Zambada y Joaquín Guzmán López en Estados Unidos. Y el asesinato del diputado federal electo Melesio Cuen Ojeda, ha ido de error tras error. Ya deberían de haber aprendido con todo lo que ha pasado y ojo, puede seguir pasando cada vez más fuerte.

¿Coincidencia?. Precisamente ayer lunes 9 de septiembre se había fijado la fecha para que Ismael Zambada tuviera su segunda audiencia en tribunales de Estados Unidos. Casualmente esa misma fecha es cuando se dan los enfrentamientos violentos en la zona centro de Sinaloa. Ahora no entre civiles y militares. Ahora fue entre civiles. Los militares llegaron después a sumarse a la refriega. En el mundo en que se mueven los hilos del crimen organizado, nada es casual. Y muchos esperan la siguiente información que genere Zambada. La primera que fue una simple carta, sacudió al país y particularmente a Sinaloa. Habrá que ver lo que viene.

La otra lucha. Las instalaciones universitarias amanecieron ayer en medio de un duelo de volanteo. Unos a favor de que se realice la “encuesta” con la que el Congreso del Estado pretende lograr la reforma a la Ley Orgánica de la UAS. Y otros que se manifiestan en contra de lo que consideran una flagrante violación a la autonomía de parte del Congreso del Estado. Fue el de ayer el preámbulo de lo que viene para este 11 y 12 de septiembre, días que el Congreso del Estado anunció que realizará la encuesta

Ya las posiciones están más que cantadas. El Congreso decidido a llevar a cabo esa acción. Y la Universidad con el acuerdo de defender la autonomía.

El juego de Feliciano. ¿Quién emboleto al Gobernador en esta riesgosa acción contra la UAS?. Todo parece indicar que fue el líder del Congreso del Estado Feliciano Castro. A Feliciano se la acabó el tiempo. Está a unas semanas de entregar el cargo. Y podría estarse jugando su último cartucho que le pudiera servir a él para llegar a la Secretaría General de Gobierno. Aún perdiendo estaría vendiendo la idea al Gobernador de que es conveniente que él siga adelante pero ahora desde la Secretaría General de Gobierno. Si la gana y dobla a la UAS, cree seguramente que le garantiza su llegada. Feliciano convenció al Gobernador de ir en esta encuesta a la UAS. Y el mandatario le “compró” la idea.

Lo delicado es que Feliciano en sus afanes de alcanzar la Secretaría General de Gobierno pareciera que no le importó poner en un mayor riesgo al Gobernador Rubén Rocha Moya. En las actuales circunstancias que se viven en el estado. Otro conflicto agravaría la situación. ¿Por qué no actuar sensatamente?. Podrían estar dejando ir la posibilidad de un arreglo.

Presiones al tope. El Gobierno federal y su partido Morena con sus aliados intensificaron las presiones para “doblar” a por lo menos un Senador de oposición para que la reforma judicial sea aprobada en el Cámara de Senadores. Y al parecer ya encontró a quien “doblar”. Ayer por la tarde-noche corrió la versión de que el Senador panista de Veracruz Miguel Ángel Yunes era quien abandonaba el bloque de los 43 senadores para pasarse a Morena y de esa manera darle paso a la aprobación de la cuestionada reforma judicial

. Apenas el pasado mes de julio, ya como Senador electo, la Fiscalía estatal de Veracruz donde gobierna Morena, expidió una orden de aprehensión en contra de Yunes, por falsificación de documentos. Júrelo, apretaron los “tornillos”. Ya se había adelantado que el Gobierno federal estaba por utilizar las instituciones y echar mano de todo para “convencer” u obligar a que se doblaran algunos senadores de la oposición. En este caso parece que no lo convencieron, “lo doblaron”.